1. 2.1 APROXIMACIÓN AL CONCEPTO DE FAMILIA.
Según la OMS se entiende por familia “a los miembros del hogar emparentados entre
sí, hasta un grado determinado, por sangre, adopción y matrimonio. El grado de
parentesco utilizados para determinar los limites de la familia dependerá de los usos a
los que se destinen los datos y por lo tanto, no puede definirse con precisión a escala
mundial”.
2.1.1 La familia desde punto de vista jurídico.
El ordenamiento español no establece una definición de familia sin embrago desde la
misma Constitución como desde el derecho de familia se ha ido regulando la realidad
familiar existente en cada momento.
La familia en la Constitución.
En la Constitución Española de 1978 se pueden apreciar una serie de principios que
suponen una aproximación al concepto de familia.
Por el artículo 14: a partir de la Constitución los cónyuges pasan a ser iguales ante la
ley.
En artículo 32 introduce la posibilidad de disolver el vínculo del matrimonio y contraer
un nuevo matrimonio.
En el artículo 39 implica la no discriminación de los hijos por razón de nacimiento. Y
considera que la familia, como elemento social esencial de la sociedad tiene derecho a
una protección social, jurídica y económica adecuada para lograr su pleno desarrollo.
Aparece en la constitución la regulación de la familia separada de la del matrimonio. La
familia a la que se refiere la Carta Magna, como núcleo de relaciones personales y
afectivas, alberga múltiples formas de convivencia que ya no son únicamente
matrimoniales y que alcanzan a todo el aquel grupo humano que convive de manera
estable y reconoce el derecho de todas ellas a la protección que la Constitución
garantiza y al respeto de la dignidad e igualdad de todos sus miembros.
Regulación de las relaciones de parentesco.
La familia se puede considerar como una unidad social formada por un grupo de
personas unidas por las relaciones de parentesco.
El código civil concreta estas relaciones de parentesco con efectos jurídicos cuando se
rigen por lazos de consanguineidad, afinidad o adopción.
Relaciones de consanguineidad: Personas que lleven la misma sangre es decir,
que proceden de un ascendiente común. Ej: madre, padre, hermanos.
Relaciones de afinidad: son las relaciones directas e indirectas ocasionadas por
unión matrimonial o reconocimiento legal. Pertenecen: esposa, cuñados,
suegros, etc.

2. Relaciones de adopción: Cuando el vínculo nace en virtud de un acto legal.
2.1.2 La familia desde la perspectiva antropológica.
Desde esta perspectiva parece aceptado que la familia posee raíces naturales y se
coincidir al considerarla como una institución social que se desarrolla formalmente en
todas las culturas y a lo largo de todas las épocas. Esto parte del hecho de que todas
las sociedades han tenido la necesidad de estructurar, regular y organizar la
procreación y reproducción de sus miembros.
Definir la familia desde una perspectiva antropológica suponer indagar en el conjunto
de las relaciones que se producen a través de las uniones de tipo biológico (filiación) o
de aquellas que se generan a través de alianzas (uniones de hecho y matrimonios) y
también, como en ocasiones, se produce una ruptura de dichas alianzas (separación o
divorcio).
La filiación.
Es un proceso por el que se adscribe a un individuo a un grupo desde su nacimiento y
para siempre. A través de la afiliación se determinan los ascendentes, descendientes y
los colaterales, que suelen estar definidas tanto por la consanguinidad (hermanos de
sangre) como por ciertas relaciones reconocidas culturalmente (adopción).Estas
relaciones familiares forman una red de parientes más o menos próximos que
llamamos parentela.
En nuestra sociedad se consideran parientes tanto la familia por parte de la madre
como por parte del padre, lo cual da lugar a un numero extenso de parientes que
llamamos parentela Esta red de parentesco constituye le marco de ayuda y solidaridad
de organización de vía y relaciones con los demás.
El matrimonio y las uniones de hecho.
La alianza o la unión de dos personas, ya sea mediante el matrimonio o simplemente
mediante la convivencia en lo que se ha llamado uniones o parejas de hecho, el punto
de partida de la formación familiar.
Para la antropología el matrimonio es una forma de institucionalización que supone la
aceptación y respeto de la nueva pareja por parte de la sociedad y el reconocimiento
de sus hijos. Además es la culminación de un proceso más o menos complejo de
elección de pareja, que puede ser libre, como en la sociedad actual o restringida a unas
reglas que determinan quien puede pretender casarse con determinada persona.
Estas reglas pueden obligar a buscar un cónyuge fuera del propio grupo (exogamia) lo
que favorece las relaciones entre dos grupos diferentes, o bien, puede obligar a elegir
una pareja dentro del propio grupo (endogamia) eso si siempre fuera del propio
circulo familiar para evita el incesto.

