1. La tarea como docentes: transformar su práctica
La instrucción educativa en sus diversos niveles en nuestro país ha sido
atendida tradicionalmente por docentes que carecen de sensibilidad y planeación
en su quehacer educativo, es por ello que se continua con la vieja práctica de una
docencia tradicional, no sugiere nuevas actitudes ante el conocimiento y para los
estudiantes entonces provoca apatía y poco interés aunada la deserción, bajo
rendimiento y hasta frustración en nuestros muchachos.
Existe la necesidad de un cambio en la mentalidad del maestro para que pueda
permear en ellos renovando nuestros métodos a través de una debida planeación
que sirva de guía o instrumento esencial en el proceso de enseñanza aprendizaje
en el aula, a través de esta el maestro promoverá en los alumnos la movilización
de saberes y logros de los aprendizajes esperados en que estarán las bases para
el aprendizaje autónomo y permanente.
La planeación debe fundamentarse en los programas de estudio pero también en
los intereses y necesidades de los alumnos, características del contexto y los
recursos con los que se cuenta, estará sujeta a modificaciones y rectificaciones
que se vayan presentando sobre la marcha.
La tarea como docentes es justamente transformar esa vieja práctica, pese a que
nuestra realidad como profesores es la carencia de recursos necesarios para
impartir una educación deseable, como desarrollarme y transformarme en un
verdadero agente de cambio en la educación; por la falta de profesionalización o
actualización imposibilita en los educandos conocimientos y experiencias
significativas que le permitirán seguir aprendiendo y reaprendiendo en su
desarrollo escolar y en la vida diaria, nuestros marcos referenciales son frenos
que no dejan avanzar el trabajo docente.
Mi reto será: profesionalizarme y aprender a aprender, compartir nuevas
experiencias que permitan provocar cambios significativos en mi medio de
2. actuación. Ningún reto será imposible si tenemos voluntad y reconocemos la
necesidad de seguir aprendiendo, “Cuanto más conocimiento biológico – social –
cultural e ideológico, mas grande es la parte de autonomía individual y más grande
son las posibilidades de libertad” (Morín, 2000).
Será necesario siempre tener presente las necesidades y la realidad del contexto
escolar, basarnos en datos reales, ser flexibles de manera que puedan hacerse
adaptaciones ante imprevisto e integrar por un lado al grupo en su totalidad en
reconocimiento de la diversidad y por el otro, dar cumplimiento a lineamientos
institucionales.
Mtra. Rosalba Bernal Felipe.