SlideShare une entreprise Scribd logo
1  sur  15
Télécharger pour lire hors ligne
DIALOGO DE MUJERES
  Una chica le comenta a su amiga:

—Anabel, hace ya 3 años que no sales con nadie. ¿Cuál es el problema?

—No hay ningún problema. Es sólo que todavía no ha aparecido ningún chico que
cumpla mis expectativas.

—¿Y cuáles son?

—No pido mucho: sólo que me quiera tanto como a su equipo de fútbol.


   No le pidas la luna a nadie, porque eso es algo que tú mismo puedes
 conseguir: sólo necesitas tocar su reflejo sobre un estanque en una noche
                                 estrellada.




  Una amiga le comenta a otra:

—Susana, mi novio es tan celoso y posesivo que ya ni siquiera me deja ver a mis
amigas, y ha conseguido que dependa de él absolutamente para todo.

—¿Y por qué no le dejas?

—¿Y qué haría yo sin él?


 Volverse dependiente de alguien es el nombre moderno para “esclavitud”.




  Un joven le pregunta a otro:

—Fernando, ¿en qué fase está tu relación con tu chica?

—En la fase A: ya sabes, en la de que a la pregunta de: “¿Adónde vamos,
cariño?” siempre respondemos: “Adonde tú quieras, mi amor”.


  La vida, al igual que cualquier otra cosa que esté viva, pasa por distintas
                                    etapas.
Una muchacha le pregunta a otra:

—Natalia, ¿tú qué harías si la ex de tu chico lo engatusara para que regresara con
él?

—La arrancaría la piel a tiras.

—¿Y después qué? Porque eso ya lo he hecho, pero la muy cabezona sigue en
sus trece.


         No hay nada peor que una mujer despechada. Bueno sí, dos.



   Una joven le hace una pregunta a su amiga:

—Nuria, ¿a ti te ha pasado querer a un chico de manera diferente a como te
quiere él a ti?

—¿A qué te refieres?

—A que, por ejemplo, tú le quieras como amante y él te quiera como amiga.

—No. A mí me ha pasado que yo lo quiera ver a él ahogado, y él me quiera ver a
mí atropellada.


Amar es abrir nuestro corazón de par en par sin que nos importe si pilla una
                                pulmonía.



   Una quinceañera le confiesa a otra:

—Marta, he cortado con mi chico.

—¿Y por qué?

—Para que se dé cuenta de lo que tenía a su lado.

—¿Y sólo has cortado por eso?

—Bueno, no. También lo he dejado para ver si me quiere lo suficiente como para
luchar por recuperarme.


    La vida por sí sola se encargará de poner a prueba nuestro amor. No
                   necesitamos forzar nada en ese sentido.
Una chica le comenta a otra:

—Nuria, ¿por qué te enrollas con un nuevo chico en cuanto has roto con el
anterior?

—¿Para qué va a ser? Para que no me dé tiempo a deprimirme.


Si tenemos la moral baja, las atenciones que nos prodigue una nueva pareja,
 nos la pueden subir momentáneamente. Pero no esperemos que un parche
         temporal resuelva el problema de fondo que nos angustia.




  Una joven le confiesa a otra:

—Diana, estoy asustada, porque mi chico ya me llama su “novia” al segundo día
de empezar a salir.

—Pues no sé qué es peor: el mío, después de 5 años de relación, no me coge de
la mano en público no sea que la gente piense que lo nuestro va en serio.


         Para un caracol, un gusano es un “suicida de la velocidad”.




  Una adolescente le pregunta a su madre:

—Mami, ¿tú de pequeña soñabas que eras una princesa?

—Sí.

—¿Y que un apuesto príncipe te rescataba?

—Sí, pero todo se fue al garete el día que conocí a tu padre.


Para que nuestra vida deje de ser una pesadilla, sólo necesitamos despertar.
Una mujer le comenta a una amiga:

—Mi marido y yo hemos discutido bastante últimamente, y mis hijos se han visto
afectados.

—¿Y en qué lo habéis notado?

—En que el pequeño no para de gritar, y la pequeña no para de estar callada.


   Ante un mismo estímulo, cada uno respondemos de manera diferente.



  Una joven le pregunta a una amiga:

—Marisa, ¿tú crees que debería romper con mi ex novio?

—¿Pero es que habéis vuelto a ser pareja?

—No, por Dios —tranquiliza la amiga—. Sólo nos estamos acostando.


La duda sobre algo es una señal de falta de claridad. Así que actuar cuando
    aún estamos confusos nos traerá un resultado bastante claro: más
                               confusión.



  Una joven le confiesa a su mejor amiga:

—Sabes, Rosa, me acabo de dar cuenta de por qué me he casado con mi novio.

—Para que esté siempre contigo, ¿verdad?

—No, para que NO esté con ninguna otra.


      La inseguridad que sentimos en nuestro interior no la va a hacer
    desaparecer nadie externo a nosotros, aunque podemos engañarnos
                          creyendo que sí puede.
Una muchacha se dirige preocupada a una amiga:

—Marisa, mi novio sólo me quiere para acostarse conmigo, pero yo deseo una
relación más seria. ¿Qué puedo hacer?

—Dile lo que sientes.

—Ya lo he hecho, pero siempre me responde que por qué arriesgarnos a
estropearlo todo, ahora que nos va tan bien.


En una pareja, si algo no funciona para los dos, en realidad no funciona para
                                  ninguno.



  Una veinteañera le hace una consulta a una amiga:

—Sara, ¿tú qué haces para cabrear a tu chico cuando estáis en mitad de una
discusión?

—Yo lo dejo con la palabra en la boca.

—Pues yo no permito que se quede con la palabra en la boca. Yo hago que se
trague sus palabras.


   Querer quedar por encima del otro es otra forma de reconocer que nos
                          sentimos por debajo.



  Dos amigas charlando:

—Marta, tienes que dejar de suplicarle a Carlos que vuelva contigo, y aceptar que
te ha dejado definitivamente.

—Pero, ¿no dicen que la esperanza es lo último que se pierde?

—No, cariño, lo último que se pierde es el orgullo. Y tú hace tiempo que ya no lo
llevas contigo.