3. La separación o divorcio.
Es una institución prácticamente reconocida en todas las sociedades. Las causas que lo
justifican pueden ser de diferente índole: esterilidad, maltratos, adulterio, etc.
El matrimonio ha sido una institución prácticamente indisoluble durante muchas
décadas en los países de tradición católica ya que la Iglesia ejercía fuertes presiones
para que así fuera. A consecuencia de ello regían ciertas formas de supeditación de la
mujer que dependía social y económicamente del marido. Otra consecuencia era el
estigma social que generaba, pues estar separado o divorciado no estaba socialmente
bien visto, especialmente en mujeres.
En la actualidad el divorcio es una práctica común muy extendida, sobre todo por la
idea de que la relación de pareja ha de ser gratificante y satisfactorias por encima de
los intereses económicos familiares. Hay que tener en cuenta que la incorporación de
la mujer al mundo laboral y el reconocimiento de sus derechos individuales han
facilitado que esta pueda desvincularse de una relación conflictiva o poco satisfactoria.
Por otro lado las personas separadas o divorciadas pueden volver a constituir una
familia mediante un nuevo matrimonio, con lo cual se producen nuevos conceptos de
relaciones familiares. Algunos individuos establecen más de una familia a través del
vínculo del matrimonio, produciéndose lo que se denomina monogamia en serie.
2.1.3 La familia desde el punto de vista sociológico.
A nivel mundial, se están produciendo importantes cambios en la familia, sobre todo
por la influencia de la cultura occidental, que ha exportado la idea del amor romántico
al resto del mundo y también por determinadas políticas gubernamentales que luchan
por alterar los conceptos y los comportamientos tradicionales de la familia.
En general, las tendencias que se están produciendo a nivel mundial se pueden
sintetizar en:
Una reducción de la familia extensa y un mayor predominio de la familia
nuclear.
El reconocimiento de los derechos de las mujeres (facilita la elección del
marido) y de los niños.
Un mayor reconocimiento de las libertades sexuales.
A partir de estas tendencias, siguen conviviendo diversos tipos de familias, que
pueden presentar grandes diferencias entre sí, tanto en estructura como en
funciones. Se pueden establecer varias dimensiones de agrupaciones
familiares.
Familia tradicional versus familia moderna.
La familia tradicional se caracteriza desde punto de vista de las funciones de sus
miembros, por la existencia de una estricta diferenciación de las funciones basadas en
el sexo y la edad de sus componentes. Generalmente el que trabaja fuera de casa es el
padre y la mujer compagina la crianza de los hijos y el cuidado de las personas mayores
con las tareas domesticas.

4. Este tipo de familia destaca la presencia de relaciones conyugales y paternofiliares de
dominio y obediencia, que concretan en la dependencia de niños, jóvenes y mujeres. Si
se extiende a autoridad hay una preeminencia de la autoridad del padre sobre hijos y
la mujer.
Otro rasgo característico es que el matrimonio se decide más por determinadas
normas sociales que por afecto. Condenan y prohíben el divorcio, la anticoncepción, el
aborto.
En la familia moderna en cambio, los roles familiares son mas flexibles, la autoridad
paterna y marital se debilita porque es compartidas por ambos cónyuges y se produce
una relación de igualdad entre el hombre y la mujer. Otro rasgo básicos de este tipo de
familia se refiere a la decisión del matrimonio, que es libre y se fundamenta en una
relación viva generalmente de afecto la guía de la elección conyugal. También son
destacables la privacidad y la estrecha vinculación afectiva entre padres e hijos.
Dentro del amplio abanico de posibilidades que ofrece esta tipología, se pueden
encontrar algunas acepciones:
Familia de doble carrera: cuando existe un paralelismo de funciones entre los
miembros de la pareja, cuando ambos trabajan fuera de casa y cuando la
profesión de la mujer es importante.
Familia semitradicional: cuando la mujer trabaja fuera del hogar pero
mantiene el rol que desempeñaba en la familia tradicional.
Familia nuclear versus familia extensa.
La familia nuclear considera que en su círculo solo entran el padre, la madre y los hijos
que viven con ellos. Actualmente este es el tipo de familia más extendido en España y
en general en todas las sociedades postindustriales .Dentro de la familia nuclear se
pueden concretar diferentes acepciones.
Familia con un solo hijo.
Familia numerosa (tres hijos o más).
Familia uninuclear o nuclear simple: matrimonio sin hijos solteros.
Cada una de estas acepciones tiene características especiales que influyen en la
educación o en las relaciones paterno filiares EJEMPLO SI O NO.
La familia extensa: podemos dos acepciones: polinuclear o ampliada.
o Polinuclear: cuando agrupa varios núcleos familiares o cuando
conviven varias generaciones.
o Ampliada: cuando la familia nuclear se añaden otros parientes
como tíos.

