La gerencia social es una estrategia basada en criterios de equidad, eficacia, eficiencia y sostenibilidad que orienta la toma de decisiones y acciones para lograr resultados sociales. Más allá de la rentabilidad económica, busca generar valor público y una distribución equitativa de conocimiento e ingresos. Implica un conjunto de prácticas y competencias aplicadas por el Estado para gestionar políticas sociales de manera reflexiva e interdisciplinaria.