1. Lo que los padres pueden hacer
Consejo para padres y adultos acerca de como lidiar con situaciones de intimidación
Un muchacho grande y fuerte detiene a un muchacho de menor tamaño en el camino a la escuela y lo
amenaza de hacerle daño a menos que él le entregue su tarea. Las chicas populares de la escuela no
permiten que nadie se siente en su mesa durante el almuerzo excepto sus amigas. Estos dos escenarios
de intimidación y otros, suceden más a menudo de lo que los adultos se dan cuenta. Setenta y cuatro
por ciento de los menores entre 8 y 11 años de edad dicen que la intimidación sucede en su escuela.
¿Pero qué es exactamente la intimidación o “bullying”?
“Bullying” significa:
• Pelear, amenazar, poner apodos, molestar, o excluir a alguien repetida y constantemente
• Mostrar diferencia de poderes, tales como tamaño o popularidad
• Daño físico, social y emocional
• Herir a la otra persona para obtener algo
Muchos padres no piensan que la intimidación es un problema tan grave como traer un arma a la
escuela o usar drogas, pero sus efectos pueden ser severos y de larga duración. Cada día, cerca de
160,000 estudiantes no vienen a la escuela porque tienen miedo de ser víctimas de la intimidación, de
acuerdo a la Asociación Nacional de Educación la intimidación no solamente afecta negativamente a
sus víctimas, sino que también a quien hace la intimidación.
Los jóvenes afectados tienen la tendencia de:
• No andar bien en la escuela
• Tener baja estima propia
• Sentirse deprimidos
• Mostrar conducta violenta para protegerse o vengarse de quienes le molestan
Los jóvenes que intimidan tienen la tendencia de:
• No andar bien en la escuela
• Fumar o tomar alcohol
• Cometer crímenes en el futuro
Los padres pueden cumplir el papel principal en la prevención de la intimidación y acabar con ella
cuando sucede. Estas son algunas de las cosas que usted puede hacer:
• Enseñe a sus hijos a resolver sus problemas sin usar la violencia y elógielos si así lo hacen.
• Ofrézcales comentarios positivos cuando ellos se comportan bien, para ayudar a fomentar la
estima propia. Ayúdelos a tener confianza en sí mismos y defender lo que crean es justo.
• Pregúnteles como fue su día y escuche lo que dicen acerca de la escuela, eventos sociales,
compañeros, y cualquier problema que pudieran estar teniendo.
• Tome la intimidación como algo muy serio. Muchos menores tienen vergüenza de admitir que
están siendo intimidados. Usted podría tener una única oportunidad para intervenir y ayudar.
2. • Si usted observa una situación de intimidación, deténgala inmediatamente, aún si el que está
intimidando es su propio(a) hijo(a).
• Anime a sus hijos a ayudar a otros que lo necesiten.
• No intimide a sus hijos ni a otros jóvenes en frente de ellos. Mucha veces los jóvenes que son
intimidados en la casa, reaccionan haciendo lo mismo a otros jóvenes. Si sus hijos ven que usted
pega, ridiculiza, o pasa chismes de otros, ellos también lo va a hacer.
• Apoye las campañas de prevención de la intimidación en la escuela de sus hijos. Si su escuela
no tiene una, considere iniciar su propia campaña con otros padres, maestros, y otros adultos
interesados.
Para más información acerca de la intimidación, lea los artículos de abajo y visite la Campaña “Stop
Bullying Now!” de la oficina de Recursos para la Salud y Administración de Servicios.
Cuando su hijo(a) está siendo intimidado(a)
Muchos jóvenes sienten vergüenza de ser intimidados y no le cuentan a sus padres u a otro adulto
enseguida. Si su hijo(a) se acerca a usted y le pide que le ayude porque alguien lo/la está intimidando,
tómelo seriamente. Muchas veces, si no tomamos en serio lo que ellos nos dicen por primera vez, más
adelante no nos van a pedir ayuda por segunda vez.
Aún cuando su hijo(a) no le pida ayuda, usted puede observar estas señales para darse cuenta si el/ella
está siendo intimidado(a). Los jóvenes que están siendo intimidados normalmente experimentan:
• Alejamiento
• Pérdida de amigos
• Bajas calificaciones/notas
• Falta de interés en actividades que antes disfrutaba
• Ropa rota
• Magullones/marcas
• Necesidad de dinero extra o útiles escolares
Si usted cree que su hijo(a) está siendo intimidado(a) o si el/ella le dijo que alguien lo/la está
intimidando, usted puede ayudar. Los padres regularmente son el mejor recurso para construir la
confianza propia del menor y para enseñarles como resolver los problemas de la mejor manera posible.
