6. 1. El reinado de Alfonso XIII.
Crisis y quiebra del
sistema de la Restauración.
7. 1.1 Panorama general del reinado.
La Regencia de María Cristina de
Austria finalizó en 1902, al alcanzar
la mayoría de edad (16 años) su hijo,
Alfonso XIII. El reinado del nuevo rey
se caracterizó por vivir una crisis
política casi permanente que
manifestó en múltiples aspectos.
8. La crisis política se
manifestó en las injerencias
del rey en los asuntos
políticos (apoyó a los
militares conservadores), en
la inestabilidad de los
partidos turnistas (tras la
muerte de sus líderes y sus
divisiones internas), en el
debilitamiento del
caciquismo ante el
crecimiento urbano, y en el
desarrollo de los partidos
políticos excluidos del
sistema.
9. A la crisis política se sumó una crisis social manifestada
en: el aumento de la lucha obrera promovido por los
sindicatos UGT (que llegó a contar con 200.000 afiliados)
y CNT (que alcanzó los 700.000 afiliados); el desarrollo
del nacionalismo periférico; el problema religioso
ante el aumento del anticlericalismo; el problema militar
al imponerse las reivindicaciones militares al poder civil; y
el problema colonial en Marruecos (protectorado de
España y Francia desde 1906).
10. 1.2 Intentos de modernización.
El regeneracionismo.
Entre 1898 y 1912 hubo intentos de modernización del
sistema de la Restauración, promovidos por los partidos
del turno. Hasta 1909, el protagonismo lo mantuvo el
conservador Antonio Maura, después el liberal José
Canalejas. Sus respectivos fracasos, pese a algunos
logros, abrieron paso a una profunda crisis.
11. Tras la pérdida de las colonias españolas en 1898, las
ideas regeneracionistas llegaron a los partidos
turnistas. Francisco Silvela, nuevo líder conservador
tras el asesinato de Antonio Cánovas del Castillo, intentó
una reforma del gobierno municipal con el fin de acabar
con el caciquismo.
12. Antonio Maura, se convirtió en el nuevo líder
conservador y gobernó entre 1907 y 1909 promoviendo
una “revolución desde arriba”. Aprobó una Ley Electoral
(1907), que convertía el voto en obligatorio y en ciertas
circunstancias suprimía la votación. La Ley de Bases
para la Administración Local otorgó a los municipios de
mayor capacidad de maniobra económica e incluía la
posibilidad de permitir a las diputaciones provinciales
colaborar entre sí mediante mancomunidades.
13. También Antonio Maura desarrolló medidas sociales,
como la creación del Instituto Nacional de Previsión
(precedente de la actual Seguridad Social), la
implantación del descanso dominical o la regulación del
derecho de huelga. Su Ley de Represión del
Terrorismo, dirigida contra los anarquistas, fue puesta
en práctica en 1909 ante el levantamiento popular de
Barcelona contra el reclutamiento de reservistas para ir a
la guerra en Marruecos (Semana Trágica). La represión
de estas protestas provocaron la dimisión de Maura.
14. Entre 1910 y 1912 el gobierno
liberal de José Canalejas, intentó la
progresiva democratización del
sistema de la Restauración. La Ley
de Asociaciones Religiosas o “Ley
del Candado”, prohibió el
establecimiento sin permiso de
nuevas órdenes religiosas en
España. Una nueva ley de
reclutamiento estableció el servicio
militar obligatorio y se abolió el
impopular impuesto de consumos.
15. En 1912 José Canalejas promovió en el Congreso la Ley
de Mancomunidades, que permitió la creación de este
organismo en Cataluña (1914), coordinando el fomento
de las obras públicas y la cultura de las cuatro
diputaciones provinciales catalanas. Finalmente en 1912
José Canalejas fue asesinado por un anarquista
cuando miraba el escaparate de la desaparecida librería
San Martín en la Puerta del Sol de Madrid.
16. 1.3 Crisis y quiebra
del sistema de la Restauración.
La primera crisis del reinado de
Alfonso XIII tuvo lugar en 1905
tras la victoria electoral en
Cataluña de la Lliga Regionalista
y la publicación de una viñeta
antimilitar en el periódico catalán
Cu-Cut! En 1906 el gobierno
aprobó la Ley de
Jurisdicciones por la cual las
ofensas al ejército serían
juzgadas por tribunales militares.
17. La segunda crisis, la Semana Trágica de 1909, fue la
huelga y levantamiento popular en Barcelona en protesta
por el reclutamiento para la guerra en Marruecos de
reservistas catalanes, hombres casados y con hijos que
habían hecho el servicio militar al no haber podido pagar
la cuota necesaria para librarse del mismo.
18. El reclutamiento se debió a la necesidad de refuerzos
militares para el control del protectorado español del
norte de Marruecos, ante los ataques de las poblaciones
rifeñas a la Compañía Española de Minas del Rif (derrota
española del Barranco del Lobo).
19. El levantamiento, impulsado por socialistas, anarquistas
y republicanos radicales, fue reprimido por el ejército
(muriendo casi 80 personas, quedando mil heridas, dos
mil procesadas y cuatro ejecutadas). La ejecución del
pedagogo Francisco Ferrer Guardia provocó protestas
nacionales e internacionales que forzaron la dimisión de
Antonio Maura.
20. La tercera crisis estuvo unida a la
división de la sociedad española
ante el estallido de la Primera
Guerra Mundial (1914), si bien
España se declaró neutral ante
su aislamiento diplomático y su
incapacidad militar. Los
conservadores, gran parte del
ejército y el propio rey fueron
germanófilos, pues admiraban al
Imperio Alemán, mientras que los
liberales y los republicanos se
mostraron aliadófilos, al apreciar
a la Francia republicana.
21. España aumentó las exportaciones de materias primas
y productos industriales a los países beligerantes, lo que
conllevó crecimiento económico e inflación. Por ello la
Primera Guerra Mundial agravó las diferencias
sociales en España al enriquecer a la burguesía
industrial y financiera, mientras que las clases
trabajadoras sufrieron un descenso del nivel de vida.