                        Valorarse uno mismo no tiene precio.
Una mujer le confiesa preocupada a una amiga:

—Elvira, últimamente mi hijo pequeño le contesta de malos modos a los
profesores, le cuesta concentrarse en clase, y tiene continuas peleas con sus
compañeros. ¿Qué puedo hacer?

—¿Tienes discusiones en casa con tu esposo?

—Para nada. Mi casa es un remanso de paz: mi marido no me dirige la palabra, y
yo le ignoro por completo.


 El silencio no siempre es una señal de armonía, sino de tensión reprimida.




  Dos chicas charlando:

—Carolina, ¿por qué a las chicas nos suelen gustar chicos mayores que nosotras?

—Porque valoramos mucho la seguridad y la madurez.

—¿Y por qué los chicos suelen buscar chicas más jóvenes que ellos?

—Porque desean recuperar la inseguridad y la inmadurez de su juventud.


        Todos buscamos lo que no tenemos o lo que hemos perdido.




  Dos mujeres hablando sobre el amante de una de ellas:

—Estoy cansada de ser “la otra”. Él siempre me dice que me quiere con locura,
pero que le dé algo más de tiempo para que arregle las cosas con su mujer y sus
hijos.

—Bueno, a mí me parece que está actuando de manera bastante responsable.
Sólo quiere hacer las cosas bien.

—Sí. Y sobre todo, con tranquilidad, porque lleva así 12 años.


Cuando tenemos miedo de tomar una decisión, el tiempo es una excusa muy
                             socorrida.
Una adolescente le comenta a su mejor amiga:

—Natalia, quiero dejar a mi pareja, pero no me lo está poniendo nada fácil.

—Te está haciendo chantaje emocional, ¿verdad?

—No, es que no me da ningún motivo para romper con él.


 En el juego de las relaciones, no necesitamos que el otro mueva ficha para
                      que decidamos terminar la partida.




  Una chica telefonea entusiasmada a una antigua amiga:

—Marisa, creo que he encontrado al hombre de mi vida. Con decirte que sólo con
estar abrazada a él en el sofá viendo una película romántica, ya me siento feliz.

—Yo que tú no me apresuraría. Espera a ver cómo reacciona cuando lo que estéis
viendo sea un partido de fútbol, y su equipo sea el que vaya perdiendo.


Amar es fácil cuando todo nos sonríe. Pero el verdadero amor sólo se pone a
                prueba cuando el destino nos frunce el ceño.




  Una muchacha le comenta a otra:

—Inés, creo que mi chico y yo hemos perdido la “magia” que había en un principio.

—Te entiendo muy bien. Mi novio también me ha confesado que cree que se ha
roto el “encantamiento”, pero piensa que es porque yo soy la “bruja” que lo
“hechizó” en un principio.


    El amor no desaparece por arte de magia, sino por falta de atención.
Una chica le comenta angustiada a una amiga:

—Sandra, mi novio está cada vez más celoso y posesivo. Y cada día me veo más
agobiada, porque siento que toda mi vida tiene que girar en torno suya si quiero
evitar sus enfados.

—¿Y por qué no lo hablas con él?

—Ya lo he hecho, pero siempre me dice que sus celos van cada vez a más,
porque cada día está más enamorado de mí.


El verdadero amor no aprisiona, sino que nos da alas con las que recuperar
                            nuestra libertad.




  Una chica le comenta con preocupación a una amiga:

—Marisol, desde que me dejó mi novio ando todo el día dándole al coco, y no
puedo parar de pensar.

—Pues haz lo que hacemos todos los que no queremos pensar.

—¿El qué?

—Ver la tele.


  Anestesiar el dolor nos hará insensibles a muchas otras cosas aparte del
                                    dolor.




  Dos chicas charlando:

—Cristina, cuando me dejó mi ex, me dijo que yo era insoportable y que nadie
más me iba a querer nunca.

—¿Y por eso te has empeñado en liarte con todos los chicos de la facultad: para
dejarlo por mentiroso?


 No necesitamos demostrarle nada a nadie. Ni siquiera a nosotros mismos.
Dos quinceañeras charlando:

—Patricia, ¿tú discutes mucho con tu novio?

—¿Yo?, nunca.

—Vaya, qué suerte que os llevéis tan bien.

—No es eso. Es que tengo miedo de llevarle la contraria, no sea que me deje.


 Cuando hemos perdido nuestra autoestima, ¿qué otra cosa merece la pena
                             conservar?




  Una adolescente le comenta preocupada a una amiga:

—Beatriz, mi chico me dijo que me llamaría esta tarde, y aún no me ha llamado.
Cómo estaré, que ya no me quedan uñas que comerme, y estoy empezando con
los padrastros.

—Pues llámalo tú.

—Sí, hombre, ¿y parecer desesperada?


   Lo malo de comernos mucho la cabeza es que después se nos quita el
                               apetito.




  Una muchacha le pregunta a su novio:

—Pablo, ¿qué lugar ocupo yo en tu lista de prioridades?

—Estás en segundo lugar.

—¡Qué bueno que te importe tanto! ¿Y quién ocupa la primera posición: tu madre,
verdad?

—No, el fútbol.


¿Cómo sabemos qué es lo más importante para nosotros? Fácil: ¿en qué no
                     podemos dejar de pensar?
Dos chicas hablando:

—Sandra, últimamente discuto con mi novio por todo, y cualquier tema de
conversación termina en una pelea.

—¿Y quién dirías tú que las empieza?

—Está claro que ÉL. Pero como no quiero que se sienta solo, le acompaño con
gusto.


   Las continuas peleas en las que nos vemos envueltos las provocamos
               nosotros. Por supuesto, inconscientemente.




  Una joven le comenta a otra:

—Eloísa, mi novio y yo hemos puesto tantas ilusiones en nuestra relación, que no
me parece bien terminar lo nuestro de golpe.

—¿Y qué prefieres entonces: una muerte lenta y dolorosa?


Cortar los hilos que nos atan al pasado es la única manera de poder avanzar
                               hacia el futuro.




  Dos jóvenes hablando:

—Nuria, desde que mi novio me ha insinuado que no le disgustaría casarse
conmigo, no hago más que verle defectos.

—Tienes miedo al compromiso, ¿verdad?

—O eso, o me he vuelto de repente mucho más observadora.


