Recuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte #3.pptx
Ejercicio de los 33 días
1.
2. Estas oraciones son muy devotas, y los que rezaren podrán
alcanzar de Dios lo que le pidieren. Se ha de rezar delante de
un crucifijo, comenzando un viernes por espacio de treinta y
tres (33) días; poniendo la vista atenta en su santísima imagen,
hasta haber rezado los cinco Padrenuestros y cinco Avemaría
y esto a de ser todos los días. Las personas que lo hicieren, les
será otorgado lo que piden, si les conviniere: el cautivo podrá
ser libre de su cautiverio; el litigante salir exitoso de su pleito,
siendo lo que pide en servicio de Dios; el calumniado ser
consolado al cabo de treinta y tres días; el enfermo por quien se
ofreciere alcanzar su salud; al que está en pecado mortal, salir
de él; el difunto por quien se rece, salir de las penas del
purgatorio; el ausente, aunque esté en tierras extrañas, salir con
felicidad, al cabo de estos treinta y tres (33) días cuyo ejercicio
esté confirmado por el Sumo Pontifique Gregorio VIII, que lo
concedió.
3.
ORACIÓN
¡Oh Buen Jesús, único amor y bien mi alma! Por aquellos dolores que
padeciste en la santísima Cruz y señaladamente por aquella acerbísima
amargura que sentiste cuando arrancó vuestra alma de vuestro cuerpo:
os ruego Señor, tengáis misericordia de mi alma, y cuando saliere de mi
cuerpo, os suplico la lleváis a la gloria a gozar de vuestra presencia por
toda la eternidad. Amén
1.-Viernes: se ha de ofrecer cuando vuestro Señor dio su santísimo
cuerpo sacramentado a sus discípulos.
2.-Sábado: a la grande agonía que tuvo su Divina Majestad en el
huerto, y el sudor de sangre que tuvo en él.
3.-Domingo: cuando le prendieron, lo llevaron y lo trajeron en
casa de Anás y las afrentas que pasó.
Lunes: cuando lo llevaron a casas de Caifás y lo que allí pasó.
4. 5. Martes: cuando lo sacaron, llevaron y trajeron arrastrado por las
calles, y la sangre que derramó.
6. Miércoles: cuando lo pusieron delante de los sacerdotes
tratándolo con malas palabras.
7. Jueves: cuando lo llevaron a casa de Poncio Pilato y las molestias
que allí le hicieran.
8. Viernes: cuando determinó Pilatos remitirlo a Herodes.
9. Sábado: cuando lo llevaron a casa de Herodes y las muchas
afrentas que allí le hicieron.
10. Domingo: cuando le vistieron con la vestidura blanca.
11. Lunes: cuando lo llevaron en casa de Pilatos y los ultrajes y
muecas que le hicieron, haciéndolo caer en tierra.
12. Martes: Cuando fue atormentado en casa de Pilatos y allí fue
desnudado de su santísima vestidura.
13. Miércoles: cuando lo sacaron desnudo delante de todos y lo
ataron a la columna.
14. Jueves: cuando lo desataron de la columna, cayó en tierra y al
llegar un fariseo le puso el pie en su garganta dándole
cruelísimos
5. azotes.
15. Viernes: cuando le pusieron la corona de espinas.
16. Sábado: cuando le pusieron la caña en las manos y le
escarnecían diciéndole: Dios te Salve Rey de los Judíos.
17. Domingo: cuando le vistieron de una vestidura de escarnio.
18. Lunes: cuando le sacaron con la cruz a cuestas, dándole con
salivas en su santísimo rostro.
19. Martes: cuando la Santa Verónica le dio la toca, con la cual
limpio su santísima rostro, y su santísima Madre llegó por
encima de todos y le besó.
20. Miércoles: cuando lo llevaron a crucificar, y su santísima
Madre iba en su seguimiento, y lo que sintió al verla tan
afligida.