22. En 1917 se desarrolló una triple crisis del sistema de la
Restauración. En junio el gobierno aceptó las exigencias
militares ante el ultimátum de las Junatas Militares de
Defensa, que exigían mejoras salariales y defensa de los
ascensos por antigüedad y no por méritos en la guerra de
Marruecos.
23. En julio, Francesc Cambó, el líder de la Lliga
Regionalista, ante el cierre de las Cortes decretado por el
gobierno, convocó a todos los senadores y diputados
españoles a una Asamblea de Parlamentarios en
Barcelona, que pretendía elaborar una nueva
constitución y aprobar la autonomía para Cataluña. Esta
Asamblea fue disuelta por la Guardia Civil.
24. En agosto, la UGT convocó una huelga indefinida, fijando
como objetivo la implantación de una república
democrática. Esta huelga, que no contó con el respaldo
de CNT, fue seguida con intensidad en Madrid,
Barcelona, País Vasco y Asturias, acabando con más de
70 muertos, 200 heridos y 2.000 detenidos.
25. Tras la crisis de 1917 y hasta 1923, se crearon once
gobiernos de concentración nacional, formados por
conservadores, liberales y catalanistas conservadores,
pero no consiguieron estabilizar al régimen de la
Restauración.
26. Tras el fin de la Primera Guerra Mundial (1918), el
nacionalismo periférico se vio reforzado al respaldar el
presidente de EEUU, Woodrow Wilson, el principio de
autodeterminación de los pueblos.
27. En 1917 el Partido Nacionalista Vasco consiguió el
gobierno de la Diputación de Vizcaya, apareciendo a su
vez un partido autonomista vasco (Comunión
Nacionalista Vasca).
28. Cataluña se conformó desde 1914 como Mancomunidad
gobernada por la Lliga Regionalista. Al colaborar el
catalanismo conservador con el gobierno central,
apareció en Cataluña un nuevo nacionalismo de carácter
republicano e independentista, que dio lugar en 1922 a
los partidos Estat Catalá y Acció Catalana.
29. Por otra parte, el final de la
Primera Guerra Mundial
estuvo unido al triunfo de la
revolución comunista en
Rusia (1917). La admiración
por la revolución rusa por
parte de un grupo de
socialistas del Partido
Socialista Obrero Español
llevó a la creación en 1921
del Partido Comunista de
España (PCE), donde
destacó la figura de Dolores
Ibárruri.
30. Entre 1918 y 1920 se desarrolló el denominado “Trienio
Bolchevique”, dominado por las revueltas de jornaleros
andaluces que ocuparon tierras de terratenientes
impulsados por la CNT. En Barcelona la CNT impulsó la
huelga de La Canadiense (1919), la compañía eléctrica
de Barcelona. Logró que se aprobara la reducción de la
jornada laboral a ocho horas, convirtiendo a España en
uno de los primeros países en aprobar esta medida.
31. La patronal respondió con el cierre de empresas, la
creación de sindicatos libres colaboracionistas y la
contratación de bandas de pistoleros para asesinar a los
líderes anarquistas. Por su parte, el gobierno aplicó la
“Ley de fugas”, por la que los sindicalistas detenidos
eran asesinados alegando que intentaban escapar. En
este contexto el presidente de gobierno Eduardo Dato
fue asesinado por un grupo anarquista. La violencia se
difundió en Barcelona, cayendo muertos 40 empresarios
y más de 500 obreros.
32.
33. 1.4 La Guerra de Marruecos.
La política colonial marroquí se inició tras la Conferencia
de Algeciras de 1906 en la que se mantuvo la
independencia teórica de Marruecos, pero Francia y
España, fijaron sus respectivas zonas de influencia en
el país magrebí, marginando los intereses de Alemania.
34. A España le correspondió el control de la zona norte de
Marruecos, donde España mantenía Ceuta y Melilla.
Esta zona norte correspondía con el Rif, un territorio
accidentado habitado por cabilas o tribus de bereberes,
hostiles a la presencia extranjera y no sometidas al
sultán. Para asegurar la Compañía Española de Minas
del Rif y la construcción de un ferrocarril, España tuvo
que enfrentarse a los rifeños.
35. Ante los primeros ataques de los rifeños en julio de 1909
(victoria en el Barranco del Lobo), el gobierno español
decidió enviar tropas peninsulares de refuerzo dando
origen al movimiento de protesta contra la guerra de
Marruecos que desembocó en la Semana Trágica.
36. En 1912 el Tratado de Fez confirmó el establecimiento
de un protectorado franco español sobre Marruecos. La
Primera Guerra Mundial interrumpió las operaciones
coloniales franco-españolas en Marruecos, pero al
finalizar Francia relanzó su política colonial amenazando
con reducir la presencia española por lo que España
decidió completar la ocupación efectiva del territorio que
se le había asignado.
37. El general Fernández Silvestre, bajo las órdenes del
general Dámaso Berenguer, inició una ofensiva para
ocupar la zona del Rif (1920), pero su avance chocó con
la oposición de las cabilas del Rif dirigidas por Abd-el-
Krim. El contraataque rifeño comenzó con la ocupación
de Alhucemas y el ataque sobre Annual (1921),
persiguiendo a los españoles en su retirada hasta Melilla
(Monte Arruit). En total fallecieron 14.000 españoles.
38.
39. La derrota aumentó la impopularidad de la presencia
española en Marruecos y se exigieron responsabilidades,
por lo que se creó una comisión presidida por el general
Picasso. Este reveló un estado de corrupción e ineficacia
del ejército que plasmó en el Expediente Picasso, en el
que abría el debate sobre las responsabilidades de altos
cargos del ejército, incluido el propio rey.
40. Pocos días antes de que un informe de
responsabilidades políticas llegase a las Cortes, el
capitán general Miguel Primo de Rivera encabezó el 13
de septiembre de 1923 un golpe de Estado por el que
se imponía una dictadura militar como solución a la crisis
del régimen de la Restauración.
42. 2.1 El golpe militar.
