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EL ELOGIO DE LA LENTITUD

                 De: Carl Honoré
“Vivir de prisa no es vivir, es sobrevivir”.


Carl Honoré, uno de los principales teóricos de la Filosofía Slow, famoso por su
libro premiado Elogio de la Lentitud, sostiene que la hiperactividad actual nos
lleva a dedicar nuestras energías a otras metas que nos hacen olvidar las cosas
importantes de la vida. Sufrimos la Enfermedad del Tiempo creyendo que
todo se debe hacer rápido. Intentemos decrecer el ritmo alocado en qué
vivimos para no degradarnos nosotros mismos. Simplemente reduzcamos la
marcha y busquemos el tiempo justo para cada cosa; saboreemos cada
momento priorizando lo imprescindible.
No dejes que tu agenda te
          gobierne.
   Muchas cosas que te
       planteas ahora
     son postergables.
      Prueba y verás.
Cuando estés con tu pareja
   y tus hijos, o con tus
 amigos, apaga el móvil y
  desconecta el teléfono.
Tómate tiempo para comer y
  beber. Comer de prisa genera
males digestivos y si la comida es
buena y está bien sazonada, no la
apreciarás como se debe. Este es
uno de los placeres de la vida, no
            lo arruines.
Pasa tiempo a solas contigo
mismo, en silencio. Escucha tu
voz interior. Medita sobre la
       vida en general.
No tengas miedo al silencio. Al
principio te será difícil, luego
    notarás los beneficios.
No te aturdas con ruidos o
 mires televisión como si
    fueras una medusa
       petrificada.
Escucha música con calma y verás
 que es bellísima. No te quedes
  frente al televisor porque sí.
Escribe un ranking de
prioridades. Si lo primero que
  escribiste es trabajo, algo
      anda mal, vuelve a
          redactarlo.
El trabajo es importante y
   debemos hacerlo, pero
medita y notarás que no es lo
 más importante de tu vida.
No creas eso de que en poco tiempo das amor. Es
una estupidez pensar que se puede amar una hora al
               día y basta con eso.
Escucha los sueños de la gente
  que amas, sus miedos, sus
  alegrías, sus fracasos, sus
    fantasías y problemas.
No creas que tus
   hijos pueden
 seguir tu ritmo.
  Eres tú quien
debe desacelerar
 e ir al ritmo de
       ellos.
Recuerda que la conversación y la compañía
 silenciosa son los medios de comunicación
         más antiguos que existen.
El virus de la prisa es una
     epidemia mundial.
“Si lo has contraído, trata de
           curarte".
¡Suerte!

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  • 1. EL ELOGIO DE LA LENTITUD De: Carl Honoré
  • 2. “Vivir de prisa no es vivir, es sobrevivir”. Carl Honoré, uno de los principales teóricos de la Filosofía Slow, famoso por su libro premiado Elogio de la Lentitud, sostiene que la hiperactividad actual nos lleva a dedicar nuestras energías a otras metas que nos hacen olvidar las cosas importantes de la vida. Sufrimos la Enfermedad del Tiempo creyendo que todo se debe hacer rápido. Intentemos decrecer el ritmo alocado en qué vivimos para no degradarnos nosotros mismos. Simplemente reduzcamos la marcha y busquemos el tiempo justo para cada cosa; saboreemos cada momento priorizando lo imprescindible.
  • 3. No dejes que tu agenda te gobierne. Muchas cosas que te planteas ahora son postergables. Prueba y verás.
  • 4. Cuando estés con tu pareja y tus hijos, o con tus amigos, apaga el móvil y desconecta el teléfono.
  • 5. Tómate tiempo para comer y beber. Comer de prisa genera males digestivos y si la comida es buena y está bien sazonada, no la apreciarás como se debe. Este es uno de los placeres de la vida, no lo arruines.
  • 6. Pasa tiempo a solas contigo mismo, en silencio. Escucha tu voz interior. Medita sobre la vida en general.
  • 7. No tengas miedo al silencio. Al principio te será difícil, luego notarás los beneficios.
  • 8. No te aturdas con ruidos o mires televisión como si fueras una medusa petrificada.
  • 9. Escucha música con calma y verás que es bellísima. No te quedes frente al televisor porque sí.
  • 10. Escribe un ranking de prioridades. Si lo primero que escribiste es trabajo, algo anda mal, vuelve a redactarlo.
  • 11. El trabajo es importante y debemos hacerlo, pero medita y notarás que no es lo más importante de tu vida.
  • 12. No creas eso de que en poco tiempo das amor. Es una estupidez pensar que se puede amar una hora al día y basta con eso.
  • 13. Escucha los sueños de la gente que amas, sus miedos, sus alegrías, sus fracasos, sus fantasías y problemas.
  • 14. No creas que tus hijos pueden seguir tu ritmo. Eres tú quien debe desacelerar e ir al ritmo de ellos.
  • 15. Recuerda que la conversación y la compañía silenciosa son los medios de comunicación más antiguos que existen.
  • 16. El virus de la prisa es una epidemia mundial.
  • 17. “Si lo has contraído, trata de curarte".