5. Las familias extensas son propias de sociedades mas tradicionales en las que la propia
familia se encarga de realizar la mayor parte de las funciones asistenciales y
educativas.
Nuevas transformaciones, nuevos tipos de relación familiar.
La familia actualmente esta sujeta a múltiples transformaciones. Las nuevas técnicas
de reproducción asistida y los avances tecnológicos plantean nuevos supuestos de
filiación y relaciones familiares.
El aumento de uniones de hecho con proyección externa y reconocida socialmente
alumbran nuevas formulas de convivencia que tiene derechos y efectos jurídicos son:
Familias agregadas: aquellas parejas que viven juntas pero sin haber
formalizado el matrimonio .Se podrían incluir las parejas de hecho.
Familias monoparentales: Se da convivencia de un solo miembro de la pareja
con hijos no emancipados, es decir, cuando un solo progenitor se encarga de
cuidado y la educación de los hijos. Las causas pueden ser:
o Natalidad: madres solteras (embarazos no planificados o bien fruto de
una opción personal).
o Relación matrimonial: divorcio, separación, viudedad.
o Ordenamiento jurídico: adopción.
o Situaciones sociales: privación de libertad de uno de los cónyuges o
migración.
Familias educadoras: se trata de una persona o familia que realiza una acogida
familiar como medida de protección de un menor declarado en desamparo,
asumiendo las obligaciones d velar por él, tenerlo en su compañía, alimentarlo,
educarlo y procurarle una formación integral.
Familias separadas o divorciadas a: aunque siguen siendo familias
monoparentales puesto que uno de ellos tendrá la custodia de los hijos,
algunos de los riesgos son: que el hijo adquiera el rol parental, que los hijos se
sientan escindidos emocionalmente, que se deshagan subsistemas fraternos,
etc.
Familias reconstruidas: Se producen por una nueva relación comprendida con
otra persona, por uno de los dos o ambos cónyuges, después de una separación
o divorcio. En la nueva familia es frecuente que los hijos sean diferentes padre
o madres siendo mayor el número de hijos que en las formas nuclear o
monoparental. Este tipo de relaciones puede conllevar algunos riesgos: que
manifiesten lealtades dividas en los hijos, que no se calibren las dificultades
para incorporar a la nueva familia como los propios hábitos, costumbres y
normas en las que no ha existido una tradición anterior, etc.
Familias homosexuales: Implica un concepto debatible ya que se detecta una
tendencia universal la emergencia y reconocimiento de este tipo de

6. organización familiar, vigente en nuestra legislación, que supone una relación
entre dos personas del mismo sexo. Los hijos llegan por intercambios
heterosexuales, por adopción o por procreación asistida.
Familia de cónyuges solos. Se producen el momento en el que emancipan los
hijos o aquellos matrimonios que no tengan hijos.
Familias monofiliares. Se dan los hijos son adultos y conviven con sus padres
cuyas causas pueden ser: opten por quedarse con sus padres por longevidad de
estos, por falta de recursos económicos para emanciparse, por la comodidad,
etc.
2.1.4 La familia como institución social.
Necesidades que se cubren en la institución familiar.
La familia además de cubrir las necesidades básicas de todo orden (afectivos,
materiales, etc.)Tiene como fin primordial la sociabilización de sus miembros, la
autonomía y la identidad. Se puede decir que en la familia se satisfacen las siguientes
necesidades:
Sexual: búsqueda y encuentro afectivo con la pareja además de la base
reproductora.
Económica: la familia desarrolla sus capacidades y habilidades para
satisfacer y mantener las necesidades materiales.
Social: A través de ella se transmiten la cultura, los valores, las
tradiciones, las normas y los principios base para la integración en la
sociedad.
Afectiva: se expresan sentimientos de amor, lealtad, reconocimiento y
apoyo.
De apoyo: La familia es el principal refugio donde se encuentra apoyo y
ayuda en los momentos de crisis.
Funciones básicas que cumple la familia.
La familia cumple unas funciones básicas tanto respecto de sus propios miembros
como ante la sociedad.
Funciones de la familia respecto de sus propios miembros. Algunas funciones
son:
o Vinculación íntima y permanente entre los miembros del grupo familiar.
o Crianza y manutención biológicas y psicológicas de los hijos.
o Socialización según las pautas culturales de la familia y de la sociedad.
o Asignación de valores.
o Producción y consumo como mini-unidad económica.

7. o Preparación de los hijos para la formación de sus propias unidades
familiares.
o Desarrollo personal de los hijos.
o Meta común de mantener la propia identidad y la cohesión familiar.
Funciones de la familia hacia la sociedad. Son las siguientes:
o Representación de los hijos ante la sociedad.
o Colaboración en el mejoramiento de la calidad de vida propia y ajena.
o Relación y ayuda a otras familias de su comunidad.
Reglas, roles y dinámica familiar.
Cuando la familia no cumple sus funciones se dan problemas, tanto en el crecimiento
como en la maduración de sus miembros como en su relación con la comunidad: malos
tratos, abandonos, ausencia de pautas culturales, hábitos inadecuados, desarraigo,
etc.
Puede decirse que las familias que tiene un adecuado funcionamiento tienen una serie
de características:
Control: modo de mantener el orden o de imponer una disciplina que ayude a
conseguir las metas establecidas. Cada familia tiene unas reglas que colaboran
en el desarrollo familiar. Hay que destacar la importancia del proceso de toma
de decisiones en el aprendizaje social de los pequeños.
Asignación de roles. Los conflictos pueden surgir por diferentes actitudes en
cuanto a reglas, normas por introducidas por cada miembro de la pareja desde
su familia de origen así como por la comunicación inadecuada entre ellos, por
una discrepancia en sus objetivos, intereses, etc. Es muy importante la manera
en que la familia consiga resolver los diferentes conflictos: va a ser esencial
para la convivencia e incluso la continuidad familiar.
Desarrollo personal. Cada miembro de la familia necesita que esta le
proporcione las posibilidades para desarrollarse individualmente, formar en el
futuro su propia familia. Las experiencias vividas en la familia sirven al individuo
como pautas de formación de nuevas unidades familiares.
La cohesión familiar.
Todas las necesidades, funciones y características que hemos visto se podrán
desarrollar con + o – efectividad en función del nivel de cohesión que exista en el seno
familiar.