El 13 de septiembre
de 1923, el capitán
general de
Cataluña, Miguel
Primo de Rivera
acaudilló un golpe
de estado militar
contra el gobierno
constitucional.
43. Las causas del golpe
militar fueron: el
desprestigio e inestabilidad
del sistema de la
Restauración, la
conflictividad obrera
(especialmente en
Barcelona donde se
desarrolló el pistolerismo),
el auge del nacionalismo
periférico (especialmente
el catalanismo), y el
descontento militar por la
cuestión marroquí y el
Informe Picasso.
44. Además el golpe tomó como ejemplo la imposición de
una dictadura en Italia encabezada por el líder del Partido
Nacional Fascista, Benito Mussolini, tras la marcha sobre
Roma de octubre de 1922.
45. Primo de Rivera elaboró un manifiesto en el que se
presentaba como el “cirujano de hierro” necesario para
regenerar el país, estableciendo una dictadura temporal
para resolver los graves problemas pendientes que a su
juicio tenía España (caciquismo, desgobierno, subversión
social, amenazas separatistas,...).
46. El golpe de estado militar fue bien recibido por el
ejército (que esperaba la resolución de la cuestión
marroquí), la iglesia (que buscaba el fin del auge popular
anticlerical), la burguesía (que demandaba el fin de la
conflictividad obrera) y Alfonso XIII (que encargó a Miguel
Primo de Rivera la formación de gobierno).
47. Los republicanos no se opusieron al golpe de estado
militar y las organizaciones socialistas se mantuvieron a
la expectativa, por lo que sólo los anarquistas y
comunistas manifestaron su repulsa y llamaron a la
huelga general pero sin tener respuesta popular.
48. 2.2 El Directorio Militar (1923-1925).
El primer gobierno de Miguel Primo de Rivera, formado por
generales, sentó las bases de la dictadura: proclamó el
estado de guerra durante dos años, suspendió la
Constitución de 1876 y las Cortes, implantó la censura de
prensa, ilegalizó al PCE y la CNT, y prohibió los símbolos
catalanes y el uso del catalán, persiguiendo al PNV.
49. Además, se impulsó una
reforma de la administración,
implantando gobernadores
militares en lugar de los
gobernadores civiles y creando
delegados gubernativos
militares para controlar los
nuevos Ayuntamientos. Con el
fin de acabar con el
caciquismo, en 1924 aprobó un
Estatuto Municipal que daba
gran autonomía económica. En
1925 un Estatuto Provincial
potenció la provincia y disolvió
la Mancomunidad de Cataluña.
50. Por otra parte, en 1924 Miguel Primo de Rivera creó la
Unión Patriótica a modo de partido único, sin ideología
definida, cuya única misión era apoyar la dictadura.
51. Sin embargo, el gran éxito de la dictadura fue el fin de la
guerra de Marruecos. Primo de Rivera, ofreció a Abd-el-
Krim una amplia autonomía para acabar con la guerra.
Pero esto animó a Abd-el-Krim a atacar en 1924 la zona
marroquí francesa, ante lo cual España usó armas
químicas y Francia y España acordaron una ofensiva
militar conjunta.
52. La operación hispano-francesa se concretó en el
desembarco de Alhucemas (1925), que fue un rotundo
éxito. En 1926, Abd-el-Krim, derrotado, se entregó,
quedando de esta forma sometido todo el protectorado
de Marruecos.
53. 2.3 El Directorio Civil (1925-1930).
En 1925 Miguel Primo de Rivera decidió consolidar la
dictadura como un Estado corporativo inspirado en la
dictadura fascista italiana, estableciendo un Directorio
Civil, en el que participaron políticos como José Calvo
Sotelo.
54. Con el fin de institucionalizar la dictadura, se impulsó
el desarrollo de la Unión Patriótica, que defendía la
unidad de España, la religión y el corporativismo socio-
económico Llegó a reunir hasta dos millones de afiliados,
procedentes del carlismo, el catolicismo y el maurismo
(seguidores de Antonio Maura).
55. En 1926 se creó, en sustitución de las Cortes, una
Asamblea Nacional Consultiva. La mitad de sus
miembros fueron elegidos por el rey y la otra mitad por la
Unión Patriótica, los municipios y las provincias. En 1929
esta Asamblea presentó el Estatuto Fundamental de la
Monarquía, proyecto constitucional que establecía un
régimen autoritario en el que el rey tenía amplios poderes
(elegía a la mitad de los diputados). No llegó a aprobarse
debido a la mala acogida.
56. Durante el Directorio Civil se promovió una política
económica intervencionista y nacionalista. En
agricultura, se creó el Servicio Nacional de Crédito
Agrícola para apoyar al pequeño campesino, se elaboró
un programa de repoblación forestal y se desarrolló una
política hidráulica basada en la construcción de
pantanos y la creación de las confederaciones
hidrográficas, cuyo fin era ampliar las zonas de regadío y
aumentar la producción hidroeléctrica.
57. En industria se fomentó el automóvil y el uso obligatorio
del carbón español en barcos y ferrocarriles. En 1927 se
creó la Compañía Arrendataria del Monopolio de
Petróleos (CAMPSA), a la que se concedió en exclusiva
la importación, refinado, distribución y venta del petróleo.
58. En transportes se
mejoró el asfaltado de las
carreteras y se
construyeron casi 10.000
kilómetros nuevos. El
gobierno amplió el control
sobre los ferrocarriles,
iniciando su lenta
nacionalización. En
materia de
comunicaciones, en
1924 se fundó la
Compañía Telefónica
Nacional, que obtuvo el
monopolio telefónico.
59. En Hacienda se elaboró una
reforma tributaria que elevó la
recaudación, con el fin de liquidar
la deuda, pero al producirse
también un aumento de los gastos
no se alcanzó el superávit. En el
ámbito laboral se impulsó la
Organización Corporativa
Nacional (1926), formada por
comités paritarios de obreros y
patronos que debían ponerse de
acuerdo para fijar las condiciones
laborales. En caso de no
conseguirlo, el Estado actuaba de
árbitro. El sindicato socialista UGT
decidió participar en este sistema.
