1. 19 de diciembre de 2013
Carta a la Comunidad de la Universidad de Chile, a su Rector, Senado Universitario,
Fech, Fenafuch, Acauch y Coordinadora por la Recuperación del Jota:
Junto con saludar a toda la comunidad universitaria, les escribo como diputada electa por el
distrito 19 y además matrona de profesión, para manifestar mi preocupación por el presente y
futuro del Hospital Clínico de la Universidad de Chile.
Estoy convencida de que para lograr mejorar las condiciones de vida de la gente y avanzar
hacia la equidad, debemos fortalecer prioritariamente la salud pública, y particularmente la red de
la zona norte y por tanto también al Jota, que históricamente ha jugado un rol protagónico en la
provisión de un servicio de salud altamente avanzado, en la investigación biomédica de frontera, y
principalmente en la formación de miles de profesionales de la salud altamente calificados.
Confío también en que estamos iniciando un nuevo ciclo político en Chile, en el cual la salud,
junto a la educación, deben ser temas fundamentales de la agenda pública, tal como lo demanda la
mayoría del país. De esta forma, el Estado debe asumir un rol activo y protagónico en la provisión
de estos derechos sociales que aseguren calidad y acceso para todos.
En este sentido, se deben buscar soluciones de mediano y largo plazo para el problema de
financiamiento del Hospital Clínico, que aseguren, junto con su sostenibilidad económica, el
cumplimiento del rol público para el cual fuera creado, atendiendo las necesidades de salud de la
población de la zona norte y la formación de profesionales comprometidos con la excelencia y el
servicio social.
No me parece coherente con esos objetivos, que la principal universidad del Estado
arriesgue la propiedad del Hospital frente a la banca privada, menos en un momento de la coyuntura
nacional, en los que esas señales pueden ser percibidas como contrarias a los procesos políticos de
cambio del país. Las soluciones para problemas del sector público, dentro de las lógicas del mercado
y el autofinanciamiento ya han mostrado ser contraproducentes para la viabilidad del Jota, y lo han
llevado a reducir significativamente su quehacer, siendo la principal causa del endeudamiento que
hoy aqueja al Hospital y a toda la Universidad.
Por lo anterior, quiero manifestarles a todos los miembros de la comunidad universitaria y
sus organizaciones, mi disposición al trabajo conjunto para fortalecer el rol de la Universidad de
Chile en las políticas educativas y de salud del país, y a que podamos realizar un proyecto a mediano
y largo plazo que implique la búsqueda de un incremento significativo del financiamiento estatal
para la Chile y su hospital, que permita la reincorporación del Jota a la red pública y el
fortalecimiento de su rol dentro de la sociedad, aliviando a los habitantes de la zona norte de sus
problemas de salud, y se transforme en un espacio donde efectivamente se fomente la investigación
biomédica, los estudiantes puedan recibir la mejor formación, y se ofrezca a los más necesitados el
servicio de calidad que se merecen.
Los saluda atentamente,
Karol Cariola
Diputada electa Recoleta-Independencia