8. Entendemos por cohesión familiar a la fuerza de los lazos que unen a los miembros de
una familia. La cohesión son conductas como hacer cosas juntas, tener los mismos
intereses, tener las mismas amistades, etc.
El grado de cohesión está relacionado con la diferenciaron de cada uno de sus
componentes. Así una diferenciación extrema amenaza con desintegrar la familia y la
cohesión excesiva amenaza con constreñir el espacio para el crecimiento personal.
2.2 EL CICLO DE VIDA FAMILIAR.
Además de formas una estructura compuesta por roles y funciones de cada uno de sus
componentes, la familia puede contemplarse como proceso. Evolucionan a medida
que sus miembros se desarrollan y evolucionan, presentando rasgos característicos de
cada momentos además de unas necesidades funcionales y tareas determinadas.
Como modelo de ciclo familias vamos a considerar el que hace referencia al modelo
nuclear. Consideramos 3 etapas cada una de ellas dividida en varias subetapas:
Etapa I. Constitución (etapa prefilial)
1. Elección de la pareja y noviazgo.
2. Matrimonio o cohabitación.
Etapa II. Extensión (etapa filial)
1. Transicion a la paternidad
2. Familia con hijos en edad escolar.
3. Familia con hijos adolescentes.
Etapa III. Reducción.
1. Mitad de la vida o nido vacío.
2. Los últimos años de la vida.
También hay que resaltar que existen dos hechos que pueden influir en el desarrollo
vital alterando su organización:
Acontecimientos dramáticos y repentinos, como una muerte inesperada.
La historia pasada de la familia, sus creencias, secretos y mitos transmitidos.

9. 2.2.1 Etapa I. Constitución o etapa prefilial.
Elección de la pareja y noviazgo.
La formación de un nuevo sistema familiar se produce cuando dos personas
procedentes de núcleos familiares distintos establecen una relación afectiva solida con
perspectivas reales y conscientes de consolidarse y crecer hacia el futuro.
Matrimonio o cohabitación
Los dos sistemas individuales se unen, aportando cada uno de sus experiencias y
antecedentes de sus familias de origen. No importa el tipo de vinculo que decidan
establecer .El momento en que la pareja define sus relación y estructura de nuevo un
sistema familiar, con las dificultades propias de dos personas que representan valores,
normas y creencias diferenciales.
Los padres deben retirarse a un segundo plano para permitir libertad y privacidad a la
nueva pareja. Es un momento difícil porque pierden un hijo y adquieren el rol de
suegros.
2.2. 2 Etapa II. Expansión. Etapa filial
Transición a la paternidad
Este periodo cubre desde el nacimiento del primer hijo hasta su ingreso en el sistema
educativo formal.
Se producen cambios drásticos, por una parte pierden la liberta e independencia ya
que comienza una etapa de atadura y dependencia dedicada a cuidar y alimentar al
bebe por lo que deben renunciar algunos aspectos de su vida y debe adquirir una
nueva responsabilidad. El nuevo padre puede sentirse excluido ante la nueva relación
tan intensa entre la madre y el hijo.
La pareja debe volver a negociar las reglas y objetivos comunes y debe plantearse
como educar a los hijos. En este momento pueden surgir diferencias debido a los
diferentes orígenes de cada uno.
Familias con hijos en edad escolar.
Esta etapa coincide con todo el proceso de sociabilización secundaria. Implica cambios
tanto en las normas y reglas que ya no proceden solo de la familia.
Hay que buscar cierta autonomía en la que se equilibren las relaciones intrafamiliares
con las nuevas aprendiendo a reconocer las diferencias con otros sistemas externos.
Familias con hijos adolescentes.
Es un periodo de máxima confortación en las relaciones paterno filiares. Se requiere
que las relaciones dejen de ser del dominio de los progenitores del hijo para
constituirse en relaciones simétricas, la autoridad paterna ha de intentar evitar el
choque generacional que se produce y permitir la autonomía del adolescente.

10. Es frecuente el replanteamiento de la pareja y de cada uno de sus miembros y la
recuperación de su espacio psicoafectivo y la asunción de cambios de la edad madura.
2.2.3 Etapa III. Reducción.
Mitad de la vida y nido vacío.
En esta etapa se presenta muchas rupturas conyugales. Los hijos han dejado el hogar y
los padres se enfrentan el uno al otro como pareja.
Esto puede ser una fuente de satisfacción ya que supone tiempo libre y libertad pero
por otra parte se experimentan sentimientos de perdidas por los antiguos roles
parentales (síndrome del nido vacío). Es frecuente en esta etapa la pérdida real de los
propios padres.
En esta fase los problemas pueden surgir motivados por viejos conflictos de la pareja
que habían quedado sin resolver con la llegada de los hijos.
Muchas parejas maduras tienen que enfrentarse al dilema de renegociar unas nuevas
vidas juntas o bien separarse.
Los últimos años de vida.
Es el último ciclo es frecuente que los padres hayan adquirido el rol de abuelo. El
dilema estriba en mantener la independencia y la necesidad de mantener cada vez
más de los hijos por las disminuciones de tipo físico y recursos materiales.
A parece un sentimiento doloroso de pérdida de la juventud y el vigor y el temor a la
pérdida de autonomía así como el temor a la enfermedad y a la perdida de seres
queridos.
2.3 Crisis que afectan a la vida familiar
2.3.1 Desequilibrio familiar y crisis
La crisis es una forma de desequilibrio que afecta a una persona, ocasionándole un
estado de estrés que dificulta la puesta en marcha de sus propias capacidades. Las
personas en crisis pueden encontrarse incapacitadas.
Algunos signos de estrés son:
- Irritabilidad, hiperexcitación o estrado depresivo.
- Aumento del consumo de fármacos.
- Conducta compulsiva e inestabilidad emocional.
- Insomnio o pesadillas.
- Dificultad de concentración.
- Ansiedad o hipercinesia.
- Aumento en el consumo de alcohol y tabaco.
- Temblores o tics nerviosos.
- Palpitaciones.