60. En política social se promovió la construcción de
viviendas baratas y se construyeron 5.000 escuelas.
61. 2.4 La caída de la dictadura de
Miguel Primo de Rivera.
Desde 1926, al intentar
institucionalizar la dictadura,
aumentó la oposición a la misma,
aunque esta careció de unidad.
Los representantes de la vieja
política constitucional
(conservadores y liberales)
deseaban un regreso a la
constitución de 1876.
62. En 1926 se creó Alianza Republicana, uniendo a viejos
republicanos como Alejandro Lerroux y nuevos como
Manuel Azaña, Miguel de Unamuno o Antonio Machado.
Algunos monárquicos, como Niceto Alcalá Zamora y
Miguel Maura, se pasaron a las filas republicanas
creando la Derecha Liberal Republicana (1930) .
63. En el catalanismo destacó Estat Catlá una formación
republicana e independentista impulsada por Francesc
Maciá, que dio lugar en marzo de 1931 a Esquerra
Republicana de Catalunya (ERC).
64. En el movimiento obrero, comunistas y anarquistas
mostraron una continua oposición a la dictadura. Dentro
del anarquismo, en 1927 se creó la Federación
Anarquista Ibérica (FAI) partidaria de la insurrección
revolucionaria. La oposición socialista a la dictadura no
se produjo hasta el final de la misma.
65. Los intelectuales, encabezados por el filósofo José
Ortega y Gasset, asociaron su rechazo a la dictadura con
la complicidad en el desarrollo de la misma del rey
Alfonso XIII, llegando a crear en 1931 la Agrupación al
Servicio de la República.
66. Muchos estudiantes respaldaron a los intelectuales y
fundaron la pro-republicana Federación Universitaria
Escolar (FUE), a cusa de una ley que permitía a los
centros religiosos expedir títulos universitarios.
67. La oposición a la dictadura llegó al ejército, debido a la
política de ascensos de Miguel Primo de Rivera
(favoreciendo el ascenso por méritos en la guerra de
Marruecos). Tuvo un serio conflicto por este motivo con
el Cuerpo de Artillería, que fue disuelto.
68. Ante el fracaso de la institucionalización de la dictadura y
tras comprobar la tibia respuesta a una demanda de
apoyo militar que solicitó en enero de 1930, Miguel
Primo de Rivera decidió dimitir y exiliarse a Francia,
donde falleció al poco tiempo.
69. 2.5 El camino hacia la II República.
Alfonso XIII entregó el
gobierno al general
Dámaso Berenguer con la
misión de volver a la
normalidad constitucional.
Berenguer restableció las
libertades políticas, pero
tardó en convocar
elecciones, por lo que su
gobierno fue conocido como
“dictablanda”.
70. En agosto de 1930 los partidos republicanos, incluidos
los nacionalistas catalanes y gallegos, a los que se
adhirieron posteriormente los socialistas, firmaron el
Pacto de San Sebastián, cuyo objetivo era proclamar la
república. Para ello se constituyó un comité
revolucionario que debía preparar el cambio de régimen
mediante un levantamiento militar con apoyo civil.
71. En diciembre de 1930 se llevaron a cabo en Jaca
(Huesca) y Cuatro Vientos (Madrid) levantamientos
militares republicanos, pero fracasaron ante la falta de
coordinación, por lo que los capitanes que impulsaron el
primer levantamiento, Fermín Galán y Ángel García
Hernández, fueron ejecutados.
72. Finalmente Berenguer convocó elecciones legislativas
para febrero de 1931, pero republicanos, socialistas y
antiguos políticos constitucionales anunciaron su
negativa a participar en dichas elecciones, por lo que
Berenguer decidió dimitir.
73. Alfonso XIII nombró entonces
presidente del gobierno al
almirante Juan Bautista
Aznar, que anunció la
convocatoria de unas
elecciones municipales
para el 12 de abril de 1931, a
las que seguirían otras
generales con carácter
constituyente.
74. Republicanos y socialistas
decidieron concurrir a las
elecciones municipales
planteándolas como un
plebiscito a favor o en contra
de la monarquía. Aunque en
dichas elecciones hubo más
ayuntamientos monárquicos,
el triunfo de republicanos
y socialistas en las
grandes ciudades de
España fue interpretado por
Alfonso XIII como un
rechazo a la monarquía.
75. En esta situación y ante la proclamación espontánea de
la Segunda República en numerosas ciudades
españolas el 14 de abril de 1931, Alfonso XIII decidió
transmitir el gobierno al comité revolucionario creado en
el Pacto de San Sebastián y partir al exilio en Italia.
76. 3. La Segunda República:
la Constitución de 1931 y
el bienio reformista (1931-1933).
77. 3.1 La Proclamación de la Segunda
República y el Gobierno Provisional.
Tras las elecciones municipales del 12 de abril de 1931, el
14 de abril se proclamó la Segunda República. Ante el
triunfo republicano en las principales ciudades españolas,
el rey Alfonso XIII decidió exiliarse.
78. La Segunda República contó con el apoyo y el
entusiasmo de la mayoría de los intelectuales, las clases
medias y las clases populares (obreros y campesinos sin
tierras), pero tenía la desconfianza de las élites
económicas y de los pequeños propietarios campesinos.
79. Se desarrolló en un difícil contexto internacional
marcado por la crisis económica de 1929 y la crisis de la
democracia por el ascenso de los fascismos (en 1933 el
líder nazi Adolf Hitler se convirtió en presidente del
gobierno alemán).
80. El Comité revolucionario creado en el Pacto de San
Sebastián (1930) se convirtió en el primer Gobierno
Provisional de la República, compuesto por
republicanos conservadores (Niceto Alcalá Zamora),
republicanos de izquierda (Manuel Azaña), republicanos
radicales (Alejandro Lerroux), socialistas (Francisco
Largo Caballero e Indalecio Prieto) y nacionalistas
republicanos catalanes y gallegos.