El miedo es un experto a la hora de buscar excusas para no enfrentarse a lo
                               que más teme.
Un pequeño le pregunta a su padre:

—Papi, ¿por qué los sultanes pueden tener varias esposas, pero tú sólo una?

—Porque yo soy más listo. ¿Te imaginas lo que sería tener en casa a siete como
tu madre?


 Aumentar la cantidad de algo no necesariamente hace aumentar la calidad.




  Un marido se queja a su mujer a la hora de la comida:

—María, ¿otra vez patatas hervidas? ¡Se me va a poner cara de tubérculo!

—No te preocupes, cariño —responde la mujer—. Yo friego todos los días el
wáter, y aún no se me ha puesto cara de escobilla.


              ¿Nos CONVERTIMOS en aquello que HACEMOS?




  Un marido le dice a su mujer:

—Cariño, ¿por qué te pasas todo el día quemando incienso y encendiendo velas
aromáticas?

—Para ahuyentar a los malos espíritus.

—¿Y cómo es que tu madre sigue aún con nosotros?


  Todo el mundo sabe que nuestra madre es una santa, y que la madre de
   nuestra pareja es un demonio. ¿Por qué, entonces, se empeña nuestra
                pareja en afirmar exactamente lo contrario?
Dos señoras hablando:

—Mi marido no puede ni ver a uno de sus compañeros de trabajo, pero en vez de
hablarlo con esa persona, me bombardea a mí con todo lo que le revienta de él.

—Ya veo, eres su paño de lágrimas.

—Sí, pero ya me estoy cansando de lavar cada día el maldito pañuelo.


Si acostumbramos a la gente a usarnos como un contenedor para descargar
      su basura, dejaremos sin empleo al servicio de limpieza pública.




    Por la autopista, un marido le dice a su temerosa mujer, que acaba de sacarse
el carnet de conducir:

—Cariño, pulsa el mecanismo que regula la entrada de la mezcla explosiva en la
cámara de combustión y que permite incrementar el número de revoluciones del
motor.

—Paco, habla más claro, que no te entiendo.

—¡Que pises el acelerador, joder, que vamos pisando huevos!


              No hay como hablar claro para que nos entiendan.




  Dos amigas charlando:

—¿Sabes qué he pensado hacer para remediar el infierno de peleas e insultos en
que se ha convertido la relación con mi marido?

—¿Dejarlo?

—No, tener un hijo con él.


         ¿La forma de apagar un fuego es echándole más gasolina?
Un joven le confiesa a un amigo:

—Pablo, mi novia acaba de dejarme después de cinco años de relación, y se me
está pasando por la cabeza hacer una tontería.

—¿No estarás pensando en suicidarte?

—He dicho una tontería, no una gilipollez.


En la vida, a veces se apagarán de golpe todas las luces y sentirás miedo. Es
        algo normal. Ten fe; el corte de electricidad no durará mucho.




  Dos chicas hablando:

—¿A ti también te pasa que con los chicos que más te gustan son con los que
menos interés muestras?

—¡Para nada, tía! ¡Estoy yo como para desaprovechar oportunidades!


No hay escasez de oportunidades ni de ninguna otra cosa. La abundancia es
                  tu derecho de nacimiento. Reclámalo.




  Dos chicas charlando:

—Fátima, ¿por qué a la mayoría de los chicos les aterra el futuro en pareja y el
compromiso?

—Porque son unos inmaduros.

—Es cierto. Y para cuando han madurado, ya están hechos unos carcamales.


   Tener miedo al compromiso es, en realidad, temer la pérdida de nuestra
                            propia libertad.
Una amiga le pregunta a otra bastante tímida:

—Begoña, ¿cuál es la fantasía sexual más loca que has tenido?

—Bueno, me da un poco de vergüenza decírtelo.

—Venga, dime, ¿te imaginabas haciéndolo con un atractivo actor de cine?

—No.

—¿Con un presentador de televisión cachas?

—Tampoco.

—¿Con un fornido atleta?

—Para nada.

—Entonces, ¿con quién porras lo hacías?

—Con mi marido en nuestra cama. Pero eso sí, con las luces encendidas.


 Superar nuestros propios límites, no los de los demás, es lo que de verdad
                                  importa.




  Dos señoras hablando:

—Felisa, ¿tú has engañado alguna vez a tu marido?

—Yo, nunca. ¿Y tú?

—Yo, todas las noches. En cuanto cierro los ojos.


Los sueños nocturnos son una válvula de escape para liberar la presión que
                    hemos reprimido durante el día.
Dos muchachas conversando:

—Irene, ¿por qué las chicas nos comemos tanto la cabeza?

—¿A qué te refieres?

—Ya me entiendes: ¿Me llamará Carlos o no me llamará? ¿Le gustaré o no le
gustaré? ¿Debería llamarle yo o esperar a que me llame él?

—Sí, ya veo a lo que te refieres. En ese sentido, los chicos lo tienen más fácil que
nosotras. Su única pregunta es: ¿A qué hora ponen el partido?


 Las mujeres tienen fama de complejas; los hombres, de simplones. Dios
sabía muy bien lo que se hacía cuando nos creó: quería que aprendiéramos
                              del otro sexo.



   Una chica le dice a una amiga:

—Esther, mi chico y yo nos hemos dado un tiempo para pensar.

—¿Para pensar el qué?

—¡Vaya, en eso no habíamos pensado!


Si nos pensamos demasiado las cosas, nos perderemos toda la frescura que
                sólo la espontaneidad puede ofrecernos.



   Una joven le pregunta a otra:

—Alicia, ¿tú cómo te consideras: pasional o racional?

—Yo soy paracional, porque me dejo llevar por el corazón cuando me enamoro de alguien que NO
me conviene, y utilizo después la cabeza para justificar la insensatez que acabo de cometer.




La cabeza no está situada por encima del corazón porque
           sea más importante, sino porque,

               ¿Dónde nos Pondríamos la Gorra si no?