11. - Cefaleas.
- Sensación de irritabilidad, debilidad o vértigo.
- Fatiga.
- Pérdida de las ganas de vivir.
- Aumento o disminución del hambre.
2.3.2 Tipos de crisis
En función de los diferentes factores de estrés, las crisis pueden clasificarse en crisis
previsibles y crisis imprevisibles.
Crisis previsibles
Son aquellas que a causa del ciclo vital o del rol que ocupa una persona son
predecibles. Podemos diferenciar las crisis de desarrollo y las crisis de transición.
También podemos hablar de crisis de desvalimiento y de crisis estructural.
- Crisis de desarrollo, de evolución o de ciclo vital. Suelen ser las más frecuentes y
las más fáciles de predecir. Se trata de crisis reales, producidas como
consecuencia del propio ciclo vital dentro del sistema familiar. Pueden ser
graduales o repentinos.
- Crisis de transición. Son las que van unidas al rol social y a la implicación en la
nueva situación, como puede ser un nacimiento.
- Crisis de desvalimiento. Cuando existe una dependencia o disfunción psíquica o
física de uno o varios miembros de la familia, a causa de enfermedades
mentales o físicas, que pueden ser degenerativas. Los problemas más graves
surgen cuando se necesita atención muy especializada y no puede sustituirse.
Se precisará ayuda externa en los momentos de ausencia del hogar y en
muchos casos de otro tipo de recursos.
- Crisis estructurales. Nacen de las propias relaciones e interacciones entre los
miembros familiares y suelen derivar en violencia familiar, alcoholismo y
bloqueo comunicativo. Suelen ser reiterativas y surgen de tensiones internas.
Crisis imprevisibles o de situación
No se pueden predecir, ni siquiera se desarrollan en la dinámica familiar por lo tanto
no han sido planeadas y pueden surgir en cualquier momento.
Están provocadas por diferentes acontecimientos que amenazan la integridad de la
persona y su familia, tanto a nivel mental como físico. Podemos poner unos ejemplos:
muerte de una persona cercana, las enfermedades, las lesiones por accidentes de
tráfico, laborales o domésticos, la separación o el divorcio, la pérdida del puesto de
trabajo, etc.
Los problemas se agudizan cuando se buscan culpables y se piensa que se podría haber
hecho algo para evitarlo, sin embargo, solo impiden la adaptación a la nueva situación.

12. 2.3.3 Resolución de la crisis
La principal característica de toda crisis es que es un proceso temporal, limitado en el
tiempo y que va seguida de un nuevo equilibrio. Para evitar o resolver las crisis las
personas ponen en funcionamiento sus propios recursos cognitivos y afectivos. Hay
algunos condicionantes que debemos tener en cuenta para resolver adecuadamente
las crisis:
- Percepción de la realidad: Es imprescindible afrontar los acontecimientos y los
sentimientos de forma realista. La persona podrá usar sus recursos personales
para resolver la situación; si la percepción se aleja de la realidad, será difícil
resolverla, ya que no se podrá calibrar lo percibido con la acción necesaria.
- Buscar y encontrar apoyo: En situaciones de crisis un recurso inexcusable es
acudir al entorno en busca de ayuda y que este entorno se la proporcione. El
acceso suele ser un indicador del estado de equilibrio, ya que significa que la
persona ha sido capaz de mantener un círculo relacional satisfactorio que le
facilitará una ayuda que puede ser recíproca en los momentos difíciles. Cuando
no se busca o no se encuentra poyo, la persona puede desembocar fácilmente
en serios estados de desequilibrio y de crisis.
- Poner en marcha las propias capacidades: Tener una visión realista de la
situación y disponer de apoyo no servirá de mucho si la persona interesada no
pone en acción sus propias capacidades para responder con eficacia a la
situación estresante. Será importante afrontar el problema y mantener una
actitud positiva para procurar su superación.
2.4 Familias multiproblemáticas
El concepto de familia multiproblemática se describió por primera vez a finales de los
años cincuenta en Estados Unidos. Se dedujo que la problemática social marginal hace
proliferar conductas.
2.4.1 ¿Qué son las familias multiproblemáticas?
Caracterización de la familia multiproblemática
A continuación enumeramos algunos rasgos distintivos, los cuales nos dan una idea
aproximada de su caracterización:
- La existencia de comportamientos problemáticos o alteraciones psicosociales
en alguno o más miembros de la familia.
- La incapacidad parental o el deterioro en el cuidado filial, tanto las necesidades
básicas como a las afectivas y emocionales. Esto ocasiona problemas de
adaptación ya que a menudo no se sienten queridos y valorados.
- El deterioro de la relación conyugal, en la que no existe un equilibrio en los
diferentes intercambios, tanto materiales como de tareas o emocionales.

