El documento propone varias reformas para mejorar la democracia en España, incluyendo una reforma del modelo de estado para racionalizar el sistema autonómico, una reforma electoral para el Congreso, y reformas a la Constitución para clarificar competencias y el sistema de financiación. También propone medidas para profundizar la democracia como limitar mandatos, mejorar la transparencia, y reformar los partidos políticos. El objetivo general es invertir la tendencia nacionalista e impulsar estas reformas a través de pactos entre los principales partidos.