2. Biografía:
John Dewey fue el filósofo norteamericano más
importante de la primera mitad del siglo XX.
John Dewey nació en Burlington (Vermont) en
1859, hijo de un comerciante
Se graduó en la Universidad de Vermont en 1879 y
después de un breve período como maestro de
escuela en Pennsylvania y en Vermont continuó sus
estudios en el departamento de filosofía de la
universidad John Hopkins, primera institución que
organizó los estudios universitarios basándose en el
modelo alemán.
3. Vivió en Michigan donde trabajaba en el
departamento de Filosofía de la
Universidad. Allí conoció a su
esposa, Alice Chipman, que era una de
sus estudiantes.
Fundó el club de doctores en Michigan.
Se interesó mucho por la escuela pública y
se involucró en un departamento de
pedagogía, creando así una “escuela
experimental”
Durante los 10 años que estuvo en
Chicago, elaboró los principios
fundamentales de su filosofía de la
educación.
4. Pensamiento pedagógico
Su filosofía se basa en el evolucionismo de
Darwin, ya que pensaba que la mente humana es
producto de la evolución biológica
Su teoría del conocimiento se basa en que se oponen
el pensamiento y la acción.
Destaca la “necesidad de comprobar el pensamiento
por medio de la acción”, para conseguir que el
pensamiento sea conocimiento.
5. Dewey es considerado como el
verdadero creador de la Escuela
Activa
proceso activo.
La educación es un
La primera responsabilidad de la
escuela es invitar a la curiosidad
natural y la actividad del niño
El aprendizaje se da a través de
experiencias dentro y fuera del
aula.
6. Influencia en los movimientos pedagógicos
contemporáneos posteriores a su muerte
La filosofía de la educación de Dewey fue objeto de un
fuerte ataque póstumo durante el decenio de 1950 por
parte de los adversarios de la educación progresista, que
le hicieron responsable de prácticamente todos los errores
del sistema de enseñanza pública norteamericano.
Desde el decenio de 1950, variaciones sobre este tema
vuelven a alimentar debates periódicos acerca de la
situación de la educación pública norteamericana, y cada
nueva campaña favorable a una vuelta a los “principios
básicos” va acompañada de los consabidos ataques contra
Dewey.
7. Aunque tal vez haya en cada distrito escolar
norteamericano por lo menos un maestro de
la enseñanza pública que ha leído a Dewey y
que trata de enseñar siguiendo sus
principios, sus críticos han exagerado su
influencia.
La mayoría de las escuelas están lejos de ser
esos “lugares supremamente interesantes” y
esas “peligrosas avanzadillas de una
civilización humanista” que él hubiera
querido que fuesen.
A pesar de todo, la obra de Dewey sigue
siendo una gran fuente inspiradora.
8. VIRGINIA CORDERO
GONZÁLEZ
2º B EDUCACIÓN PRIMARIA
TENDENCIAS
CONTEMPORÁNEAS DE LA
EDUCACIÓN.