Este documento describe los principales elementos de los huesos y articulaciones del cuerpo humano. Explica que los huesos se dividen en largos, cortos, planos e irregulares y están formados por el endostio y el periostio. Las articulaciones permiten la unión de dos o más huesos y pueden ser troclear, trocoides, elipsoidea, etc. En las articulaciones se encuentran el cartílago articular, los meniscos, la cápsula articular, los ligamentos y la membrana sinovial. El cartílago
6. Endostio: membrana que recubre la superficie de la cavidad medular de los huesos largos. Periostio: Es la vaina fibrosa que cubre los huesos, la cual contiene vasos sanguíneos y nervios que nutren y le dan sensibilidad al hueso.
10. Los cinco principales elementos no óseos de las articulaciones son: el cartílago articular, los meniscos, la membrana sinovial, la cápsula articular y los ligamentos.
11. cartílago: Nos ayuda a amortiguar la sobrecarga de presión de las superficies articulares y nos permite el desplazamiento de las superficies óseas sin que se produzca fricción entre ellas.
12. menisco: Son estructuras fibrocartilaginosas. Se hallan entre los extremos óseos de algunas articulaciones del cuerpo. Su finalidad es que se adopten de una manera más perfecta y de aumentar la superficie de contacto entre los huesos. la articulación típica provista de meniscos es la rodilla.
13. capsula articular: Es un tejido que envuelve toda cavidad articular. Su misión es proporcionar estabilidad a todo el conjunto de la articulación cubierta, este cubre una membrana llamada membrana sinovial que es la productora del liquido sinovial.
14. ligamentos: Son estructuras fibrosas, a modo de cuerdas, que se hallan junto a las articulaciones. Gracias a ellos, los huesos permanecen debidamente unidos entre si y ven limitada la amplitud de algunos movimientos.
15. Los extremos óseos relacionados en una anfiartrosis o diartrosis no toman contacto directamente por el tejido óseo, sino que el hueso está cubierto por el cartílago articular. Los extremos óseos contactantes quedan entonces debajo del cartílago, por lo que se llaman HUESO SUBCONDRAL (sub: debajo, condros: cartílago). Cuando los huesos se mueven las superficies cartilaginosas se deslizan una sobre otra esencialmente sin fricción, lo que permite un movimiento fácil. Hueso subcondral: