2. Ya he recomendado en un par de ocasiones la
serie documental que están realizando desde el
ISDI y el diario El Confidencial. Tras hacer un
recorrido de muchos de los puntos característicos
de la cultura emprendedora, en esta ocasión
dedican su especial al emprendimiento social y
sus diversos puntos de vista.
3. Un emprendimiento social tiene que tener beneficios y
no puede vivir de subvenciones. Su objetivo no es
tanto hacer mucho dinero como generar un bien social
que pueda repercutir en la sociedad. La empresa ha
de tener dos cuentas de resultados: una económica y
otra social.
4. Los emprendimientos sociales deberían ser
autosostentibles y no vivir de subvenciones
públicas ofrecidas por las Administraciones
Públicas. La gente tiende a confundir este tipo
de emprendimiento con las ONG, pero no lo
son. Las empresas han de ser rentables para
poder existir, evolucionar y crecer. Utilizan su
rendimiento para reinvertirlo en su proyecto y
aumentar su impacto social.