13. - Incapacidad para ejercer las funciones que les corresponden dentro de la
unidad familiar y para sacar adelante las actividades necesarias que aseguran el
desarrollo funcional y emocional de la vida familiar.
- Persistencia de situaciones desestructurantes, (alcoholismo, drogadicción,
delincuencia…)
- Malos tratos físicos, psíquicos y abusos sexuales.
- Situaciones estructurales de desocupación con dificultades de inserción a causa
de la propia desventaja personal y social.
- Entorno poco propicio y desconexión de la familia extensa o en relaciones muy
problemáticas con ella.
- No se plantean metas ni objetivos de futuro.
- Dependencia de los servicios y profesionales externos, no suelen reconocer sus
carencias.
Consecuencias sobre los menores de la pertenencia a familias multiproblemáticas
La combinación de varios de estos elementos, pueden ser destructivos para los hijos.
Se incrementan los niveles de riesgo personal y social de los menores y que su
desarrollo psicosocial resulta afectado. Las consecuencias se traducen en:
- Retraso madurativo, en el lenguaje, en la práctica psicomotriz, en la
afectividad, etc.
- Problemas y dificultades durante los primeros años de enseñanza a causa del
absentismo y del retraso escolar.
- Problemas de relación con aquellos compañeros no problemáticos.
- Escasa o nula participación en actividades escolares o comunicativas.
- Comportamientos antisociales en los adolescentes y abandono de los estudios
a causa del fracaso escolar.
2.4.2 El contexto en el que se desenvuelven las familias multiproblemáticas
El nivel social de las familias multiproblemáticas suele ser bajo o muy bajo. Las causas
son frecuentemente por su procedencia, o bien sus miembros han padecido
prolongadas instucionalizaciones.
También hay que tener en cuenta los bajos niveles culturales de sus miembros que se
traducen en comportamientos problemáticos, dada su carencia de competencias
sociales y su falta de medios económicos.
La miseria es una constante en las vidas de estas familias, ésta se traduce en una
desorganización a nivel económico, y a nivel vivencial. En la vivienda no suele haber
habitaciones destinadas a los niños y separadas de las de las personas adultas, no se
mantienen pautas de horarios ni rituales, no se dispone de lugares propios donde
mantener un orden o que faciliten el desarrollo de la identidad personal.
La economía domestica suele ser muy difícil determinar la naturaleza y cuantía de los
ingresos monetarios, la de los gastos o las necesidades más inmediatas, el ingreso
suele obtenerse a través de subsidios o de manera ilegal y generalmente se usa de
forma diferente si lo administra una mujer (gastos familiares) o un hombre (gastos
propios).

14. Las dimensiones que pueden alcanzar esos aspectos sociales requieren el estudio y el
análisis para cada caso concreto. Un rasgo común es un gran número de miembros, a
causa de una falta de control de la natalidad, indistintamente si se trata de un núcleo
familiar con ambos cónyuges o de mujeres solas. A ello contribuye que la mujer, usa el
embarazo como recurso para mostrar sus vínculos para defenderse ante situaciones de
violencia o como forma de relación con otras mujeres.
Los hijos son la causa de que estas familias y/o las instituciones acaben realizando
peticiones de ayuda, por la falta de las funciones básicas de parentalidad, que
imposibilitan el correcto desarrollo de los pequeños.
2.4.3 Configuración de la familia multiproblemática
A partir de la reconstrucción de la problemática la estructura y la propia historia,
podemos distinguir cuatro configuraciones básicas de familias multiproblemáticas:
- El padre periférico
- La pareja inestable
- La mujer sola
- La familia petrificada
El padre periférico
Se caracteriza por tener un papel secundario, tanto afectivo como económico. Suele
estar desempleado o forma parte de la subempleo o de la economía sumergida, en
general parte de un nivel de competencias y de instrucción escasas.
Largas ausencias de su hogar, a causa del trabajo o la cárcel, lo cual da lugar a una
relación paternofilial precaria.
En su juventud se ha de enfrentar a la justicia por acciones delictivas de mayor o
menos relevancia.
Pareja inestable
Es la formada por cónyuges o parejas de hecho en edades tempranas, cuya juventud
no les ha permitido tener un mínimo de recursos económicos que les permita
comenzar y sostener una familia, y mucho menos conseguir y mantener una viviendo
digna.
Su relación se caracteriza por la conflictividad y la confusión, asociada a la
desadaptación escolar y a otras conductas problemáticas.
Los hijos padecen las consecuencias derivadas de la inmadurez de sus progenitores y a
menudo acaban a cargo de los abuelos o en centros de acogida, los padres intentan
rehacer sus vidas independientemente del nuevo núcleo familiar. En estos casos surge
la “abuela ausente”, que acaba haciendo el rol de madre tanto para su hija como para
su nieto/a.
Es frecuente que se deriven procesos legales conflictivos, cuando se produce la
acogida legal de los niños, ya que los padres suelen acabar solicitando la devolución de
la custodia a los abuelos, asumiendo nuevamente el rol de padres en lugar del de
abuelos.

