Ser madre es un sentimiento natural en las mujeres que crece con el embarazo y el nacimiento del hijo, al poder verle, abrazarle y sentir su delicada piel. Aunque los hijos crecen rápido, el amor de madre es para siempre y se manifiesta en enseñarles valores, costumbres y a valerse por sí mismos, a la vez que les das tu apoyo siempre que lo necesiten.