81. Los primeros decretos de la República reconocieron
amplios derechos individuales, proclamaron la amnistía, y
buscaron soluciones a los grandes problemas de
España. Respecto a la organización territorial,
Francesc Maciá, dirigente de Esquerra Republicana de
Catalunya (ERC), proclamó República catalana dentro de
una “Federación de Pueblos Ibéricos”. El gobierno
provisional reconoció el nuevo gobierno autónomo
catalán, a la espera de la futura constitución republicana.
82. En el ámbito agrario el Decreto de Laboreo Forzoso
obligaba a los propietarios a tener cultivadas las tierras, y
el Decreto de Términos Municipales obligaba a los
propietarios a contratar a los desempleados del
municipio. Además, se aprobó para el ámbito rural el
seguro de accidentes de trabajo y la jornada laboral
diaria de ocho horas.
83. En materia educativa se proyectó la construcción de
7.000 nuevas escuelas para el curso siguiente, se
estableció el principio de la coeducación y la no
obligatoriedad de la enseñanza de la religión en las
escuelas.
84. En el ámbito militar se obligó a los militares a jurar
fidelidad a la república, pero permitía el retiro voluntario
de generales y oficiales. Unos 84 generales y 8.650
oficiales de un total de 21.000 se acogieron a esta
medida. Además, el gobierno provisional creó un nuevo
cuerpo de policía armada, la Guardia de Asalto.
85. Los primeros problemas de la Segunda República
fueron las huelgas y enfrentamientos con las fuerzas del
orden público, así como el enfrentamiento con los
sectores más reaccionarios de la Iglesia encabezados
por el cardenal Segura, que degeneró en quema de
iglesias y conventos.
86. 3.2 La Constitución de 1931.
El Gobierno Provisional convocó Cortes Constituyentes,
bajo una nueva ley electoral que acaba con el caciquismo y
confirmaba el sufragio universal masculino. Las elecciones
se celebraron el 28 de junio y dieron el triunfo a la
coalición republicano-socialista. La derecha afrontó las
elecciones desorganizada, por lo que quedaron reducidos
a minorías.
87. El 9 de diciembre de 1931 las Cortes aprobaron una
nueva Constitución, que no fue un texto de consenso
con los sectores más conservadores, sino un texto de
carácter democrático y progresista. Definía a España
como una república democrática de trabajadores de
toda clase.
88. España se definió como Estado integral, admitiendo
autonomías pero no una federación de regiones
autónomas. Para que un estatuto de autonomía se
aprobase tenía que ser elaborado por la mayoría de los
ayuntamientos y que lo votasen dos tercios de los
electores. La aprobación definitiva de los estatutos de
autonomía correspondía a las Cortes nacionales.
89. Se estableció la separación de poderes. El presidente
de la República, Jefe del Estado, era elegido a través de
las Cortes por seis años. Tenía capacidad de veto, pero
si en la segunda votación una ley era aprobada por dos
tercios de la cámara, no se podía vetar de nuevo. Podía
disolver las Cortes dos veces, pero si las terceras Cortes
consideraban que no hubo razones para adelantar las
elecciones se le podía retirar del cargo.
90. El jefe del Gobierno, nombrado por el presidente de la
República era responsable ante las Cortes, que podían
retirarle su confianza en cualquier momento. Ejercía el
poder ejecutivo junto con el Consejo de Ministros.
91. Las Cortes tenían el poder legislativo y de control del
ejecutivo. Constaban de una sola Cámara, elegida por
sufragio universal directo y secreto, también por primera
vez en España para las mujeres, tras un duro debate en
el que Clara Campoamor defendió el voto femenino.
92. El poder judicial se confiaba a unos jueces
independientes. Se creó el Tribunal de Garantías
Constitucionales.
93. En materia religiosa, el Estado se
declaró laico. Los artículos 26 y 27
establecían la separación de la Iglesia
y el Estado, suprimían la retribución al
clero y la enseñanza religiosa, y
posibilitaban la disolución de aquellas
Órdenes que, como la Compañía de
Jesús, exigían obediencia a los
Estados Pontificios. Se prohibió a la
Iglesia el comercio, la industria y la
enseñanza y se reconoció la libertad
de conciencia y religión.
94. La gran novedad de esta constitución fue la incorporación
de amplios derechos, entre los que se encontraban
novedosos derechos sociales y económicos. Así, se
reconocía la facultad del gobierno para expropiar bienes
de utilidad social.
95. 3.3 El Bienio Reformista (1931-1933).
Política de reformas y
realizaciones culturales.
Tras aprobarse la Constitución, las Cortes Constituyentes
se convirtieron en legislativas y eligieron presidente de la
República a Niceto Alcalá Zamora, siendo designado
Manuel Azaña presidente de gobierno. El nuevo
gobierno contó con el apoyo de todos los partidos del
Gobierno Provisional, excepto de los radicales.
96. El gobierno formado por republicanos de izquierda y
socialistas continuó el programa de reformas del
Gobierno Provisional. Respecto a la cuestión territorial en
1932 las Cortes aprobaron el Estatuto catalán de Nuria
que restablecía un gobierno autónomo propio (la
Generalitat), además de amplias competencias políticas,
siendo su principal límite la reducida autofinanciación.
Despertó recelos en los medios militares respecto a la
unidad de España.
97. En el País Vasco, el Estatuto de
Estella, promovido por el PNV y
los carlistas, fue declarado
inconstitucional por el gobierno
central al establecer privilegios
para los católicos. Un nuevo
estatuto contó con el rechazo de
los navarros y el escaso apoyo
de la población de Álava, siendo
paralizado por las Cortes de
mayoría de centro-derecha
salidas tras las elecciones de
1933. Finalmente fue aprobado
por las Cortes republicanas en
octubre de 1936, tras el estallido
de la Guerra Civil.
98. En Galicia, el Partido Galleguista consiguió presentar un
proyecto de estatuto que fue aprobado por la población
gallega en junio de 1936, pero ante el triunfo en Galicia
de la sublevación militar de julio de 1936, no llegó a
aprobarse en las Cortes.