Contenu connexe

Tendances

Monólogo de la mujer moderna
Monólogo de la mujer modernaMonólogo de la mujer moderna
Monólogo de la mujer modernaBerli Onle
 
Caperucita roja rafael
Caperucita roja rafaelCaperucita roja rafael
Caperucita roja rafaelrafaelangelrom
 
Historia de un amor prohibido
Historia de un amor prohibidoHistoria de un amor prohibido
Historia de un amor prohibidowecho
 
Para mi mejor amiga ena
Para mi  mejor amiga  enaPara mi  mejor amiga  ena
Para mi mejor amiga ena1022795
 
Cuento de terror Joel
Cuento de terror JoelCuento de terror Joel
Cuento de terror Joelsexto-grado
 
Juventud en éxtasis
Juventud en éxtasisJuventud en éxtasis
Juventud en éxtasisAlehBeGa
 
Carta a mi madre( amozoc)
Carta a  mi madre( amozoc)Carta a  mi madre( amozoc)
Carta a mi madre( amozoc)amozoc_nikolas
 
Caperucita roja de triunfo arciniegas
Caperucita roja de triunfo arciniegasCaperucita roja de triunfo arciniegas
Caperucita roja de triunfo arciniegasMassiel Navarro
 
perfectos mentirosos 2.pdf
perfectos mentirosos 2.pdfperfectos mentirosos 2.pdf
perfectos mentirosos 2.pdfadrilolaso
 

Tendances (20)

Monólogo de la mujer moderna
Monólogo de la mujer modernaMonólogo de la mujer moderna
Monólogo de la mujer moderna
 
Caperucita roja rafael
Caperucita roja rafaelCaperucita roja rafael
Caperucita roja rafael
 
Historia de un amor prohibido
Historia de un amor prohibidoHistoria de un amor prohibido
Historia de un amor prohibido
 
Para mi mejor amiga ena
Para mi  mejor amiga  enaPara mi  mejor amiga  ena
Para mi mejor amiga ena
 
El gato negro
El gato negroEl gato negro
El gato negro
 
Cuento de terror Joel
Cuento de terror JoelCuento de terror Joel
Cuento de terror Joel
 
Ejemplo de cuento
Ejemplo de cuentoEjemplo de cuento
Ejemplo de cuento
 
Ejemplo de novela corta
Ejemplo de novela cortaEjemplo de novela corta
Ejemplo de novela corta
 
El feo
El feoEl feo
El feo
 
Juventud en éxtasis
Juventud en éxtasisJuventud en éxtasis
Juventud en éxtasis
 
El gato negro
El gato negroEl gato negro
El gato negro
 
Cuentos para hallowen 2013
Cuentos para hallowen 2013Cuentos para hallowen 2013
Cuentos para hallowen 2013
 
Carta a mi madre( amozoc)
Carta a  mi madre( amozoc)Carta a  mi madre( amozoc)
Carta a mi madre( amozoc)
 
Caperucita roja de triunfo arciniegas
Caperucita roja de triunfo arciniegasCaperucita roja de triunfo arciniegas
Caperucita roja de triunfo arciniegas
 
Historias para reflexionar
Historias para reflexionarHistorias para reflexionar
Historias para reflexionar
 
El callejón del beso
El callejón del besoEl callejón del beso
El callejón del beso
 
Carta a un hijo
Carta a un hijoCarta a un hijo
Carta a un hijo
 
perfectos mentirosos 2.pdf
perfectos mentirosos 2.pdfperfectos mentirosos 2.pdf
perfectos mentirosos 2.pdf
 
Resumen. la muñeca reina
Resumen. la muñeca reina Resumen. la muñeca reina
Resumen. la muñeca reina
 
Cuento de terror
Cuento de terrorCuento de terror
Cuento de terror
 

Similaire à Diálogos sobre relaciones y amor

106869285-Psicologia-de-La-Mujer-Fabio-Fusaro.pdf
106869285-Psicologia-de-La-Mujer-Fabio-Fusaro.pdf106869285-Psicologia-de-La-Mujer-Fabio-Fusaro.pdf
106869285-Psicologia-de-La-Mujer-Fabio-Fusaro.pdfronalGutierrez7
 
Mi novia (manual de intrucciones)
Mi novia (manual de intrucciones)Mi novia (manual de intrucciones)
Mi novia (manual de intrucciones)Virginia Reyes
 
02. Mr. Spencer (T.L. Sawn).pdf.libro de un señor
02. Mr. Spencer (T.L. Sawn).pdf.libro de un señor02. Mr. Spencer (T.L. Sawn).pdf.libro de un señor
02. Mr. Spencer (T.L. Sawn).pdf.libro de un señorkkte210207
 
David x se implacable
David x   se implacableDavid x   se implacable
David x se implacableVictor Rivera
 
Mi novia manual de instricciones
Mi novia manual de instriccionesMi novia manual de instricciones
Mi novia manual de instriccionesfabio ayala
 
Fusaro fabio mi novia manual de instrucciones
Fusaro fabio   mi novia manual de instruccionesFusaro fabio   mi novia manual de instrucciones
Fusaro fabio mi novia manual de instruccionesAdolfo Batz
 
Solo para-mis-amigas-1205009894516289-3
Solo para-mis-amigas-1205009894516289-3Solo para-mis-amigas-1205009894516289-3
Solo para-mis-amigas-1205009894516289-3Susana Alcantara
 
Amar es una actitud interior
Amar es una actitud interiorAmar es una actitud interior
Amar es una actitud interiormariela10gonzalez
 
Mi novia manual de instrucciones fabio fusaro
Mi novia manual de instrucciones   fabio fusaroMi novia manual de instrucciones   fabio fusaro
Mi novia manual de instrucciones fabio fusaroanayelli17
 
Cuento de amor inesperado
Cuento de amor inesperadoCuento de amor inesperado
Cuento de amor inesperadoDerresa
 
Como decir no...!!
Como decir no...!!Como decir no...!!
Como decir no...!!UNTELS
 
Compatiendoelcuado
CompatiendoelcuadoCompatiendoelcuado
CompatiendoelcuadoChicav
 
Amigos con-derecho-susett-f.-onarres (1)
Amigos con-derecho-susett-f.-onarres (1)Amigos con-derecho-susett-f.-onarres (1)
Amigos con-derecho-susett-f.-onarres (1)JosePerez1849
 
Porque eres todo para mi
Porque eres todo para miPorque eres todo para mi
Porque eres todo para miEsther Yedra
 

Similaire à Diálogos sobre relaciones y amor (20)

106869285-Psicologia-de-La-Mujer-Fabio-Fusaro.pdf
106869285-Psicologia-de-La-Mujer-Fabio-Fusaro.pdf106869285-Psicologia-de-La-Mujer-Fabio-Fusaro.pdf
106869285-Psicologia-de-La-Mujer-Fabio-Fusaro.pdf
 
Mi novia (manual de intrucciones)
Mi novia (manual de intrucciones)Mi novia (manual de intrucciones)
Mi novia (manual de intrucciones)
 
02. Mr. Spencer (T.L. Sawn).pdf.libro de un señor
02. Mr. Spencer (T.L. Sawn).pdf.libro de un señor02. Mr. Spencer (T.L. Sawn).pdf.libro de un señor
02. Mr. Spencer (T.L. Sawn).pdf.libro de un señor
 
David x se implacable
David x   se implacableDavid x   se implacable
David x se implacable
 
Mi novia manual de instrucciones.
Mi novia manual de instrucciones.Mi novia manual de instrucciones.
Mi novia manual de instrucciones.
 
