Ensayo de Daniela Olea

1. El Rol del Profesional de la Información en la Sociedad del Conocimiento
El perfil de los usuarios que consumen información en la red actualmente, corresponde a
personas que pasan una importante cantidad de horas conectados a ella, no solamente como
espectadores, sino que más bien como participantes activos. Nos referimos a la
proliferación de plataformas de generación de contenidos en la web, que permite a
cualquier persona que tenga acceso a esta, pueda “subir” el contenido que desee, nos
encontramos frente a la oportunidad de compartir desde un simple estado emocional, en un
día cualquiera, hasta publicar descubrimientos o conocimientos relevantes que contribuyen
al desarrollo del saber. Ese es uno de los principales valores agregados de la web 2.0, el
hacerse presente de manera inmediata y decir: “yo estoy acá”, “yo pienso que”, “yo estuve
en…”.
¿Que es la Web 2.0? Se entiende como el conjunto de tecnologías que permiten al usuario
interactuar y colaborar con contenidos entre sí. En este espacio el usuario crea contenido y
ya no se limita solo a la observación, el concepto se rige por siete principios que nos
permiten comprenderlo de mejor manera: la web como plataforma, datos como el "Intel
Inside", arquitectura de participación, modelos de programación ligera, pequeños modelos
de negocio acotado a distintos intereses, el beta perpetuo, y el software no limitado a un
solo dispositivo. Todas estas características tienen la particularidad de volver la experiencia
del usuario más enriquecedorai. Sin duda, este espacio entrega muchos beneficios, ya que la
red se convirtió en un medio de expresión masivo, permite que nos enteremos de los
últimos acontecimientos en menor tiempo que antes, tiene una amplia variedad de formatos
en los cuales se puede publicar contenido, nos conecta con la gente que nos interesa, ofrece
diversidad de temas para diferentes grupos de personas con intereses variados y con un
costo que con el tiempo ha ido descendiendo.
¿Qué rol juega un profesional de la información dentro de este contexto? Puede ser un
mediador entre el usuario y los recursos o tecnologías de la información, con las
competencias adecuadas, podría perfectamente desarrollar plataformas como bases de
datos, repositorios digitales o bibliotecas digitales. La denominación de bibliotecario,
pareciera insuficiente hoy en día, y se puede hablar de una definición más amplia para
describir a este profesional, alguien que tiene la capacidad de gestionar distintos tipos de
información. El profesional de la información debe ser una persona curiosa que esté en
constante conocimiento de las nuevas tecnologías, debe considerar que se vive en un
mundo que está en permanente cambio, al que no tiene sentido oponerse, apegándose a sus
conocimientos más tradicionales. Siguiendo un camino que lo lleve a evolucionar y abrirse
los cambios será lo óptimo para conseguir atender a los requerimientos de los usuarios
actuales y futuros.