21. Jueves: cuando llegó al monte calvario, lo desnudaron para
clavarlo en la cruz.
22. Viernes: Cuando lo ataron cruelmente con las ataduras, y
desconcertaron su santísimo cuerpo para que alcanzara al
barreno que habían hecho
6. 23. Sábado: cuando lo clavaron de pies y manos en la cruz.
24. Domingo: cuando tuvo aquel dolor tan grande después de
clavado en la cruz, le voltearon boca abajo, y lo llevaron
arrastrando a donde se había de fijar la cruz, y el gran dolor
que sitio su santísimo cuerpo metiéndose las piedras por
las heridas.
25. Lunes: el gran dolor que sintió su Divina Majestad cuando
lo levantaron en alto, pendiente de la cruz.
26. Martes: cuando la burla y el escarnio que le hicieron a su
Divina Majestad los presentes, así como también la hiel y el
vinagre que le dieron.
27. Miércoles: la primera palabra que nuestro Señor Jesucristo
habló al Padre Eterno diciéndole: “Padre perdónalos
porque no saben lo que hacen”.
28. Jueves: la segunda al buen ladrón diciéndole: - hoy estarás
conmigo en el paraíso.
29. Viernes: la tercera que dijo a su santísima Madre: -”ved
mujer ahí a tu hijo”, y a San Juan: -“ved a ahí a tu madre”.
Sábado: la cuarta cuando dijo: - “Dios mío, ¿Por qué me
has desamparaste?”
7. 31. Domingo: la quinta cuando dijo: -”tengo sed”
32. Lunes: la sexta cuando dijo: - “acabado esta”.
33. Martes: la séptima que dijo: “Padre en tus manos
encomiendo mi espíritu”.
Para ofrecer este santo ejercicio por…
Oración
Es posible, dulcísimo Salvador de las almas, que convirtiendo a
tantas cada día sólo a la perdida de la mía, te has de mostrar
insensible?. Pues en verdad, Señor que tanto te costó como la de
una Magdalena, como la de una pecadora; ¡oh tú que me
redimiste con el precio infinito de tu sangre no me abandones en
el triste desamparo en que me veo, y ten misericordia de mí.
Amén.
8. Almas bebed el licor que entre vivientes corales, brindan en cinco
raudales, las fuentes del Salvador.
Miramos, hermanos míos, con los ojos de la fe y de la religión, una
a una de las cinco llagas de nuestro amantísimo Redentor
Jesucristo Crucificado.
(Adviértase, que le decir venero, adoro, se hace reverencia con la
cabeza).
9. Jesús dulcísimo yo venero la sagrada llaga de vuestro pie siniestro, por
ella os pido perdón de todos mis pecados y dolor de haberos ofendido.
Padrenuestro, Avemaría, Gloria Patri
Madre llena de dolor,
Haced que cuando expiremos,
Nuestras almas entreguemos,
En las manos del Señor.
¡Ay, mi Jesús! que está herida
Que el siniestro pie padece
Con los malos pasos crece
Que dio mi estragada vida
Me aparté de vuestro amor
Precipitado a mis males.
Responden todos:
Pues logré yo en sus caudales
Las fuentes del Salvador.
.
10. Jesús piadosísimo, yo venero la preciosa llaga de vuestro pie derecho,
por ella os suplico me encaminéis por la senda de vuestros Santos
Mandamientos.
Padrenuestro, Avemaría, Gloria Patri
Madre llena de dolor,
Haced que cuando expiremos,
Nuestras almas entreguemos,
En las manos del Señor.
¡Ay, mi Jesús! Duro clavo
Os traspasa el pie derecho
Desde la culpa me ha hecho
De mis pasiones esclavo.
De esos grillos el rigor
Son mis obras desleales,
Pues logré yo en sus caudales
Las fuentes del Salvador.
