El arte gótico se extendió en Europa occidental entre los siglos XII y XVI. Se caracterizó por el uso del arco apuntado y la bóveda de crucería, que permitieron grandes catedrales con espacios diáfanos y luminosos. Los principales ejemplos son las catedrales francesas de Chartres y Notre Dame. La escultura gótica buscó un mayor realismo humano, mientras que la pintura se desarrolló en diferentes escuelas como la italiana de Giotto y la flamenca de van Eyck, conocida por