2. Se pueden mencionar en este caso dos ejemplos de áreas relacionadas con trabajo que los
bibliotecarios pueden desempeñar en la red, lo que podría significar para ellos abrir nuevos
campos laborales.
En primer lugar nos encontramos con el desarrollo de contenidos en la web. La
proliferación de servicios de información digitales, y los problemas de organización de los
contenidos que se generen, son un tema que compete a los profesionales de la información.
Entender que la información y el conocimiento son un derecho y no un privilegio de pocos
es un reto que los estos profesionales deben tener siempre presente, siendo conveniente que
se incluya en su formación académica. Las ciencias de la información se asocian con al área
de las humanidades, lo que le da un sentido social a esta profesión, como es tener a
disposición de los usuarios los conocimientos que ellos requieren. Esta práctica se debe
llevar a cabo en cualquier trabajo o proyecto que un bibliotecario este desarrollando, y uno
de los objetivos principales de esta labor es entregar acceso a la información a la
comunidad en general, tal como lo propone la filosofía de la Web 2.0, en definitiva,
controlar el acceso al conocimiento para un grupo de elegidos no contribuye a que la
sociedad se desarrolle en pleno.
Por otro lado hay que señalar que, el diseño o la ejecución de sitios web se relacionan
directamente con el acceso al conocimiento, ya que la persona que esté a cargo de la
disposición de los contenidos en la red será quién tome decisiones importantes sobre lo que
se publicará y de qué manera. Tomemos como ejemplo la Arquitectura de la Información
que es el conjunto de métodos y herramientas que permiten organizar los contenidos en la
web, en este caso el profesional de la información puede actuar como un mediador entre
quienes proveen los servicios tecnológicos y los usuarios utilizando sus habilidades para
disponer contenidos, en especial donde se pueda encontrar un vacío de información.
Asimismo, puede ampliar sus actividades en este campo, ya que le son de su competencia
las tareas organización y administración de información. Quien deseé desarrollarse en este
ámbito, debe ser capaz de organizar la información con el fin de lograr la satisfacción de
los usuarios y de cubrir sus necesidades, por lo que es indispensable conocer tareas como el
proceso de selección, procesamiento, almacenamiento y búsqueda de información, que son
parte del diseño de un sitio web y que los bibliotecarios conocen bienii.
El segundo ejemplo se relaciona con las búsquedas de información. Una de las
competencias del profesional de la información es el ser un buen referencista, es decir, que
sea capaz de dar respuestas pertinente a los usuarios. En la red, a diario millones de
personas tienen inquietudes informacionales, que expresan de manera escrita en su lenguaje
cotidiano a través de los motores de búsqueda, es por esto que muchos se encuentran con
resultados que no los satisfacen.
Este problema puede tener dos causas. La primera tiene que ver con la manera en que se
busca la información, y esto se relaciona más bien, con la tarea pendiente de alfabetización

3. informacional en distintos países y culturas, un tema no menor, es la responsabilidad no
solo de los bibliotecólogos, sino de profesionales de otras áreas, como por ejemplo, los
educadores o los políticos, quienes se deben encargar de incluir el tema con la importancia
que se merece en los planes educativos, de no ser así, se seguirán repitiendo las búsquedas
erróneas o poco satisfactorias. No se puede dar por hecho que un motor de búsqueda sea la
solución a todas las inquietudes de los usuarios. La web contiene lo que queremos, los
motores de búsquedas son solo puentes para llegar hacia esos contenidos, pero quienes
realmente tienen dudas y deben aprender a formularlas, son más bien, los mismos usuarios.
La segunda causa la encontramos en el exceso de información que existe actualmente en la
red, esto se conoce también como infoxicacióniii y se refiere a la sobrecarga de contenidos.
Para ayudar a mejorar la situación se han creado diversas tecnologías como por ejemplo los
RSS y los etiquetados en lenguaje natural o TAGS, sin embargo, con el aumento de
contenidos de manera exponencial estas no son suficientes, consideremos también que las
demandas de información de los usuarios requieren rapidez y la infoxicación, puede
convertirse en un problema, produciendo angustia frente a una búsqueda al no encontrar
resultados pertinentes, o en el peor de los casos a un usuario que no tiene capacidad de
discriminar los contenidos e incorpora los resultados fallidos como parte de su
conocimiento.
La posible solución, en teoría, para afrontar este problema, se encuentra en la Web
semántica, que se define como el conjunto de actividades tendientes a la creación de
tecnologías para crear datos que sean interpretados por las máquinas iv. En palabra simples,
la Web semántica sería capaz de encontrar lo que busca un usuario dentro de un contexto,
se encargará de resolver problemas de recuperación de información, entregando una
sensación de que las maquinas pueden leer las mentes humanas. Esta idea propuesta por
Berners - Lee en el año 1999 aunque no es una realidad propiamente tal, es una meta hacía
la cual se quiere avanzar.
A grandes rasgos, los principales medios tecnológicos usados para el cumplimiento de los
objetivos de la web semántica son: el estándar XML, que es una codificación de páginas en
la cual las etiquetas transportan una carga semántica; los metadatos que aportan
descripciones de los sitios con un formato compatible con el de la estructura de la web para
lo cual existe la norma RDF y el uso de ontologías para especificar conceptos de diversas
áreas del conocimiento, en donde se propone el uso la tecnología Owlv. Los lenguajes y
estándares para desarrollar la web semántica, tendrán como objetivo, la representación del
conocimiento, como por ejemplo los metadatos, que representarán los objetos informáticos,
o las ontologías, que conforman un sistema de términos que tienen como finalidad describir
y representar un área del conocimiento, expresando relaciones entre términos por medio de
un lenguaje formal, para ser codificados por un computador, "la web semántica es a la
www lo que los tesauros fueron a la recuperación en texto libre en los albores de la
documentación automatizada. También entonces la fascinación inicial por la búsqueda

