Este documento propone una metodología para realizar auditorías éticas en las empresas. Explica que la auditoría ética busca evaluar el cumplimiento de las expectativas sociales y fomentar la transparencia. Luego, detalla un proceso de tres pasos para las auditorías éticas: 1) definir los valores y intereses en juego, 2) identificar a los grupos afectados, y 3) integrar perspectivas objetivas y subjetivas a través de indicadores. El objetivo final es generar un informe que evalúe de manera integral la relación entre la
Las sociedades anónimas en el Perú , de acuerdo a la Ley general de sociedades
ÉTICA EMPRESARIAL 9. La auditoría ética
1. LA EMPRESA ÉTICA
9. La auditoría ética
No se vive si no se sabe Baltasar Gracián
2. LA EMPRESA ÉTICA
A partir de
GARCÍA MARZÁ, Domingo, Ética empresarial: Del
diálogo a la confianza, Madrid, Trotta, 2004
Con el propósito de difundir a través de la web una propuesta de
diseño de empresa ética y de facilitar una herramienta que permita
evaluar los beneficios y ventajas de la empresa así concebida
Resumen crítico de la obra:
http://es.scribd.com/doc/117392925/Etica-empresarial-Del-dialogo-a-la-confianza
Presentación elaborada por Asunción Velilla
asuncionvelilla.blogspot.com
3. Objetivo: Proponer una metodología para la realización de
auditorías éticas que se ajuste a la propuesta de la ética
empresarial.
La auditoría ética se entiende desde la oportunidad y
conveniencia de elaborar un sistema de información pública
sobre el comportamiento ético de la empresa.
Con este sistema de información se procura argumentar la
transparencia y credibilidad de la apuesta ética de la empresa.
Esta propuesta es parte del sistema integrado de ética, que se
ha desarrollado en las anteriores presentaciones del tema:
códigos de ética y comités de ética.
Los códigos éticos son creibles si se integran en un mecanismo
eficaz para la generación de confianza, incluído el mismo
procedimiento, es decir, el sistema integrado de ética.
4. La auditoría ética se diferencia de otras auditorías, incluída la
tradicional auditoría contable.
El objetivo de la auditoría ética es reflejar el grado de
cumplimiento de las diferentes expectativas sociales con las
que se desarrolla la confianza en la empresa.
De ahí que ofrezca instrumentos para la verificación y
justificación de los valores y de las conductas o normas a
que da lugar.
Utiliza un método de análisis y diálogo donde nacen las
sugerencias y se descubren nuevos caminos para la
articulación del beneficio social y el beneficio económico.
Propone la gestión de los recursos morales, gracias a la
información que ofrece y al debate y las sugerencias para la
gestión del cambio que posibilita.
5. La auditoría ética pertenece a la gestión del riesgo en la
empresa. Es instrumento para el diálogo de todos los actores
en la resolución de conflictos y su prevención.
De la auditoría ética como recurso moral, se derivan una serie
de ventajas:
1. Ofrecer una herramienta para la toma de decisiones,
identificación de conflictos y reducción de costes de
coordinación internos y externos
2. Determinar los intereses en juego y, con ello, favorecer el
diálogo entre los diferentes grupos como procedimiento para la
resolución de conflictos
3. Definir un elemento clave para la reputación y buena imagen
de la empresa
4. Potenciar la diferenciación de la empresa dentro del
mercado, el Estado y la Sociedad Civil
5.Favorecer la innovación, la creatividad y la competitividad de
la empresa
6. Los orígenes de la auditoría ética se encuentran en el
balance social, es decir, la presentación de cuentas sociales
y la relación entre empresa y sociedad. Relación de hecho y
de deber.
Con el balance social se procuraba la integración de los
intereses económico-financieros de la empresa con los
intereses de los trabajadores y de la sociedad en general,
esto es, lo económico, social y ecológico. El propósito: dar
razón de cómo utiliza la empresa los bienes sociales de los
que es depositaria.
La historia del balance social, reciente, se extingue en los
años 90s a merced del concepto de Estado de bienestar, que
relega el papel de la empresa a la obtención de beneficios y
al cumplimiento de las leyes y que constriñe el balance social
a un concepto dual de la empresa (trabajadores y
propietarios directivos). Limita así su capacidad de reacción
ante la realidad social.
7. El escenario hoy es diferente:
El papel del Estado no es determinante en la realidad global.
La misma globalización ha acabado con la división entre
Estado y Sociedad Civil. Bien por la creciente burocratización
y consiguiente falta de eficacia, bien por la mundialización de
la economía, donde el marco legal de la responsabilidad
social y ecológica constituyen un mínimo exigible, pero no
suficiente para responder por las exigencias sociales, de las
que, por otra parte, depende la credibilidad y la suerte de la
empresa.
Este nuevo escenario está plasmado en documentos no solo
europeos -de los que el Libro Verde de la Comisión Europea
es un ejemplo- sino también internacionales y que hemos
recogido en nuestra presentación nº 7 Los códigos éticos.
8. La auditoría ética es un concepto amplio de información que
recoge los tres niveles en que se divide la responsabilidad de
la empresa: económico, legal y ético.
¿Qué aporta la ética empresarial para la elaboración de un
nuevo balance social que responda a las exigencias actuales
de relación empresa-sociedad?
Una propuesta de metodología integrada
El concepto de empresa, que se sustenta en la ética
empresarial dialógica, es el de una institución social donde
solo el acuerdo entre los diferentes grupos de implicados y/o
afectados sobre la satisfacción de sus respectivos intereses
legítimos puede dar razón, a su vez, de la legitimidad y
credibilidad de la empresa.
9. El aporte de la ética empresarial se centra en el diálogo, no
solo como objetivo del balance, sino también como
procedimiento para su elaboración.
