La foca monje es una especie en peligro de extinción que solía habitar las costas del Mediterráneo y el Atlántico noreste pero ahora solo se encuentra en Cabo Blanco y Grecia. Son mamíferos vivíparos cuya reproducción incluye una gestación de 10 meses y amamantamiento de las crías. Su número se ha reducido a solo 630 ejemplares debido a la caza, contaminación y destrucción de su hábitat.