Intervención en el Master de Estudios Interdisciplinares de Género de la Universidad Rey Juan Carlos, con una charla bajo el título: "Liderar, Comunicar, Feminizar" (11.11.2010) (Documento 4)
4. Decálogo
para la feminización
de la comunicación política
No renunciar a mostrar las emociones, aunque sean íntimas.
La política es idea, gestión, poder y emoción. Quien renuncie a
las ideas para gestionar será un burócrata. Quien renuncie a
las emociones para ganar el poder, será un autoritario.
Quien no se emociona nunca podrá comprender el ánimo de
los demás.
1. Hablar con el corazón
5. Entender que la belleza es un atributo de la representación
pública es una oportunidad para la nueva política. Los
ciudadanos confían en quien se viste y se arregla para
representarles con dignidad. Cuidar tu imagen física, como
una actitud vital de preocupación por la salud y la vida natural
ofrece un perfil de belleza alejado de los patrones estéticos y
los prejuicios sociales.
2. La belleza es política
6. Desarrollar un comportamiento comunitario creativo y
dinámico como base de la acción política supone una nueva
relación entre el líder y los ciudadanos y sus organizaciones.
Mejor cómplices que seguidores; mejor activistas que
electores; mejor libres y creativos para actuar que repetidores
de consignas.
3. Pensar en términos de comunidad
7. La política que habla y se preocupa de la vida de las personas
es el escenario central de la feminización de la política. Más
proximidad a los problemas diarios: conciliación, igualdad de
oportunidades y de retribuciones, educación, el trabajo como
derecho y realización. Y una nueva mirada a las patologías de
la sociedad: la soledad, el aislamiento, la tristeza, la
insatisfacción, el dolor, el miedo…
4. Priorizar la vida cotidiana
8. Sea de género o cualquier otra. Un combate constante, sin
descanso, decidido. La defensa de la pluralidad y la diversidad
es la antesala de la política del diálogo y del acuerdo. La nueva
comunicación explora el acuerdo a través del reconocimiento
de la alteridad. La comunicación se convierte en una
conversación multilateral y abierta.
5. Combatir sin cuartel la discriminación
9. Casi lo más difícil. Siglos de lenguaje y pensamiento
androcéntrico nos atenazan y nos dirigen, muchas veces sin
darnos cuenta. Hay que educarse y educar. Necesitamos un
lenguaje siempre inclusivo. Nuestras palabras, y sus imágenes
asociadas, dibujan realidades conceptuales que tienden a
reducir la realidad, a simplificarla.
6. Un lenguaje no sexista
10. La feminización de la política impulsa la recuperación de los
valores morales y éticos como base de la nueva política.
Ganan las ideas políticas que nos humanizan, que nos hacen
más espirituales, más profundos, más intensos. La política que
recupera las grandes palabras, las que trascienden y dan
dimensión moral a la gestión. La política de la esperanza.
7. Los valores como motor
11. Dominar el medio dominante, como decía McLuhan. Hoy, en la
red, en el mundo digital. Convertir la comunicación en
conversación, en participación colectiva. Dispuestos a escuchar
y a dejarse influir. Experimentar la cultura digital como una
nueva forma de organizarse, de pensar las propuestas y de
comunicarlas. La red como medio y como paradigma de la
política.
8. Liderar la conversación
12. En las propuestas, en las dificultades, incluso en las dudas. La
sinceridad y la claridad como garantía de transparencia y
simplicidad, para -precisamente- abordar la complejidad de la
gobernabilidad y de los retos con lo fundamental, con lo
nuclear. No hay tiempo que perder. Las dificultades del
planeta y la humanidad reclaman soluciones y propuestas
fundamentales, decisivas, básicas. Claridad ante la oscuridad
de la incertidumbre.
9. La política de la claridad
13. Recuperar la expresión artística y las artes visuales para la
comunicación del pensamiento social y político. Pensar con las
nuevas visualizaciones de mapas, gráficos y simulaciones.
Imaginar las ideas, imaginando sus iconos y sus símbolos.
Conectar los sueños y las propuestas con su visión, con su
representación. Imágenes para cambiar el mundo.
10. Pensar con imágenes