99. Respecto a las reformas sociales y laborales, la Ley de
Contratos de Trabajo reguló los convenios colectivos y la
Ley de Jurados Mixtos creó jurados de obreros y
patronos para buscar acuerdos sobre condiciones
laborales. Se promovieron seguros sociales y se
establecieron las vacaciones pagadas, a pesar del
rechazo de las organizaciones patronales.
100. En el ámbito educativo y cultural se promovió una
educación laica, mixta, pública, obligatoria y gratuita. Se
eliminó la enseñanza religiosa y los colegios religiosos,
construyéndose 13.000 nuevas escuelas y aumentando
en 15.000 el número de maestros. Se duplicaron los
institutos y se crearon las Misiones Pedagógicas para
extender la cultura en las áreas rurales. También destacó
la compañía de teatro itinerante “La Barraca”.
101. El poder de la religión católica en España se vio
limitado por la Ley de Divorcio de 1932 y por la Ley de
Confesiones y Congregaciones Religiosas por la que el
Estado dejaba de financiar a la Iglesia y cerraba los
centros docentes religiosos.
102. La reforma agraria fue la más ambiciosa, al intentar
resolver las desigualdades en el medio rural. En 1932 se
aprobó la Ley de Bases de la Reforma Agraria, que
pretendía redistribuir las tierras mediante asentamiento
de campesinos en tierras expropiadas (antiguos
señoríos, tierras mal cultivadas,...). A pesar de la
oposición de los terratenientes se creó el Instituto de
Reforma Agraria (IRA), que se encargó de la
expropiación de las tierras previa indemnización.
103. Ante la escasez de fondos
económicos, se asentó a
menos familias de las
previstas, lo cual provocó las
protestas de los campesinos y
las ocupaciones de tierras,
protagonizadas por la
socialista Federación
Española de Trabajadores de
la Tierra (FETT).
104. La labor reformista del gobierno republicano-socialista se
enfrentó con el desarrollo de la derecha. José Calvo
Sotelo dirigió el grupo monárquico alfonsino Renovación
Española, que junto con la Comunión Tradicionalista
carlista, promovió el golpe de Estado del general José
Sanjurjo en agosto de 1932 en Sevilla. Este golpe fue
detenido y José Sanjurjo fue condenado a cadena
perpetua.
105. La derecha católica buscó el
triunfo electoral para cambiar
de raíz la República. En
febrero de 1933 se fundó la
Confederación Española de
Derechas Autónomas
(CEDA), encabezada por
José María Gil Robles, bajo
el lema “religión, patria,
familia, propiedad y orden”.
106. Además aparecieron partidos de inspiración fascista: las
Juntas Ofensivas Nacional Sindicalistas (JONS), creadas
en 1931 a partir de los grupos liderados por Onésimo
Redondo y Ramiro Ledesma, y la Falange Española
fundada por José Antonio Primo de Rivera, hijo del
dictador, en octubre de 1933. En 1934 ambos grupos se
unirían dando lugar a Falange Española de las JONS.
107. Por su parte, los anarquistas promovieron
insurrecciones. La FAI impulsó a la CNT a desarrollar
tentativas revolucionarias como en enero de 1932 en el
Alto Llobregat o en enero de 1933 en Andalucía. En este
caso, en la localidad de Casas Viejas (Cádiz) un
alzamiento anarquista terminó con más de veinticinco
campesinos asesinados por las fuerzas del orden.
108. Los sucesos de Casas Viejas supusieron el final del
gobierno de Manuel Azaña. Los socialistas comenzaron
a rechazar al gobierno y le retiraron el apoyo
parlamentario por lo que Manuel Azaña dimitió. El
Presidente de la República, Niceto Alcalá Zamora
disolvió las Cortes y convocó elecciones para noviembre
de 1933.
109. 4. La Segunda República:
el bienio radical-cedista (1933-1936)
y el Frente Popular.
110. 4.1 Primera etapa del
bienio radical-cedista (1933-1934).
En las elecciones de noviembre de 1933 obtuvieron la
mayoría los partidos de centro – derecha, encabezados
por la CEDA de José María Gil Robles (115 diputados) y el
Partido Radical de Alejandro Lerroux (102 diputados).
Socialistas y republicanos de izquierda desunidos,
sufrieron un gran descalabro.
111. El presidente de la República, Niceto Alcalá Zamora
encomendó el gobierno a Alejandro Lerroux, que contó
con el apoyo parlamentario de la CEDA. El gobierno de
Lerroux desarrolló una política contraria a la del Bienio
reformista: la Ley de Amnistía que favoreció a los
militares golpistas de 1932 y el Estado volvió a asumir el
gasto eclesiástico. Ante estas medidas se produjo una
división dentro del Partido Radical, fundando Diego
Martínez Barrios la Unión Republicana.
112. Además, se bloquearon los
nuevos estatutos de
autonomía que estaban en
tramitación y surgió un
conflicto de competencias
con la Generalitat a raíz de
Ley de Contratos de Cultivo.
Por su parte, los propietarios
agrarios empezaron a
incumplir las
reglamentaciones laborales
del bienio reformista, ante lo
cual los campesinos
organizaron una huelga
general en junio de 1934.
113. 4.2 La revolución de 1934.
El 4 de octubre de 1934 Alejandro Lerroux formó gobierno
incorporando a tres ministros de la CEDA, lo que fue
tomado por el PSOE y ERC como el triunfo de la derecha
radical, desencadenando la insurrección que venía
preparándose desde la victoria electoral de las derechas.
114. El 5 de octubre la UGT convocó una huelga general
revolucionaria. La insurrección se extendió el 6 de
octubre, pero no tuvo gran respaldo en la mayor parte de
España pues en general la CNT no se sumó y además el
ejército y la Guardia Civil reprimieron a los huelguistas.
115. En Cataluña la huelga tuvo un carácter político
independentista. El 6 de octubre Lluis Companys
proclamó el Estat Catalá dentro de la República Federal
Española, e invitó a luchar contra el gobierno central
considerado “fascista”. Sin embargo, el ejército acabó
con la insurrección, se encarceló al gobierno catalán y se
suspendió la autonomía catalana.