4. mediante palabras extraídas cedió enseguida ante la necesidad del control terminológico, lo
que llevó a su vez a la invención y a la generalización de los tesauros, que finalmente
convergieron con las clasificaciones"vi
En síntesis, se conviertan en una realidad a futuro o no, la pregunta es, como un profesional
de la información debiese estar preparado para actuar en este terreno. Si esta futura web se
construye con el objetivo de organizar y representar el conocimiento para que se recupere
de manera adecuada, el reto de los profesionales de la información será el desarrollo de sus
habilidades informáticas, para lo cual debe formarse para adquirir conocimiento y hacer uso
de nuevos lenguajes y estándares por medio de una apertura transdisciplinaria.
Por último, la representación de la información en la web de alta calidad basada en normas,
estándares y buenas prácticas dará como resultado que la recuperación de la información en
la red, tenga un alto grado de pertinencia evitando que la infoxicación frustre a los usuarios
en sus búsquedas. Evidentemente podemos hacer una analogía: si en una biblioteca, los
ítems dentro del catalogo se encuentran indizados y clasificados respondiendo a las normas,
a políticas internas y a los estándares internacionales que permiten la interoperabilidad, este
entregará aciertos pertinentes a sus usuarios entregando un servicio de calidad. Los
bibliotecarios deben ampliar su espectro de oportunidades y como objetivo, dar en
cualquier caso, un paso más allá.
¿Hacía donde vamos? En el marco de la V edición del Foro Internacional de los Contenidos
Digitales realizado en Madrid en Noviembre del 2011 Tim O´reilly declaró en una
ponencia sobre el futuro de internet: “Creo que la idea está obsoleta. Esa expresión fue
propia de otro momento en el que se intentaba promover la idea de la web, los fallos de la
era punto com, y creo que ha sido un éxito y ha creado mucho entusiasmo, pero
lamentablemente ha envejecido.”, dice O´reilly aludiendo a nuevas tecnologías como
ubicuidad y la web en la nube. Queda claro que a través de la declaración del principal
propulsor de la Web 2.0 el paradigma está cambiando, la tecnología avanza rápidamente. El
cambio es gradual y se añaden nuevos elementos tecnológicos lo que obliga a una
adaptación en menos tiempo. Durante un largo periodo el bibliotecario se dedico al análisis
y acceso a la información pero con estas nuevas herramienta se encuentra en la obligación
de salir de la biblioteca y los centros de documentación tradicionales para experimentar los
nuevos retos y oportunidades que ofrece la web. En resumen el profesional de la
información debe realizar una apertura transdisciplinar para adquirir otros conocimientos
que lo ayuden al desarrollo de nuevos campos laborales, tendrá la oportunidad de
retroalimentar a otros profesionales aportando con su especialidad que es la gestión de la
información. Además del desarrollo del trabajo en gestión de contenidos y en la mejoras de
la recuperación, se encuentra pendiente la tarea de desarrollar aún más la alfabetización
informacional para los usuarios dentro de su campo, esta experiencia le permitirá aprender
de ellos, cuáles son sus necesidades informacionales, la forma en que las expresan, que tipo
de interfaces prefieren, etc., esto ayudará al diseño para el desarrollo de contenidos,

5. considerando el comportamiento de los usuarios como fuente de referencia. Conocer bien al
usuario es fundamental, ya que él representa el objetivo final de todos los esfuerzos para
que la disposición de los contenidos en cualquier plataforma sea de calidad
Referencias:
i
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fast food. Grup de Recerca d'Interaccions Digitals, Universitat de Vic. Flacso México. Barcelona / México DF
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