Mi novia manual de instricciones
Mi novia manual de instriccionesMi novia manual de instricciones
Mi novia manual de instricciones
 
Frases de amistad
Frases de amistadFrases de amistad
Frases de amistad
 
Fusaro fabio mi novia manual de instrucciones
Fusaro fabio   mi novia manual de instruccionesFusaro fabio   mi novia manual de instrucciones
Fusaro fabio mi novia manual de instrucciones
 
Jugamos a ser Novios
Jugamos a ser NoviosJugamos a ser Novios
Jugamos a ser Novios
 
Solo para-mis-amigas-1205009894516289-3
Solo para-mis-amigas-1205009894516289-3Solo para-mis-amigas-1205009894516289-3
Solo para-mis-amigas-1205009894516289-3
 
Amar es una actitud interior
Amar es una actitud interiorAmar es una actitud interior
Amar es una actitud interior
 
Mirta
MirtaMirta
Mirta
 
Clases de amigas
Clases de amigasClases de amigas
Clases de amigas
 
Antologia anexos
Antologia   anexosAntologia   anexos
Antologia anexos
 
Mi novia manual de instrucciones fabio fusaro
Mi novia manual de instrucciones   fabio fusaroMi novia manual de instrucciones   fabio fusaro
Mi novia manual de instrucciones fabio fusaro
 
Cuento de amor inesperado
Cuento de amor inesperadoCuento de amor inesperado
Cuento de amor inesperado
 
Como decir no...!!
Como decir no...!!Como decir no...!!
Como decir no...!!
 
Compatiendoelcuado
CompatiendoelcuadoCompatiendoelcuado
Compatiendoelcuado
 
Amigos con-derecho-susett-f.-onarres (1)
Amigos con-derecho-susett-f.-onarres (1)Amigos con-derecho-susett-f.-onarres (1)
Amigos con-derecho-susett-f.-onarres (1)
 
Porque eres todo para mi
Porque eres todo para miPorque eres todo para mi
Porque eres todo para mi
 

Plus de Gabriel Moreno Cordero Jr.

Anonimo retazos de historia de los reinos olvidados
Anonimo   retazos de historia de los reinos olvidadosAnonimo   retazos de historia de los reinos olvidados
Anonimo retazos de historia de los reinos olvidadosGabriel Moreno Cordero Jr.
 
Anonimo onu - declaracion universal de derechos humanos
Anonimo   onu - declaracion universal de derechos humanosAnonimo   onu - declaracion universal de derechos humanos
Anonimo onu - declaracion universal de derechos humanosGabriel Moreno Cordero Jr.
 
Anonimo marcos-eta-garzon la izquierda en la encrucijada
Anonimo   marcos-eta-garzon la izquierda en la encrucijadaAnonimo   marcos-eta-garzon la izquierda en la encrucijada
Anonimo marcos-eta-garzon la izquierda en la encrucijadaGabriel Moreno Cordero Jr.
 
Anonimo historia antigua. proximo oriente y egipto
Anonimo   historia antigua. proximo oriente y egiptoAnonimo   historia antigua. proximo oriente y egipto
Anonimo historia antigua. proximo oriente y egiptoGabriel Moreno Cordero Jr.
 

Plus de Gabriel Moreno Cordero Jr. (20)

Anonimo susurro desde una epoca distante
Anonimo   susurro desde una epoca distanteAnonimo   susurro desde una epoca distante
Anonimo susurro desde una epoca distante
 
Anonimo romance del enamorado y la muerte
Anonimo   romance del enamorado y la muerteAnonimo   romance del enamorado y la muerte
Anonimo romance del enamorado y la muerte
 
Anonimo retazos de historia de los reinos olvidados
Anonimo   retazos de historia de los reinos olvidadosAnonimo   retazos de historia de los reinos olvidados
Anonimo retazos de historia de los reinos olvidados
 
Anonimo refundicion ley propiedad horizontal
Anonimo   refundicion ley propiedad horizontalAnonimo   refundicion ley propiedad horizontal
Anonimo refundicion ley propiedad horizontal
 
Anonimo recetas2
Anonimo   recetas2Anonimo   recetas2
Anonimo recetas2
 
Anonimo recetas
Anonimo   recetasAnonimo   recetas
Anonimo recetas
 
Anonimo real academia - gramatica castellana
Anonimo   real academia - gramatica castellanaAnonimo   real academia - gramatica castellana
Anonimo real academia - gramatica castellana
 
Anonimo onu - declaracion universal de derechos humanos
Anonimo   onu - declaracion universal de derechos humanosAnonimo   onu - declaracion universal de derechos humanos
Anonimo onu - declaracion universal de derechos humanos
 
Anonimo monologos club de la comedia
Anonimo   monologos club de la comediaAnonimo   monologos club de la comedia
Anonimo monologos club de la comedia
 
Anonimo mitologia universal
Anonimo   mitologia universalAnonimo   mitologia universal
Anonimo mitologia universal
 
Anonimo marcos-eta-garzon la izquierda en la encrucijada
Anonimo   marcos-eta-garzon la izquierda en la encrucijadaAnonimo   marcos-eta-garzon la izquierda en la encrucijada
Anonimo marcos-eta-garzon la izquierda en la encrucijada
 
Anonimo manual del perfecto ateo
Anonimo   manual del perfecto ateoAnonimo   manual del perfecto ateo
Anonimo manual del perfecto ateo
 