La responsabilidad del balance, de la presentación de
cuentas, corresponde al equipo directivo, pero su realización
no puede detenerse en el consejo de administración o en los
departamentos de comunicación.
El paso del balance a la auditoría viene dado por el principio
de publicidad, por el carácter público tanto de los informes
como de todo el proceso de elaboración.
De ahí que en la presente propuesta, la vigilancia y control de
la auditoría ética quede bajo el comité de ética: el “espacio
donde todos tienen voz” Kant. Al respecto presentación 8. El
comité de ética.
10. Desde la idea moral del diálogo y posterior acuerdo una
auditoría ética necesita combinar dos metodologías:
Debe averiguar las condiciones normativas que subyacen al
diálogo.
Ha de contar con la participación de todos los grupos de
intereses afectados y/implicados.
De aquí se desprenden tres pasos:
1- Definición del marco normativo de actuación:
Desde el que establecer qué intereses en juego son legítimos o
no, y desde el que introducir intereses legítimos que no tengan
voz propia.
El propósito es diferenciar entre intereses generales, y por lo
tanto comunes a todos los interlocutores involucrados, e
intereses propios de cada individuo o grupo.
11. Los intereses comunes constituyen valores mínimos que se
plasman en intereses generales, que fundamentan el marco
constitucional empresarial encargado de establecer las
reglas básicas para la posterior definición de las relaciones y
estrategias entre los grupos.
Desde la ética empresarial dialógica es posible ofrecer un
decálogo que se presenta como imprescindibles para hablar
de legitimidad o credibilidad de la empresa.
La función básica de estos valores debe buscarse en la
construcción posterior de sus indicadores, siempre
atendiendo a la necesidad de concreción en cada contexto y
situación particular.
12. Decálogo
1. Integridad: Coherencia entre lo que se dice y se hace
2. Credibilidad: Fiabilidad de las expectativas puestas en la
empresa
3. Justicia: Distribución equitativa de cargas y beneficios
4. Diálogo: Posibilidad de participación y mecanismos de
consenso entre los diferentes grupos implicados y/o afectados
5. Transparencia: Veracidad, inteligibilidad y accesibilidad en las
estructuras comunicativas internas y externas
6. Dignidad: Respeto y fomento de los Derechos Humanos y de
los valores implicados en el reconocimiento recíproco de las
personas
7.Legalidad: Cumplimiento de leyes y disposiciones vigentes
8. Compromiso cívico: Contribución al desarrollo local y
regional, corresponsabilidad con el orden social
9. Ecología: Posición ante el mantenimiento y mejora del medio
ambiente
10. Responsabilidad: Capacidad de respuesta ante las
expectativas y demandas sociales
13. 2- Determinación de los diferentes grupos de intereses a partir
de los intereses básicos:
Incluyendo todos. Cualquier intento de ignorar o suprimir alguno
es un primer paso al fracaso empresarial.
La metodología de los Stakeholders hace un aporte básico en la
definición de los grupos “implicados en” y “afectados por” las
decisiones empresariales.
El objetivo de esta metodología es ofrecer una visión global de
la empresa, un mapa de la red de relaciones que dan carácter a
la actividad empresarial y de la magnitud que, en cada caso,
alcanza la responsabilidad de las acciones o decisiones.
Proporciona una descripción detallada de cada una de las
expectativas de los grupos de implicados, de las obligaciones
morales de la empresa hacia éstos; y de las estrategias
corporativas más adecuadas de relación de los grupos con la
empresa y entre ellos mismos.
14. Representatividad o participación vicaria de unos grupos a
través de otros
Este es el caso de las futuras generaciones afectadas por
nuestra responsabilidad medioambiental y de las
generaciones presentes sin capacidad de hacer oir sus
intereses.
A la hora de definir y plasmar los intereses, el diálogo asume
el papel decisivo. Los intereses se estructuran a través de
valores, deseos y expectativas que orientan nuestras
acciones personales y colectivas y que sometidos a la
racionalidad o lógica ética desentrañan valores universales.
De ahí que nadie pueda convertirse personalmente en
criterio de validez. Los intereses deben estar siempre
dispuestos a la revisión y encontrar su límite lógico en los
objetivos de la empresa como institución.
15. 3- Integración de ambas perspectivas en indicadores que
permitan la sistematización y evaluación:
Cabe aprovechar las experiencias previas y revisarlas en el
ámbito metodológico que ofrecen los grupos de intereses. Pues
es necesario reconocer los intereses en juego y valorar su
grado de realización.
Indicadores objetivos o cuantitativos: Encargados de medir los
estados, hechos o condiciones que pueden ser observados y
verificados por auditores externos. Pueden cuantificarse en
términos de costes monetarios, escalas, intervalos, etc.
Configuran la perspectiva de tercera persona o espectador.
Indicadores subjetivos o cualitativos: Encargados de medir la
percepción que tienen los sujetos implicados. Pueden
recogerse a través de entrevistas, encuestas, grupos de
discusión, etc. Configuran la perspectiva de primera persona o
participante.
16. La auditoría ética debe recoger ambas perspectivas,
posibilitando así la integración y evitando las visiones
parciales.
La plasmación de estos tres pasos en un documento
conforma la estructura básica de la auditoría ética,
entendida como una revisión y adecuación del balance
social clásico.
17. Presentación elaborada a partir del texto de GARCÍA
MARZÁ, Domingo, Ética empresarial: Del diálogo a la
confianza, Madrid, Trotta, 2004, pp. 277- 290
Resumen crítico de la obra:
http://es.scribd.com/doc/117392925/Etica-empresarial-Del-dialogo-a-la-confianza
Presentación elaborada por Asunción Velilla
asuncionvelilla.blogspot.com