Calisto se enamora de Melibea tras encontrarla en un huerto. Rechazado, pide ayuda a su criado Sempronio, quien propone contratar a la alcahueta Celestina para conquistar a Melibea. Celestina acepta la misión y planea ganarse la confianza del padre de Melibea fingiendo venderle hilados y otros productos. Mientras tanto, Sempronio intenta convencer a Pármeno, otro criado de Calisto, de unirse a la conspiración amorosa.