15. Mujer sola
Se caracteriza por ser un núcleo familiar en el que la mujer decide llevar sola la carga
de sacar adelante a sus hijos, fruto de relaciones que no han llegado a consolidarse. Su
nivel socioeconómico y cultural es bajo, sus actividades giran en torno a ambientes
marginales, y suelen tener una amplia experiencia de institucionalización, todo ello les
impide garantizar una atención adecuada y suficiente a sus hijos.
Las ayudas de los servicios sociales suelen dirigirse tanto a la madre como a los
pequeños. Se ayuda a la madre a reorganizar su vida, evitando su dependencia de los
servicios sociales, y se garantiza a los niños una vida digna a través de la acogida si
fuese necesario.
Familia petrificada
Son familias en las que ha sucedido un hecho imprevisto y traumático, que ha
provocado cambios en el funcionamiento familiar, interfiriendo en los roles e
incapacitándolos de forma funcional, petrificándolos.
El nivel socioeconómico suele ser superior a otras tipologías familiares y las
manifestaciones varían según la familia, se pueden encontrar desde profundas
depresiones que mitigan con somníferos o alcohol, hasta comportamientos delictivos
de los hijos adolescentes, pasando por la entrada en las toxicomanías. Las ayudas a
estas familias variarán en función de su propia problemática.
2.4.4 La atención a las familias multiproblemáticas
La complejidad de la problemática requiere que las demandas se deriven a diferentes
instituciones. Dependiendo del caso familiar, puede recurrirse a las siguientes
instituciones:
- Instituciones sanitarias: Cuando se presentan problemas con alcoholismo,
drogadicción y todo tipo de patologías psiquiátricas.
- Instituciones sociales: Se recurrirá a ellas si se manifiesta una carencia de
vivienda o dificultades en ella, o bien si se presentan problemas de desempleo,
pobreza o maltrato.
- Instituciones de enseñanza: Si se producen problemas de integración escolar,
de absentismo continuado, o bien si los trastornos de adaptación escolar
suelen manifestarse de forma grave y frecuente.
- Instituciones judiciales: En función del caso podrá apelarse a la justicia civil,
administrativa o penal, o incluso a todas ellas en conjunto, se producen
comportamientos delictivos.

16. 2.5. LOS PLANES Y PROGRAMAS DE ATENCIÓN A LAS FAMILIAS.
2.5.1. Niveles de organización de los planes.
Las diferentes Administraciones (central, autonómicas y locales) han elaborado una
serie de acciones legislativas para facilitar la creación de programas y proyectos que
desplieguen una serie de actuaciones con la finalidad de conseguir el pleno desarrollo
de la familia en los planos social, jurídico y económico.
El referente estatal de atención a las familias del Plan Integral de Apoyo a la Familia
2001-2004 elaborado por el Ministerio de Trabajo y Asuntos sociales, aunque dicho
documento no ha sido prorrogado hasta el momento. Esto se debe en gran medida a
que las competencias en materia de familia han sido trasladadas a las Comunidades
Autónomas, y han sido éstas las que han ido publicando sus propios planes.
En cualquier caso, la función del plan, ya sea estatal o autonómico, nace de la
necesidad de las administraciones de poner en marcha políticas destinadas a
incrementar la caliad de vida de las familias en diferentes ámbitos (conciliación familiar
y laboral, solidaridad intergeneracional, vivienda etc), así como crear los recursos
necesarios para atender a las familias en situación de riesgo social u otras situaciones
especiales.
Generalmente, el diseño de un plan consta de un análisis del contexto y, a partir de él
se organiza de manera jerárquica una serie de acciones que, con sus ejecución,
permitirán alcanzar unos objetivos establecidos a priori.
Cada plan tiene su propia estructura de actuaciones, pero a grandes rasgos sigue una
organización similar a la siguiente.
Se establecen unos ejes o líneas estratégicas que representan el conjunto de áreas
prioritarias de atención. (Ejm recuadro pagina 57)
Estos ejes se organizan en programas que tienen por objeto facilitar la ejecución del
plan. Así, cada línea estratégica se compondrá de una serie de programas.
Las actuaciones. Se establecen las medidas concretas que se deberán poner en
práctica para alcanzar los objetivos de los programas.
2.5.2. Niveles de intervención en la atención a las familias.
Los planes, programas y actuaciones se desarrollan conjuntamente con los servicios
sociales y otras entidades y, en función de la intervención, se pueden diferenciar 3
niveles.