Estas son algunas maneras que podrían ayudar:
• Hable de ello con el/la maestro(a) de su hijo(a) o el consejero escolar en vez de enfrentarse a
los padres del menor que molesta a su hijo(a). Si el/la maestro(a) no hace nada para cambiar la
situación, hable con el/la director(a).
• Enséñeles maneras no violentas para lidiar con aquellos que intimidan, como por ejemplo,
retirarse de la vista del otro, jugando con amigos, o hablando del tema.
• Ayude a sus hijos a actuar con confianza de sí mismos. Junto con ellos, practique caminar con
la frente alta, mirando a la gente a los ojos, y hablando claramente.
• No los anime a pelear. Esto los llevará a salir lastimados, caer en problemas, y crear problemas
aún más grandes con el individuo que los está intimidando.
• Involucre a sus hijos en actividades fuera de la escuela. De esta manera, ellos pueden hacer
amigos en un círculo social diferente.
3. Algunos jóvenes parecen ser intimidados constantemente, mientras que otros casi nunca han sido
molestados. ¿Por qué algunos jóvenes parecen atraer a todo individuo que molesta? Los menores
quienes son frecuentemente intimidados se caracterizan por:
• Ser diferentes a otros menores, ya sea por el tamaño, raza, sexualidad, o por tener intereses
distintos
• Parecen frágiles, ya sea física o emocionalmente
• Son inseguros
• Desean ser aceptados en sociedad/pertenecer
• No se animan a reportar a quien los molesta
Cuando su hijo(a) es quien intimida a otros
Es difícil para los padres aceptar que su propio hijo(a) es quien intimida, a veces pasa. Pero el hecho de
que su hijo intimida a otros, no quiere decir que él/ella va a hacerlo para siempre. Los padres son
generalmente uno de los mejores recursos para que sus hijos dejen de intimidar a otros y empiecen a
interactuar positivamente con sus compañeros.
Su hijo(a) puede intimidar a otros si:
• No siente compasión por el prójimo y no simpatiza con otros
• Valora la agresión
• Le gusta ser la persona a cargo
• Es un(a) ganador(a) arrogante y un mal(a) perdedor(a)
• Pelea seguido con sus hermanos
• Es impulsivo(a)
¿Qué puede hacer usted para hacer que su hijo(a) deje de intimidar a otros?
• Tómelo seriamente. No interprete la intimidación como una etapa pasajera. Aún cuando a
usted no le preocupe que esto le afecte a su hijo(a) demasiado, piense que hay otro menor del otro
lado quien está siendo lastimado.
• Hable con su hijo(a) para saber por qué el/ella intimida a otros. Usualmente, los menores
intimidan a otros cuando se sienten tristes, enojados, solos, o inseguros; y muchas veces los
cambios grandes en el hogar o la escuela pueden provocar estos sentimientos.
• Ayúdele a sentir compasión (empatía) por otros y háblele acerca de cómo se siente cuando una
persona está siendo intimidada.
• Pregunte a los maestros o al consejero escolar si su hijo(a) está teniendo algún problema en la
escuela, por ejemplo si tiene problemas con una materia en particular o si tiene dificultades en
hacer amigos. Pida consejo acerca de cómo usted y su hijo(a) pueden procesar este problema.
• Pregúntese a usted mismo(a) si alguien en su casa está intimidando a su hijo(a). Usualmente,
los menores que intimidan a otros, lo hacen porque ellos mismos están siendo intimidados ya sea
por uno de los padres, un miembro de la familia, u otro adulto.
http://www.ncpc.org/topics/bullying/what-parents-can-do
4. Qué hacer si su hijo(a) está siendo intimidado(a)
1. Primero, concéntrese en su hijo(a). Apóyelo(a) y consiga información acerca del asunto.
• Nunca le diga a su hijo(a) que ignore que está siendo intimidado(a). Lo que su hijo(a)
podría “entender” es que usted va a ignorar el asunto. Si su hijo(a) fuese capaz de
simplemente ignorar el tema, seguramente él/ella no le hubiera contado al respecto.
Normalmente, tratar de ignorar la intimidación hace que la situación se haga más seria.
• No culpe a su hijo(a) por ser intimidado(a). No asuma que él/ella hizo algo para
provocar que lo/la intimiden. No diga: “-¿Qué hiciste para irritar a la otra persona?-”
• Escuche con atención a lo que su hijo(a) le cuenta al respecto. Pídale que describa a
quienes estuvieron involucrados y cómo y cuándo pasaron los hechos.
