La disfagia es una alteración de la deglución, que consiste en la preparación oral del bolo y su desplazamiento de la boca al estómago. Puede producirse en la fase oral, faríngea o esofágica. Es importante diagnosticarla porque puede causar aspiración y neumonía, y es frecuente en personas mayores. Se diagnostica mediante historia clínica, exploración y pruebas como el método volumen-viscosidad. El cuestionario EAT-10 sirve para detección precoz y se