11. Jesús amorosísimo, yo reverencio la santísima llaga de vuestra
mano siniestra, por ella os ruego borréis de mi alma los malos
hábitos y reliquias del pecado
Padrenuestro, Avemaría, Gloria Patri
Madre llena de dolor,
Haced que cuando expiremos,
Nuestras almas entreguemos,
En las manos del Señor.
¡Ay, mi Jesús Soberano!
Penetra mi corazón
con este clavo o arpón
de nuestra siniestra mano.
¡Oh cuanto os cuestan, Señor,
mis costumbre miserables!
Pues logré yo en sus caudales
Las fuentes del Salvador.
12. Jesús amabilísimo yo venero la sacratísima llaga de
vuestro mano derecha por ella os suplico me libréis
de todas las ocasiones de pecar y perderos.
Padrenuestro, Avemaría, Gloria Patri
Madre llena de dolor,
Haced que cuando expiremos,
Nuestra almas entreguemos,
En las manos del Señor.
¡Ay, mi Jesús! Cuanta pena
vuestra diestra mano siente,
cuando la punta inclemente
su tierna palma barrenal
en vuestra mano el dolor
son mis hechos criminales
Pues logré yo en sus caudales
Las fuentes del Salvador.
13. Jesús misericordiosísimo, yo me arrojo en la amorosísima llaga de
vuestro ardiente costado, en que deposito mi alma, para que
borrándola con vuestra preciosísima sangre las manchas de mis
culpas, la encendáis en vuestro divino amor y a la hora de mi
muerte la recibáis en vuestra amistad y vuestra Gloria. Amén
Padrenuestro, Avemaría, Gloria Patri
Madre llena de dolor,
Haced que cuando expiremos,
Nuestra almas entreguemos,
En las manos del Señor
¡Ay mi Jesús! Qué cruel lanza
en vuestro cuerpo ya muerto,
tan profunda llaga ha abierto,
que hasta el corazón alcanza.
Con su purpúreo licor
se ablandan los pedernales.
Pues logré yo en sus caudales
Las fuentes del Salvador.
14. Señor mío Jesucristo crucificado, por aquellos dolores,
amarguras y tormentos que por nuestro amor
padeciste en la cruz, y por lo que al pie de la cruz
experimentó vuestra dolorosa Madre María
Santísima especialmente al arrancarse vuestra
alma bendita de vuestro sagrado cuerpo, os
suplicamos tengáis misericordia de nosotros y nos
deis una santa muerte en vuestra amistad y en
vuestra gracia. Amén.
Una Avemaría a la dolorosa Madre de Dios, y luego
esta jaculatoria y la oración siguiente:
María al pie de la Cruz
traspasada de dolor
15. alcánzanos a Jesús
su gracia, humildad y amor,
y una buena muerte. Amén
ORACIÓN
Dios te salve, tórtola gemidora, Virgen dolorosísima concebida sin
pecado original, relicario purísimo de la Santísima Trinidad
suplicándote, Señora, por tus gravísimos dolores, por las lágrimas
que derramaste al pie de la cruz y sobre el difunto cuerpo de tu
Santísimo Hijo, por tus suspiros, gemidos que diste viniendo del
sepulcro a la casa de San Juan, nos alcances de su Majestad, nos
libre de todo contagio, de muerte repentina, desapercibida, del
pecado mortal y nos conceda los preciosos dones de la contrición,
fe, paciencia, humildad y castidad, nos dé un dichoso fin en gracia
y caridad nos veamos solos, en la estrecha cuenta que hemos de
dar, por tu intercesión salgamos libres de aquel espantoso tribunal
a gozarle en las delicias de la gloria. Amén
16.
