LABERINTOS DE DISCIPLINAS DEL PENTATLÓN OLÍMPICO MODERNO. Por JAVIER SOLIS NO...
Para que yo me llame Angel González
1. ÁNGEL GONZÁLEZ “ha pasado un ángel que se llamaba luz o fuego o vida… y lo perdimos para siempre” CARLA BESCHI BELÉN MONTESINO
2. ÁNGEL GONZÁLEZ Oviedo 1925. Su padre murió cuando el tenía 18 meses. Un hermano fue asesinado por el bando Franquista. Otro se exilió. 1943 enferma de tuberculosis y en Páramo de Sil es donde empieza su recuperación, se aficiona a la lectura y empieza a escribir sobre él. 3 años mas tarde se recupera y estudia derecho.
3. 1950 se va a Madrid donde estudiará periodismo. 1954 se hace Técnico de obras públicas y va a Barcelona donde conoce a un circulo de poetas. 1956 publica Áspero mundo. Vuelve a Madrid donde conoce a poetas de su generación (Gabriel Celaya). 1961 Generación del 50. 1970 fija su residencia en Estados Unidos y empieza a dar clases en universidades.
4. 1993 se jubila y se casa con Susana Rivera. Tras la jubilación continuó vivió en Nuevo Méjico. Recibió muchos premios, Príncipe de Asturias de las letras y Premio Internacional Salerno de Poesía. 12 de Enero del 2008 fallece en Madrid a causa de una insuficiencia respiratoria.
5.
6. Nos muestra el camino del individuo como un sendero paralelo al que sigue la historia
14. Prosificación: En la primera estrofa del poema el poeta expresa el planteamiento general de todo el poema que es:Para que yo me llame Ángel González, para que mi ser pese sobre el suelo, fue necesario un ancho espacio y un largo tiempo:
15. Es decir, que para ser Ángel González, su persona, ha tenido que pasar un largo tiempo: Solsticios y equinoccios alumbraron con su cambiante luz, su vario cielo, el viaje milenario de mi carne trepando por los siglos y los huesos. Sin embargo, pese a que se necesite mucho tiempo y esfuerzo para la realización de uno mismo, al fin y al cabo no somos nada ni nadie; cómo él mismo expresa: yo no soy más que el resultado, el fruto, lo que queda, podrido, entre los restos;
16. Finalmente, la última parte del poema coincide con una reflexión de su propia existencia, que se resiste a ser vencida: un escombro tenaz, que se resiste a su ruina, que lucha contra el viento, que avanza por caminos que no llevan a ningún sitio. El éxito de todos los fracasos.