Anonimo libro de apolonio
Anonimo   libro de apolonioAnonimo   libro de apolonio
Anonimo libro de apolonio
 
Anonimo libro de alexandre
Anonimo   libro de alexandreAnonimo   libro de alexandre
Anonimo libro de alexandre
 
Anonimo las mejores citas de inspiracion
Anonimo   las mejores citas de inspiracionAnonimo   las mejores citas de inspiracion
Anonimo las mejores citas de inspiracion
 
Anonimo las 17 reglas del exito
Anonimo   las 17 reglas del exitoAnonimo   las 17 reglas del exito
Anonimo las 17 reglas del exito
 
Anonimo la vuelta a los vegetales
Anonimo   la vuelta a los vegetalesAnonimo   la vuelta a los vegetales
Anonimo la vuelta a los vegetales
 
Anonimo historia de las matematicas
Anonimo   historia de las matematicasAnonimo   historia de las matematicas
Anonimo historia de las matematicas
 
Anonimo historia antigua. proximo oriente y egipto
Anonimo   historia antigua. proximo oriente y egiptoAnonimo   historia antigua. proximo oriente y egipto
Anonimo historia antigua. proximo oriente y egipto
 
Anonimo historia de la familia giovanni
Anonimo   historia de la familia giovanniAnonimo   historia de la familia giovanni
Anonimo historia de la familia giovanni
 