• Entérese tanto como pueda acerca de las tácticas usadas para intimidar, y cuándo y
dónde sucedió el hecho. ¿Puede su hijo(a) nombrar a otros jóvenes o adultos que
pudieran haber sido testigos de la intimidación?
• Tenga compasión de su hijo(a). Dígale que la intimidación es algo malo, que no es su
culpa, y que le complace saber que él/ella tuvo el valor de contarle al respecto.
Pregúntele que le parece que podría hacerse para cambiar la situación. Déle la seguridad
de que usted va a pensar acerca de lo que se necesita hacer y que le va a contar lo que
usted va a hacer.
• Si usted no está de acuerdo con la forma en que su hijo(a) manejó la situación, no lo/la
critique.
• No lo/la incite a vengarse físicamente (“Pégale tú también”) como solución. Pegarle al
otro estudiante no va a solucionar el problema, y su hijo(a) podría ser suspendido(a),
expulsado(a) o la situación podría empeorar.
• Controle sus emociones. El instinto de proteger de los padres puede provocar
emociones fuertes. Aunque es difícil, lo mejor es que los padres piensen dos veces acerca
de cuáles serán los pasos a seguir.
2. Comuníquese con los maestros o director(a) de su hijo(a)
• Normalmente los padres reportan los actos de intimidación a las autoridades de la
escuela a regañadientes, pero estos actos no van a acabarse sin la ayuda de los adultos.
• Mantenga sus emociones bajo control, Diga sólo la información de los hechos que
experimentó su hijo(a) cuando fue intimidado(a), es decir, quién, qué, cuándo, dónde y
cómo.
• Enfatice que usted quiere trabajar con el personal de la escuela para encontrar una
solución para parar intimidación, por el bien de su hijo(a) y de otros estudiantes.
5. • No se comunique con los padres del/los estudiante(s) que molestaron a su hijo(a). Éste
es usualmente el primer impulso de los padres, pero a veces solo complica más la
situación. Las autoridades de la escuela son quienes deben comunicarse con los padres
del/los individuos que cometieron la intimidación.
• Espere a que la intimidación pare. Hable regularmente con su hijo(a) y con el personal
de la escuela para saber si la situación ha cesado. Si la intimidación persiste,
comuníquese con las autoridades de la escuela nuevamente.
3. Ayude a su hijo(a) sea más resistente a la intimidación.
• Ayude a desarrollar talentos o los atributos positivos su hijo(a). Sugiera y facilite
actividades musicales, deportivas y de arte. De esta manera usted podría ayudar a que
él/ella tenga más confianza en sí mismo(a) cuando está entre sus amigos.
• Anímelo(a) a hacer contacto con otros estudiantes amigables de su clase. El/la
maestro(a) de su hijo(a) podría sugerir estudiantes con quien su hijo(a) pueda hacer
amistad, pasar tiempo, o trabajar en equipo.
• Ayúdele a hacer nuevos amigos fuera del ambiente de la escuela. Un nuevo ambiente
puede proporcionar “un comienzo nuevo” para un joven quien ha sido intimidado(a)
repetidamente.
• Enseñe a su hijo(a) estrategias de seguridad. Enséñele a buscar ayuda de un adulto
cuando él/ella se siente amenazado(a) por un “una situación de intimidación”. Hablen
acerca de a quién recurrir por ayuda y dele ejemplos de lo que él/ella debería decir.
Asegúrele que reportar la burla/intimidación no es lo mismo que pasar chismes.
• Pregúntese a usted mismo(a) si su hijo(a) está siendo molestado(a) por tener una
dificultad de aprendizaje o por no tener habilidad para socializarse. Si su hijo(a) es
hiperactivo(a), impulsivo(a), o demasiado hablador(a), el individuo que lo/la intimida
podría estar reaccionando porque esto le molesta. Esto no es razón para intimidar, pero
ayudaría a explicarle por qué su hijo(a) está siendo intimidado(a). Si su hijo(a) irrita
fácilmente a otras personas, busque ayuda de un consejero para que él/ella pueda
aprender mejor las reglas informales de socialización dentro del grupo de compañeros.
• El hogar es donde se forman los sentimientos. Asegúrese de que su hijo(a) tenga un
hogar en donde se lo /la estime, en donde él/ella encuentre refugio emocional y
psicológico. Siempre mantenga el diálogo abierto con su hijo(a).