3. DIOS: Se escribe
incluyendo el número de
la camiseta de Maradona,
o sea un 10 en el lugar de I
– O.
EL ALTAR: En el altar de la
Iglesia Maradoniana está
una réplica del ex jugador
Diego Armando Maradona
usando el uniforme de la
selección Argentina de
fútbol. El altar está
instalado en un bar en la
ciudad de Rosario, Provincia
de Santa fe, a 300 Km. De
Buenos Aires.
LOS SACERDOTES:
ocho hombres
vestidos con túnicas
blancas llevan entre
sus manos un balón
con una corona de
alambre simulando ser
la de Cristo.
4. LOS MIEMBROS:
Actualmente unas 80 mil
personas provenientes
desde tierras lejanas como
Islandia y Vietnam se
hicieron miembros de la
Iglesia vía Internet a través
de su sitio web.
CRISTO: “Somos todos
católicos romanos”, explicó
Alejandro Verón, y agregó:
“Nosotros tenemos un Dios de
razón, el cual es Cristo, y un
Dios del corazón, que es
Diego”.
EL ARBOL DE NAVIDAD:
Un árbol de Navidad,
adornado con 33 balones
y el botín simbolizan los
34 goles que convirtió
Maradona para su
selección.
5. Diego Nuestro
Diego nuestro que estas en la tierra,
santificada sea tu zurda,
Venga a nosotros tu magia,
háganse tus goles recordar,
así en la tierra como en el cielo.
Danos hoy una alegría en este día,
y perdona aquellos periodistas
así como nosotros perdonamos
a la mafia napolitana.
No nos dejes manchar la pelota
y líbranos de Havelange…
Diego.
D10s te Salve
Dios te salve pelota.
Llena eres de magia,
el Diego es contigo.
Bendita tú eres entre todas las demás
y bendito es el Diego que no te deja
manchar.
Santa redonda, madre del gol
ruega por nosotros los jugadores
ahora y en la hora de nuestro encuentro…
Diego.
Creo
Creo en Diego.
Futbolista todopoderoso,
Creador de magia y de pasión.
Creo en Pelusa, nuestro D10s, nuestro
Señor.
Que fue concebido por obra y gracia de Tota
y Don Diego.
Nació en Villa Fiorito,
Padeció bajo el poder de Havelange,
Fue crucificado, muerto y mal tratado.
Suspendido de las canchas.
Le cortaron las piernas.
Pero él volvió y resucitó su hechizo.
Estará dentro de nuestros corazones,
por siempre y en la eternidad.
Creo en el espíritu futbolero,
La santa Iglesia Maradoniana,
El gol a los ingleses,
La zurda mágica,
La eterna gambeta endiablada,
Y en un Diego eterno.
Diego