Diálogos sobre relaciones y amor

  • 1. DIALOGO DE MUJERES Una chica le comenta a su amiga: —Anabel, hace ya 3 años que no sales con nadie. ¿Cuál es el problema? —No hay ningún problema. Es sólo que todavía no ha aparecido ningún chico que cumpla mis expectativas. —¿Y cuáles son? —No pido mucho: sólo que me quiera tanto como a su equipo de fútbol. No le pidas la luna a nadie, porque eso es algo que tú mismo puedes conseguir: sólo necesitas tocar su reflejo sobre un estanque en una noche estrellada. Una amiga le comenta a otra: —Susana, mi novio es tan celoso y posesivo que ya ni siquiera me deja ver a mis amigas, y ha conseguido que dependa de él absolutamente para todo. —¿Y por qué no le dejas? —¿Y qué haría yo sin él? Volverse dependiente de alguien es el nombre moderno para “esclavitud”. Un joven le pregunta a otro: —Fernando, ¿en qué fase está tu relación con tu chica? —En la fase A: ya sabes, en la de que a la pregunta de: “¿Adónde vamos, cariño?” siempre respondemos: “Adonde tú quieras, mi amor”. La vida, al igual que cualquier otra cosa que esté viva, pasa por distintas etapas.
  • 2. Una muchacha le pregunta a otra: —Natalia, ¿tú qué harías si la ex de tu chico lo engatusara para que regresara con él? —La arrancaría la piel a tiras. —¿Y después qué? Porque eso ya lo he hecho, pero la muy cabezona sigue en sus trece. No hay nada peor que una mujer despechada. Bueno sí, dos. Una joven le hace una pregunta a su amiga: —Nuria, ¿a ti te ha pasado querer a un chico de manera diferente a como te quiere él a ti? —¿A qué te refieres? —A que, por ejemplo, tú le quieras como amante y él te quiera como amiga. —No. A mí me ha pasado que yo lo quiera ver a él ahogado, y él me quiera ver a mí atropellada. Amar es abrir nuestro corazón de par en par sin que nos importe si pilla una pulmonía. Una quinceañera le confiesa a otra: —Marta, he cortado con mi chico. —¿Y por qué? —Para que se dé cuenta de lo que tenía a su lado. —¿Y sólo has cortado por eso? —Bueno, no. También lo he dejado para ver si me quiere lo suficiente como para luchar por recuperarme. La vida por sí sola se encargará de poner a prueba nuestro amor. No necesitamos forzar nada en ese sentido.
  • 3. Una chica le comenta a otra: —Nuria, ¿por qué te enrollas con un nuevo chico en cuanto has roto con el anterior? —¿Para qué va a ser? Para que no me dé tiempo a deprimirme. Si tenemos la moral baja, las atenciones que nos prodigue una nueva pareja, nos la pueden subir momentáneamente. Pero no esperemos que un parche temporal resuelva el problema de fondo que nos angustia. Una joven le confiesa a otra: —Diana, estoy asustada, porque mi chico ya me llama su “novia” al segundo día de empezar a salir. —Pues no sé qué es peor: el mío, después de 5 años de relación, no me coge de la mano en público no sea que la gente piense que lo nuestro va en serio. Para un caracol, un gusano es un “suicida de la velocidad”. Una adolescente le pregunta a su madre: —Mami, ¿tú de pequeña soñabas que eras una princesa? —Sí. —¿Y que un apuesto príncipe te rescataba? —Sí, pero todo se fue al garete el día que conocí a tu padre. Para que nuestra vida deje de ser una pesadilla, sólo necesitamos despertar.
  • 4. Una mujer le comenta a una amiga: —Mi marido y yo hemos discutido bastante últimamente, y mis hijos se han visto afectados. —¿Y en qué lo habéis notado? —En que el pequeño no para de gritar, y la pequeña no para de estar callada. Ante un mismo estímulo, cada uno respondemos de manera diferente. Una joven le pregunta a una amiga: —Marisa, ¿tú crees que debería romper con mi ex novio? —¿Pero es que habéis vuelto a ser pareja? —No, por Dios —tranquiliza la amiga—. Sólo nos estamos acostando. La duda sobre algo es una señal de falta de claridad. Así que actuar cuando aún estamos confusos nos traerá un resultado bastante claro: más confusión. Una joven le confiesa a su mejor amiga: —Sabes, Rosa, me acabo de dar cuenta de por qué me he casado con mi novio. —Para que esté siempre contigo, ¿verdad? —No, para que NO esté con ninguna otra. La inseguridad que sentimos en nuestro interior no la va a hacer desaparecer nadie externo a nosotros, aunque podemos engañarnos creyendo que sí puede.
  • 5. Una muchacha se dirige preocupada a una amiga: —Marisa, mi novio sólo me quiere para acostarse conmigo, pero yo deseo una relación más seria. ¿Qué puedo hacer? —Dile lo que sientes. —Ya lo he hecho, pero siempre me responde que por qué arriesgarnos a estropearlo todo, ahora que nos va tan bien. En una pareja, si algo no funciona para los dos, en realidad no funciona para ninguno. Una veinteañera le hace una consulta a una amiga: —Sara, ¿tú qué haces para cabrear a tu chico cuando estáis en mitad de una discusión? —Yo lo dejo con la palabra en la boca. —Pues yo no permito que se quede con la palabra en la boca. Yo hago que se trague sus palabras. Querer quedar por encima del otro es otra forma de reconocer que nos sentimos por debajo. Dos amigas charlando: —Marta, tienes que dejar de suplicarle a Carlos que vuelva contigo, y aceptar que te ha dejado definitivamente. —Pero, ¿no dicen que la esperanza es lo último que se pierde? —No, cariño, lo último que se pierde es el orgullo. Y tú hace tiempo que ya no lo llevas contigo. Valorarse uno mismo no tiene precio.
  • 6. Una mujer le confiesa preocupada a una amiga: —Elvira, últimamente mi hijo pequeño le contesta de malos modos a los profesores, le cuesta concentrarse en clase, y tiene continuas peleas con sus compañeros. ¿Qué puedo hacer? —¿Tienes discusiones en casa con tu esposo? —Para nada. Mi casa es un remanso de paz: mi marido no me dirige la palabra, y yo le ignoro por completo. El silencio no siempre es una señal de armonía, sino de tensión reprimida. Dos chicas charlando: —Carolina, ¿por qué a las chicas nos suelen gustar chicos mayores que nosotras? —Porque valoramos mucho la seguridad y la madurez. —¿Y por qué los chicos suelen buscar chicas más jóvenes que ellos? —Porque desean recuperar la inseguridad y la inmadurez de su juventud. Todos buscamos lo que no tenemos o lo que hemos perdido. Dos mujeres hablando sobre el amante de una de ellas: —Estoy cansada de ser “la otra”. Él siempre me dice que me quiere con locura, pero que le dé algo más de tiempo para que arregle las cosas con su mujer y sus hijos. —Bueno, a mí me parece que está actuando de manera bastante responsable. Sólo quiere hacer las cosas bien. —Sí. Y sobre todo, con tranquilidad, porque lleva así 12 años. Cuando tenemos miedo de tomar una decisión, el tiempo es una excusa muy socorrida.
  • 7. Una adolescente le comenta a su mejor amiga: —Natalia, quiero dejar a mi pareja, pero no me lo está poniendo nada fácil. —Te está haciendo chantaje emocional, ¿verdad? —No, es que no me da ningún motivo para romper con él. En el juego de las relaciones, no necesitamos que el otro mueva ficha para que decidamos terminar la partida. Una chica telefonea entusiasmada a una antigua amiga: —Marisa, creo que he encontrado al hombre de mi vida. Con decirte que sólo con estar abrazada a él en el sofá viendo una película romántica, ya me siento feliz. —Yo que tú no me apresuraría. Espera a ver cómo reacciona cuando lo que estéis viendo sea un partido de fútbol, y su equipo sea el que vaya perdiendo. Amar es fácil cuando todo nos sonríe. Pero el verdadero amor sólo se pone a prueba cuando el destino nos frunce el ceño. Una muchacha le comenta a otra: —Inés, creo que mi chico y yo hemos perdido la “magia” que había en un principio. —Te entiendo muy bien. Mi novio también me ha confesado que cree que se ha roto el “encantamiento”, pero piensa que es porque yo soy la “bruja” que lo “hechizó” en un principio. El amor no desaparece por arte de magia, sino por falta de atención.