116. Sin embrago, la insurrección contra el gobierno triunfó en
Asturias. Allí socialistas, anarquistas y comunistas
crearon la Alianza Obrera y proclamaron la Revolución
Socialista de los Consejos Obreros. Para sofocar la
insurrección el gobierno envió a la Legión y a los
Regulares bajo el mando del general Francisco Franco.
117. El 18 de octubre la revolución de Asturias quedó
totalmente controlada. Hubo unos 2.000 muertos, 30.000
encarcelados y fueron muchas las sentencias de pena
de muerte (aunque finalmente no fueron ejecutadas).
118. 4.3 Segunda etapa del
bienio radical – cedista (1934-1936).
La revolución de octubre de 1934
motivó un endurecimiento de la
política del gobierno, en el que
fueron entrando más miembros de
la CEDA. Se suspendió el Estatuto
de Cataluña, se anularon los
jurados mixtos y se aprobó una
nueva Ley de Reforma Agraria,
que detuvo el proceso de reparto
de tierras.
119. En el campo militar, el gobierno llevó a cabo una serie de
cambios en los mandos militares, siendo ocupados por
militares poco o nada partidarios de la república, como el
general Francisco Franco, nombrado jefe del Estado
Mayor, y el general Emilio Mola, nombrado jefe del
ejército de Marruecos.
120. En octubre de 1935, el escándalo del estraperlo
(provocado por los extranjeros Straus y Perlo que
sobornaron al gobierno para instalar en el Casino de San
Sebastián un sistema de juego trucado) supuso la crisis
definitiva del gobierno, ya que se rompió el acuerdo
radical-cedista y Alejandro Lerroux dimitió como
presidente del gobierno.
121. Ante esta situación, el presidente de la República, Niceto
Alcalá Zamora, se negó a nombrar presidente de
gobierno al líder de la CEDA, por lo que disolvió las
Cortes y convocó elecciones para febrero de 1936.
122. 4.4 Las elecciones de 1936 y
el Frente Popular.
En las elecciones del 16 de febrero de 1936 los partidos
de izquierda y nacionalistas se agruparon en el Frente
Popular con el fin de lograr la amnistía o liberación de
los presos políticos de izquierdas detenidos tras la
revolución de 1934. Además, los partidos comunistas
estaban impulsando Frentes Populares para evitar el
ascenso de los partidos fascistas.
123. El Frente Popular lo formaron Izquierda Republicana
(Manuel Azaña), Unión Republicana (Diego Martínez
Barrio), ERC (Lluis Companys), PSOE (Largo Caballero e
Indalecio Prieto), PCE (Dolores Ibarruri), Partido
Sindicalista (Ángel Pestaña) y POUM (Andreu Nin). Los
anarquistas no pidieron la abstención.
124. La derecha también se presentó unida en numerosas
circunscripciones. La CEDA hizo campaña presentando
al Frente Popular como el fin de la Segunda República.
Los resultados electorales dieron el triunfo en escaños
al Frente Popular (con el 60 % de los diputados), pero la
diferencia de votos era muy ajustada.
125. El primer gobierno del Frente Popular, presidido por
Manuel Azaña, estuvo formado por Izquierda
Republicana y Unión Republicana. Decretó la amnistía
para los encarcelados tras la Revolución de Octubre de
1934 y restauró el Estatuto de autonomía de Cataluña.
Lluis Companys volvió a ocupara la presidencia de la
Generalitat. Y en Galicia se aprobó en referéndum su
Estatuto y en las Cortes se empezó a discutir el Estatuto
del País Vasco.
126. También se retomó la reforma agraria, aunque ante su
lentitud, se multiplicaron las ocupaciones de tierras
promovidas por la FETT, que el Instituto para la Reforma
Agraria legalizó.
127. Las Cortes destituyeron al presidente de la República,
Niceto Alcalá Zamora, y el 10 de mayo de 1936 fue
elegido Manuel Azaña como nuevo presidente de la
República. Este intentó nombrar un gobierno en el que
participaran los socialistas, pero estos se negaron, por lo
que el nuevo gobierno fue presidido por el republicano
gallego Santiago Casares Quiroga.
128. Durante la primavera de 1936 aumentaron los
enfrentamientos violentos callejeros entre la izquierda
y la derecha. Desde febrero hasta julio de 1936 se
produjeron 262 muertos, 148 de izquierdas y 50 de
derechas, además de miembros de las fuerzas del orden.
En esta espiral violenta destacó el partido fascista
español Falange Española de las JONS, que llegó a ser
ilegalizado, y las milicias obreras armadas que crearon el
PSOE, el PCE y la CNT.
129. En el ámbito militar, desde el triunfo del Frente Popular
en febrero de 1936, varios generales agrupados en la
Unión Militar Española, prepararon bajo la dirección de
Emilio Mola un golpe de Estado contra el gobierno.
Para prevenir esta posibilidad el Gobierno alejó a los
generales sospechosos: Emilio Mola fue enviado a
Pamplona, Francisco Franco a Canarias, y Manuel
Goded a Baleares.
130. El golpe de Estado basado en una sublevación militar
simultánea de las guarniciones de todo el país,
acompañada de una violenta represión hacia las
organizaciones obreras y republicanas, se fijó para
mediados de julio. Pero el 12 de julio el teniente de la
Guardia de Asalto José del Castillo fue asesinado y en
respuesta sus compañeros asesinaron el 13 de julio a
José Calvo Sotelo, el líder del partido de derechas
Bloque Nacional (heredero de Renovación Española).
131. La muerte del líder de la derecha aceleró la intervención
militar, y el 17 de julio las tropas de la Comandancia de
Melilla se sublevaron contra el Gobierno.
132. 5. La guerra civil: la sublevación
militar y el estallido de la guerra.
El desarrollo del conflicto:
etapas y evolución de las dos zonas.
133. 5.1 La sublevación militar y
el estallido de la guerra.
Tras la victoria del Frente Popular los militares contrarios al
gobierno prepararon un golpe de Estado que debía ser
encabezado por el general Sanjurjo, que murió en un
accidente aéreo en Portugal (20 julio).