17. NIVEL I. Intervenciones preventivas.
Su objetivo es el apoyo y la protección de las familias en general; pretende reforzar sus
propias capacidades dando a conocer las dificultades y los recursos de que dispone
para afrontar las posibles situaciones problemáticas.
Para llevar a cabo este nivel se realizan diferentes programas y actuaciones, desde los
mas generales: de información y motivación, educación para la vida en familia, etc,
hasta otros más específicos: preparación maternal, apoyo y tratamiento psicológico en
las diversas fases del ciclo vital o en determinadas situaciones especiales
(discapacidad, drogas, etc), escuela de padres, actividades socioculturales para padres
e hijos etc.
NIVEL II. Intervenciones educativas y asistenciales.
Se dirige a familias que, sin encontrarse en situaciones de crisis, tienen necesidades
especiales que se pueden resolver mediante apoyos o ayudas concretas, con el
objetivo de proporcionarles los recursos necesarios que permitan superar el problema
planteado.
Estas ayudas se materializan en diferentes programas y actuaciones: protección
infantil, familias monoparentales, atención a familias con niños disfuncionales en el
desarrollo, atención a familias con personas mayores , familias en situación de pobreza
etc.
NIVEL III. Intervenciones de servicios alternativos.
Las intervenciones van dirigidas a aquellas familias que se hallan en situaciones de
crisis, situaciones patológicas o cualquier otro problema serie ante los cuales la familia
necesite de una terapia o de reeducación
Los diferentes programas que se llevan a cabo pretenden diversos objetivos, que
varían según cada caso.
2.5.3. Algunos programas.
Programas de educación familiar y atención a las familias desfavorecidas o en
situación de riesgo.
Su finalidad es ayudar a la familia a superar una situación de dificultad social, a través
de un proyecto de intervención social que estudia a través de un equipo
multidisciplinar. Las actuaciones pueden ser diversas: intervención destinada algún
miembro de la familia en concreto, enseñanza a la familia de determinados aspectos
de organización del hogar, de la alimentación, de la eduación a los jijos etc. También se
analizan las necesidades de la familia y se la orienta sobre las ayudas existentes y que
pueden ser adecuadas para ayudar a superar la situación de dificultad.
Programas de apoyo a familias monoparentales: son programas dirigidos a familias
que se componen de una madre o padre solos que tienen a su cargo hijos menores de
18 años. Contemplan la atención psicológica derivdas del estrés de asumir las
responsabilidades parentales en solitario y se facilita, en muchos programas, el
cuidado de los menores durante el horario no escolar.

18. Programas de apoyo a familias en cuyo seno se produce la violencia familiar: están
dirigidos a aquellas familias con problemas de violencia doméstica o bien de malos
tratos o de abusos sexuales a menores. Pretenden crear y/o ampliar los servicios de
atención y tratamiento, mediante las comunidades autónomas y los ayuntamientos a
través de sus unidades de servicios sociales, ONG, fundaciones, etc.
Programas de orientación y/o mediación familiar: están dirigidos a aquellas familias
que presentan problemas derivados de las relaciones entre los miembros de la familia.
Los casos más presentativos son aquellos que afectan a la relación de pareja y entre
padres e hijos.
Relaciones de pareja: Están destinados a mediar en situaciones de conflicto,
especialmente en procesos de separación o en litigios de producto de la separación o
divorcio. Este programa contempla el punto de encuentro, que es un espacio neutral
que facilita las visitas de los padres separados o divorciados en función de lo
establecido por el juez, en aquellos casos en que los conflictos o impedimentos de los
cónyuges no han hecho posible el régimen de visitas por mutuo acuerdo. En estos
casos habrá unos profesionales que velarán para que las visitas las desarrollen con
normalidad y en un clima benéfico para el menor.
Relaciones entre padres e hijos: las relaciones conflictivas más frecuentes se dan entre
padres e hijos adolescentes. Estos programas buscan orientar a los padres acerca de
los temas relacionados con la educación de los hijos y la crisis de crecimiento y
evolución , con la finalidad de facilitar la comunicación entre ellos y conseguir que las
situaciones graves de conflictividad no lleguen a suponer una ruptura. Los programas
también incluyen las situaciones de conflicto entre hijos adultos y padres ancianos.
Programas de conciliación laboral: la finalidad más importante que se plantea con
estos programas es la de conseguir que los cónyuges(mujeres) no sean discriminados
en el acceso al empleo ni en la participación en él, por la necesidad de antender las
cargas familiares. En la misma línea pretenden ofrecer la formación necesaria a
aquellas personas que se incorporan al mercado de trabajo después de haber estado
durante un tiempo asumiendo las responsabilidades familiares.
Programas para familias que tengan a su cargo algún miembro con dificultades: son
programas dirigidos a hacer que las personas ancianas o discapacitadas puedan seguir
viviendo en el seno de la familia. Para ello aportan una seir de acciones de apoyo,
como las económicas y el aligeramiento de las responsabilidades familiares.

19. 2.6. Algunos recursos para las familias.
Es importante para las familias disponer de una buena red de recursos sociales, como
talleres, espacios familiares, ludotecas, centros de tiempo libre, etc, que sustituyan en
muchos casos el calor familiar que difícilmente puede darse en determinadas
situaciones durante todas las horas del día.
Talleres y formación de padres: pueden estar dirigidos por las propias escuelas
infantiles u otras organizaciones educativas a través de las denominadas escuelas de
padres, aunque también se diseñan desde las Consejerías o Departamentos de
bienestar social o de las instancias dependientes de esta y se despliegan a partir de los
Ayuntamientos. Los temas que tratan pueden ser muy variados: adquisición de
hábitos, estimulación precoz, actuación ante determinadas conductas, desarrollo
infantil, etc.
Los espacios familiares: son servicios socioeducativos dirigidos a las familias y sus
niños pequeños, con el objetivo de reforzar el contexto familiar y el desarrollo de los
pequeños a través de la relación y el juego. Estos espacios se dirigen a niños/as de 0 a
3 años. Aunque en principio están dirigidos a todas las familias, se priorizan aquéllas
con algún problemática social que, en ocasiones, han sido direccionadas por los
servicios sociales.
Los espacios bebé: son espacios de apoyo a la madre y a su bebé de 0 a 4 meses o 1
año. En estos espacios se comparten experiencias y se aprenden diferentes aspectos
relacionados con la atención básica a los recién nacidos. Al igual que los espacios
familiares se prioriza la atención a madres con alguna problemática social.