(Están concedidos 300 días de indulgencias por cada
vez que se hagan, e indulgencia plenaria cada mes)
1. Divino Eterno Padre, os ofrezco los méritos de la sangre
preciosísima de Jesús, vuestro amado Hijo y mi adorado
Redentor, en satisfacción de todos mis pecados, por la
exaltación de la Iglesia Católica, por la prosperidad del
Sumo Pontífice, Cardenales, Obispos y demás pastores
de almas así como también por todos los Ministros del
Santuario (para mi familia y el mío propio…)
Gloria Patri, y luego la jaculatoria: Sea por siempre
bendito y alabado Jesús que con su sangre nos ha
salvado.
17. Divino Eterno Padre, os ofrezco los méritos de la sangre preciosísima
de Jesús, vuestro amado Hijo y mi adorado Redentor, por la paz y
la concordia entre los Reyes y Príncipes Católicos, por la
humillación de los enemigos de la Santa Fe, y por la
felicidad del Pueblo Cristiano, (de mi familia y el mío
propio…)
Gloria Patri, ... Sea por siempre bendito...
3. Divino Eterno Padre, os ofrezco los méritos de la sangre
preciosísima de Jesús, vuestro amado Hijo y mi adorado Redentor,
por la extirpación de todas las herejías, demás sectas y por la
conversión de todos los pecadores.
Gloria Patri, ... Sea por siempre bendito..
4. Divino Eterno Padre, os ofrezco los méritos de la sangre
preciosísima de Jesús, vuestro amado Hijo y mi adorado Redentor,
por todos aquellos por quien yo debo rogar y que Vos
desearéis que ruegue.
Gloria Patri,... Sea por siempre bendito...
18. 5. Divino Eterno Padre, os ofrezco los méritos de la sangre preciosísima de
Jesús, vuestro amado Hijo y mi adorado Redentor, por todos los que
ahora están en la agonía y hoy van a morir, para que los libréis
de las penas del Infierno, les concedáis cuanto antes la
posesión de la eterna Gloria.
Gloria Patri, ... Sea por siempre bendito...
6. Divino Eterno Padre, os ofrezco los méritos de la sangre preciosísima de
Jesús, vuestro amado Hijo y mi adorado Redentor, por todos los que
son amante de tan inestimable Tesoro, por aquellos que se unen
conmigo para venerar la misma preciosa Sangre y que trabajan en
propagar esta especial devoción.
Gloria Patri, ... Sea por siempre bendito...
7. Divino Eterno Padre, os ofrezco los méritos de la sangre preciosísima de
Jesús, vuestro amado Hijo y mi adorado Redentor, por todas mis
necesidades espirituales y temporales, por el bien de todos mis
amigos y enemigos, parientes y bienhechores, en sufragio de las
almas benditas del Purgatorio
19. especialmente de las que han sido más devotas del precio de nuestra
Redención, y de los Dolores de nuestra amantísima Madre la
Virgen María.
Gloria Patri, ... Sea por siempre bendito...
Alabanza, gloria y loor a la Sangre divina de Jesús, ahora y siempre,
por los siglos de siglos. Amén
Pídase por los propagadores de tan grande y singular devoción.
ORACIÓN A JESÚS CRUCIFICADO
Miradme ¡oh mi amado y buen Jesús! Postrado en vuestra divina
presencia os ruego con el mayor fervor que imprimáis en mi
corazón los sentimientos de Fe, Esperanza y Caridad, dolor de mis
pecados y propósito firme de nunca jamás ofenderos; mientras
que con todo el fervor, todo el amor y compasión de que soy
capaz considero vuestras cinco llagas, comenzando por lo que de
Vos dijo el Profeta David: “traspasaron mis manos y mis pies y se
pueden contar todos mis huesos”
Recen cinco Padrenuestros y cinco Avemaría
20. …Además os digo, que si dos de vosotros se ponen de
acuerdo sobre cualquier cosa que pidan aquí en la tierra, les
será hecho por mi Padre que está en los cielos. Porque
donde están dos o tres reunidos en mi nombre, allí estoy yo
en medio de ellos.
(MATEO 18:19)