134. El coordinador de toda la
trama conspiradora era,
desde Pamplona, el general
Emilio Mola, que contaba
con el apoyo de parte del
Ejército y de los grupos
políticos antirrepublicanos
(monárquicos, carlistas y
falangistas). El golpe debía
ejecutarse con gran rapidez
y violencia para evitar
cualquier resistencia.
135. El golpe de Estado estaba fijado para el 18 de julio, pero
la tensión creada por los asesinatos del teniente José del
Castillo, militante del PSOE, y de José Calvo Sotelo,
diputado del Bloque Nacional, provocó que los
conspiradores de Melilla se alzaran el 17 de julio.
136. A lo largo del día 18 de julio, los sublevados se alzaron
con éxito en Marruecos, Canarias, Baleares y gran parte
de la Península (Navarra, Álava, Castilla-León, Galicia, la
mitad de Aragón y en Andalucía Cádiz, Sevilla, Córdoba
y Granada). Pero la acción conjunta de militares,
guardias civiles y guardias de asalto leales al Gobierno y
de las organizaciones obreras UGT y CNT consiguió
sofocar la rebelión en Madrid y Barcelona, haciendo
fracasar el golpe de Estado.
137. Los sublevados no se rindieron y organizaron una guerra
para conquistar Madrid, dando comienzo entonces la
Guerra Civil, al dividirse España en dos zonas.
138. La zona fiel al gobierno de la Segunda República
englobaba las zonas industriales y mineras, además de
los recursos financieros del Banco de España.
Militarmente, la República contaba con al apoyo de la
Marina, la Aviación y la Guardia de Asalto; además armó
a las organizaciones obreras y campesinas (milicianos) y
las agrupó con los militares leales.
139. La zona que quedó bajo el control de los sublevados, el
autodenominado “bando nacional”, dominaba las
principales zonas agrarias. Militarmente, contaban con
las experimentadas tropas africanas (la Legión y los
Regulares), la mayoría de los oficiales y gran parte de la
Guardia Civil, así como numerosos voluntarios de las
milicias organizadas por el partido carlista (los requetés)
y el falangista.
140. 5.2 El desarrollo de la guerra:
etapas y evolución de las dos zonas.
Durante la primera etapa (julio de 1936 – marzo 1937) los
sublevados intentaron tomar Madrid. Primero las tropas
dirigidas por el general Mola avanzaron desde Navarra
hacia Madrid, pero fueron detenidas por los milicianos en la
Sierra de Guadarrama.
141. Por su parte, Franco aerotransportó, con ayuda
alemana, el ejército de África hasta Sevilla y, desde allí,
tomó Badajoz y Toledo (donde liberó el Alcázar),
retrasando su llegada a Madrid, donde la Junta de
Defensa presidida por el general José Miaja organizó la
defensa de la capital con ayuda de anarquistas, Brigadas
Internacionales y tanques soviéticos.
142. Ante el fracaso de tomar Madrid desde la Casa de
Campo, los sublevados intentaron dos maniobras
envolventes para tomar Madrid en febrero y en marzo
de 1937 (Batallas del Jarama y de Guadalajara), pero
fracasaron.
143. En la segunda etapa (abril – octubre 1937) se desarrolló
la Campaña del norte. Los sublevados, dirigidos por
Franco, conquistaron los territorios del norte
aprovechando el aislamiento del resto de las regiones
republicanas, la ayuda de las tropas italianas y el apoyo
de la aviación alemana.
144. En junio de 1937 los sublevados tomaron el País Vasco,
cayendo muerto en accidente de aviación el general
Mola. Para evitar la toma de Santander, el Jefe de
Estado Mayor republicano, Vicente Rojo, ordenó una
ofensiva sobre Brunete, que fracasó. Para salvar a
Asturias, el gobierno de la República provocó la batalla
de Belchite en Aragón, pese a la cual Asturias cayó en
octubre de 1937, por lo que la República perdía los los
territorios del norte, ricos en minería e industria.
145. La tercera etapa (octubre 1937 – noviembre 1938)
estuvo protagonizada por la batalla del Ebro. La etapa se
inició con la ofensiva republicana del general Rojo sobre
Teruel, que sólo fue recuperada durante dos meses.
Después los sublevados iniciaron la campaña del
Mediterráneo, que buscaba dividir en dos a la República
aislando Cataluña del resto de territorios.
146. Una vez aislada Cataluña por los sublevados, el general
Rojo emprendió la batalla del Ebro, con la intención de
frenar el avance de Franco. Fue la batalla más dura y
larga de la guerra, acabando tras cuatro meses de
combate con la derrota republicana, unida a la pérdida de
gran cantidad de hombres y material.
147. La cuarta y última etapa (diciembre 1938 – abril 1939)
supuso el fin de la guerra. En enero de 1939 Franco
inició la ofensiva sobre Cataluña. Barcelona cayó el 26
de enero y poco después fue ocupada Gerona,
alcanzando las tropas sublevadas la frontera francesa, lo
que provocó el éxodo de miles de republicanos hacia
Francia, entre ellos Manuel Azaña, que dimitió como
presidente de la República.
148. Juan Negrín, jefe del Gobierno republicano, decidió
continuar la lucha desde Elda (Alicante) y Madrid
apoyado por los comunistas, con la intención de unir la
guerra española con una esperada pronta guerra
europea entre democracias y fascismo.
149. Sin embargo, tras el reconocimiento por Francia y Reino
Unido del gobierno sublevado como gobierno legítimo de
España en febrero de 1939, la Junta de Defensa de
Madrid que presidía el general Segismundo Casado,
apoyada por socialistas, republicanos y anarquistas, dio
un golpe de Estado contra el gobierno republicano e
intentó negociar con Franco una rendición con
condiciones.
150. Franco exigió una rendición sin condiciones y, aunque la
República controlaba todavía un territorio considerable,
su descomposición interna provocó que el 1 de abril de
1939 finalizara la guerra con la entrada del ejército de
Franco en Madrid.