  • 8. Una chica le comenta angustiada a una amiga: —Sandra, mi novio está cada vez más celoso y posesivo. Y cada día me veo más agobiada, porque siento que toda mi vida tiene que girar en torno suya si quiero evitar sus enfados. —¿Y por qué no lo hablas con él? —Ya lo he hecho, pero siempre me dice que sus celos van cada vez a más, porque cada día está más enamorado de mí. El verdadero amor no aprisiona, sino que nos da alas con las que recuperar nuestra libertad. Una chica le comenta con preocupación a una amiga: —Marisol, desde que me dejó mi novio ando todo el día dándole al coco, y no puedo parar de pensar. —Pues haz lo que hacemos todos los que no queremos pensar. —¿El qué? —Ver la tele. Anestesiar el dolor nos hará insensibles a muchas otras cosas aparte del dolor. Dos chicas charlando: —Cristina, cuando me dejó mi ex, me dijo que yo era insoportable y que nadie más me iba a querer nunca. —¿Y por eso te has empeñado en liarte con todos los chicos de la facultad: para dejarlo por mentiroso? No necesitamos demostrarle nada a nadie. Ni siquiera a nosotros mismos.
  • 9. Dos quinceañeras charlando: —Patricia, ¿tú discutes mucho con tu novio? —¿Yo?, nunca. —Vaya, qué suerte que os llevéis tan bien. —No es eso. Es que tengo miedo de llevarle la contraria, no sea que me deje. Cuando hemos perdido nuestra autoestima, ¿qué otra cosa merece la pena conservar? Una adolescente le comenta preocupada a una amiga: —Beatriz, mi chico me dijo que me llamaría esta tarde, y aún no me ha llamado. Cómo estaré, que ya no me quedan uñas que comerme, y estoy empezando con los padrastros. —Pues llámalo tú. —Sí, hombre, ¿y parecer desesperada? Lo malo de comernos mucho la cabeza es que después se nos quita el apetito. Una muchacha le pregunta a su novio: —Pablo, ¿qué lugar ocupo yo en tu lista de prioridades? —Estás en segundo lugar. —¡Qué bueno que te importe tanto! ¿Y quién ocupa la primera posición: tu madre, verdad? —No, el fútbol. ¿Cómo sabemos qué es lo más importante para nosotros? Fácil: ¿en qué no podemos dejar de pensar?
  • 10. Dos chicas hablando: —Sandra, últimamente discuto con mi novio por todo, y cualquier tema de conversación termina en una pelea. —¿Y quién dirías tú que las empieza? —Está claro que ÉL. Pero como no quiero que se sienta solo, le acompaño con gusto. Las continuas peleas en las que nos vemos envueltos las provocamos nosotros. Por supuesto, inconscientemente. Una joven le comenta a otra: —Eloísa, mi novio y yo hemos puesto tantas ilusiones en nuestra relación, que no me parece bien terminar lo nuestro de golpe. —¿Y qué prefieres entonces: una muerte lenta y dolorosa? Cortar los hilos que nos atan al pasado es la única manera de poder avanzar hacia el futuro. Dos jóvenes hablando: —Nuria, desde que mi novio me ha insinuado que no le disgustaría casarse conmigo, no hago más que verle defectos. —Tienes miedo al compromiso, ¿verdad? —O eso, o me he vuelto de repente mucho más observadora. El miedo es un experto a la hora de buscar excusas para no enfrentarse a lo que más teme.
  • 11. Un pequeño le pregunta a su padre: —Papi, ¿por qué los sultanes pueden tener varias esposas, pero tú sólo una? —Porque yo soy más listo. ¿Te imaginas lo que sería tener en casa a siete como tu madre? Aumentar la cantidad de algo no necesariamente hace aumentar la calidad. Un marido se queja a su mujer a la hora de la comida: —María, ¿otra vez patatas hervidas? ¡Se me va a poner cara de tubérculo! —No te preocupes, cariño —responde la mujer—. Yo friego todos los días el wáter, y aún no se me ha puesto cara de escobilla. ¿Nos CONVERTIMOS en aquello que HACEMOS? Un marido le dice a su mujer: —Cariño, ¿por qué te pasas todo el día quemando incienso y encendiendo velas aromáticas? —Para ahuyentar a los malos espíritus. —¿Y cómo es que tu madre sigue aún con nosotros? Todo el mundo sabe que nuestra madre es una santa, y que la madre de nuestra pareja es un demonio. ¿Por qué, entonces, se empeña nuestra pareja en afirmar exactamente lo contrario?
  • 12. Dos señoras hablando: —Mi marido no puede ni ver a uno de sus compañeros de trabajo, pero en vez de hablarlo con esa persona, me bombardea a mí con todo lo que le revienta de él. —Ya veo, eres su paño de lágrimas. —Sí, pero ya me estoy cansando de lavar cada día el maldito pañuelo. Si acostumbramos a la gente a usarnos como un contenedor para descargar su basura, dejaremos sin empleo al servicio de limpieza pública. Por la autopista, un marido le dice a su temerosa mujer, que acaba de sacarse el carnet de conducir: —Cariño, pulsa el mecanismo que regula la entrada de la mezcla explosiva en la cámara de combustión y que permite incrementar el número de revoluciones del motor. —Paco, habla más claro, que no te entiendo. —¡Que pises el acelerador, joder, que vamos pisando huevos! No hay como hablar claro para que nos entiendan. Dos amigas charlando: —¿Sabes qué he pensado hacer para remediar el infierno de peleas e insultos en que se ha convertido la relación con mi marido? —¿Dejarlo? —No, tener un hijo con él. ¿La forma de apagar un fuego es echándole más gasolina?
  • 13. Un joven le confiesa a un amigo: —Pablo, mi novia acaba de dejarme después de cinco años de relación, y se me está pasando por la cabeza hacer una tontería. —¿No estarás pensando en suicidarte? —He dicho una tontería, no una gilipollez. En la vida, a veces se apagarán de golpe todas las luces y sentirás miedo. Es algo normal. Ten fe; el corte de electricidad no durará mucho. Dos chicas hablando: —¿A ti también te pasa que con los chicos que más te gustan son con los que menos interés muestras? —¡Para nada, tía! ¡Estoy yo como para desaprovechar oportunidades! No hay escasez de oportunidades ni de ninguna otra cosa. La abundancia es tu derecho de nacimiento. Reclámalo. Dos chicas charlando: —Fátima, ¿por qué a la mayoría de los chicos les aterra el futuro en pareja y el compromiso? —Porque son unos inmaduros. —Es cierto. Y para cuando han madurado, ya están hechos unos carcamales. Tener miedo al compromiso es, en realidad, temer la pérdida de nuestra propia libertad.
  • 14. Una amiga le pregunta a otra bastante tímida: —Begoña, ¿cuál es la fantasía sexual más loca que has tenido? —Bueno, me da un poco de vergüenza decírtelo. —Venga, dime, ¿te imaginabas haciéndolo con un atractivo actor de cine? —No. —¿Con un presentador de televisión cachas? —Tampoco. —¿Con un fornido atleta? —Para nada. —Entonces, ¿con quién porras lo hacías? —Con mi marido en nuestra cama. Pero eso sí, con las luces encendidas. Superar nuestros propios límites, no los de los demás, es lo que de verdad importa. Dos señoras hablando: —Felisa, ¿tú has engañado alguna vez a tu marido? —Yo, nunca. ¿Y tú? —Yo, todas las noches. En cuanto cierro los ojos. Los sueños nocturnos son una válvula de escape para liberar la presión que hemos reprimido durante el día.
  • 15. Dos muchachas conversando: —Irene, ¿por qué las chicas nos comemos tanto la cabeza? —¿A qué te refieres? —Ya me entiendes: ¿Me llamará Carlos o no me llamará? ¿Le gustaré o no le gustaré? ¿Debería llamarle yo o esperar a que me llame él? —Sí, ya veo a lo que te refieres. En ese sentido, los chicos lo tienen más fácil que nosotras. Su única pregunta es: ¿A qué hora ponen el partido? Las mujeres tienen fama de complejas; los hombres, de simplones. Dios sabía muy bien lo que se hacía cuando nos creó: quería que aprendiéramos del otro sexo. Una chica le dice a una amiga: —Esther, mi chico y yo nos hemos dado un tiempo para pensar. —¿Para pensar el qué? —¡Vaya, en eso no habíamos pensado! Si nos pensamos demasiado las cosas, nos perderemos toda la frescura que sólo la espontaneidad puede ofrecernos. Una joven le pregunta a otra: —Alicia, ¿tú cómo te consideras: pasional o racional? —Yo soy paracional, porque me dejo llevar por el corazón cuando me enamoro de alguien que NO me conviene, y utilizo después la cabeza para justificar la insensatez que acabo de cometer. La cabeza no está situada por encima del corazón porque sea más importante, sino porque, ¿Dónde nos Pondríamos la Gorra si no?