Este documento discute la influencia de los medios de comunicación y su responsabilidad. Argumenta que los medios sí influyen en la opinión pública, aunque a veces exageran historias o informan de manera amarillista. También señala que los medios a veces aumentan la sensación de inseguridad más allá de la criminalidad real. Finalmente, propone estrategias como la rendición de cuentas de los medios, la promoción de la lectura crítica y la vigilancia ciudadana para mejorar el periodismo.