Este documento presenta una exposición bíblica sobre el conocimiento de la voluntad de Dios. Explora las diferencias entre el hombre carnal y el hombre espiritual, cómo Dios respeta nuestra libertad de elección, la importancia de la oración para mover la mano de Dios, y la necesidad de renovar continuamente nuestro andar con Él. El mensaje central es que la voluntad de Dios para nosotros es buena, agradable y perfecta, y que debemos transformarnos para conocerla y hacerla.