2. CANTO DE ENTRADA.
Vienen con alegría, Señor,
cantando vienen con alegría,
Señor, los que caminan por la vida,
Señor, sembrando tu paz y amor.
(Bis)
Vienen trayendo la esperanza a un
mundo cargado de ansiedad; a un
mundo que busca y que no
alcanza caminos de amor y de
amistad.
3. SALUDO.
ACTO PENITENCIAL.
GLORIA.
ORACIÓN COLECTA.
Jesús va señalando las pistas que conducen a la
verdadera felicidad.
No es un conjunto de normas o preceptos, son Evangelio,
anuncio gozoso, el estilo y el espíritu de toda vida cristiana.
4. Lectura de la profecía de Sofonías
2,3; 3, 12-13.
Buscad al Señor, los humildes, que
Cumplís sus mandamientos; buscad
la justicia, buscad la moderación,
quizá podáis ocultaros el día de la ira
del Señor.
«Dejaré en medio de ti un pueblo
pobre y humilde, que confiará en el
nombre del Señor.
5. El resto de Israel
no cometerá
maldades, ni dirá
mentiras, ni se
hallará en su boca
una lengua
embustera;
pastarán y se
tenderán sin
sobresaltos.»
PALABRA DE DIOS
7. El Señor mantiene su fidelidad
perpetuamente, él hace justicia a los
oprimidos, él da pan a los hambrientos. El
Señor liberta a los cautivos.
R/. El Señor es compasivo y
misericordioso.
El Señor abre los ojos al ciego, el Señor
endereza a los que ya se doblan, el Señor
ama a los justos, el Señor guarda a los
peregrinos.
R/. El Señor es compasivo y
misericordioso.
8. Sustenta al huérfano y a la viuda y
trastorna el camino de los malvados. El
Señor reina eternamente, tu Dios, Sión,
de edad en edad.
R/. El Señor es compasivo y
misericordioso.
9. Lectura de la primera carta del apóstol
San Pablo a los Corintios 1, 26-31
Hermanos:
Fijaos en vuestra asamblea, no hay
en ella muchos sabios en lo humano,
ni muchos poderosos, ni muchos
aristócratas; todo lo contrario, lo
necio del mundo lo ha escogido Dios
para humillar a los sabios, y lo débil
del mundo lo ha escogido Dios para
humillar el poder.
10. Aún más, ha escogido la gente baja
del mundo, lo despreciable, lo que no
cuenta para anular a lo que cuenta, de
modo que nadie pueda gloriarse en
presencia del Señor.
Por él vosotros sois en Cristo Jesús,
en este Cristo que Dios ha hecho para
nosotros sabiduría, justicia,
santificación y redención. Y así –como
dice la Escritura- «el que se gloríe, que se
gloríe en el Señor».
PALABRA DE DIOS
11. Aleluya Mt 5: 12a
Estrad alegres y contentos,
porque vuestra recompensa será
grande en el cielo.
12. Lectura del santo Evangelio según
San Mateo 5, 1-12a.
En aquél tiempo, al ver Jesús el
gentío, subió a la montaña, se sentó,
y se acercaron sus discípulos; y él se
puso a hablar, enseñándoles:
«Dichosos los pobres en el espíritu,
porque de ellos es el reino de los
cielos.
13. Dichosos los sufridos, porque ellos
heredarán la tierra.
Dichosos los que lloran, porque ellos
serán consolados.
Dichosos los que tienen hambre y
sed de la justicia, porque ellos
quedarán saciados.
Dichosos los misericordiosos, porque
ellos alcanzarán misericordia.
Dichosos los limpios de corazón,
porque ellos verán a Dios.
14. Dichosos los que trabajan por la paz,
porque ellos se llamarán los Hijos de
Dios.
Dichosos los perseguidos por causa
de la justicia, porque de ellos es el
reino de los cielos.
Dichosos vosotros cuando os insulten y os
persigan y os calumnien de cualquier
modo por mi causa. Estad alegres y
contentos, porque vuestra recompensa
será grande en el cielo. PALABRA DEL SEÑOR
16. CANTO EN EL OFERTORIO.
En este mundo que Cristo que nos
da, hacemos la ofrenda del pan.
El pan de nuestro trabajo sin fin y
el vino de nuestro cantar. Traigo
ante Ti nuestra justa inquietud:
Amar la justicia y la paz.
Saber que vendrás, saber que
estarás, partiendo a los pobres tu
pan. (Bis)
18. CANTO DE COMUNIÓN.
Bienaventurados seremos, Señor,
seremos, Señor.
Seréis bienaventurados los
desprendidos de la tierra; seréis
bienaventurados porque tendréis el
cielo. Seréis bienaventurados los que
tenéis alma sencilla; seréis
bienaventurados: vuestra será la
tierra.
19. Bienaventurados seremos, Señor,
seremos, Señor.
Seréis bienaventurados los que lloráis,
los que sufrís; seréis bienaventurados
porque seréis consolados. Seréis
bienaventurados los que tenéis
hambre de mí; seréis bienaventurados
porque seréis saciados.
Bienaventurados seremos, Señor,
seremos, Señor.
20. Seréis bienaventurados los que tenéis
misericordia; seréis bienaventurados
porque seréis perdonados. Seréis
bienaventurados los que tenéis el
alma limpia; seréis bienaventurados.
Bienaventurados seremos,
Señor, seremos, Señor.
22. ORACIÓN DESPUÉS DE LA
COMUNIÓN.
Gracias, Señor, por venir a
nosotros en esta comunión.
Gracias, por dejarnos un
programa de vida tan claro en
las Bienaventuranzas. Así fue tu
vida y así quieres que seamos
los cristianos.
Que distinto seríamos nosotros
y el mundo que nos rodea, si.
23. ese fuera nuestro programa de
vida.
Ayúdanos a amar lo humilde, lo
sencillo, a estar cerca del que sufre
y llora. Haznos valientes para
luchar contra toda situación de
marginación, injusticia, hambre,
pobreza.
Transforma nuestro corazón de
piedra en un corazón limpio,
misericordioso y entregado