El documento enfatiza la importancia de cuidar y proteger la naturaleza. Argumenta que cada persona tiene su propio estilo natural, como una fisonomía, y que aunque el hombre puede cultivar y mejorar su naturaleza, no puede cambiarla. También señala que la tierra no pertenece al hombre, sino que el hombre pertenece a la tierra, y que no se debe dañar la naturaleza ya que produce tristeza que hable mientras el hombre no la escucha.
1. Hay un libro abierto
siempre para todos los
ojos: nuestra naturaleza
Hay que saber cuidarla.
2. Amigos
míos, nuestra
Naturaleza ha dado
a cada hombre un
estilo, como una
fisonomía y un
carácter. El hombre
puede
cultivarla, pulirla,
mejorarla, pero
cambiarla, no.
3. La tierra no es del
hombre, el hombre
es de la tierra.
4. Produce una
inmensa tristeza
pensar que la
naturaleza habla
mientras el género
humano no la
escucha.
5. No se cuida
lo que no se
ama, y no se
ama lo que no
se conoce.
7. Convertid un árbol
en leña y podrá
arder para nosotros;
pero ya no
producirá flores ni
frutos.
8. Nuestra naturaleza no es
una herencia de nuestros
padres, sino un préstamo
de nuestros hijos.
9. "El animal tiene, como
tú, un corazón que siente.
El animal conoce, como
tú, la alegría y el dolor. El
animal tiene, como
tú, sus aspiraciones. El
animal tiene, como tú, un
derecho a la vida"