Este documento describe tres juegos de estimulación temprana para bebés: 1) mecer, que proporciona placer al bebé a través del contacto corporal con un adulto confiable; 2) elevar y dejar caer suavemente al bebé para mantenerlo alerta mientras se mantiene el contacto; y 3) subir y bajar al bebé sobre las rodillas o pies del adulto de manera lúdica.
1. Estimulación temprana: Se concibe como un acercamiento directo, simple y satisfactorio para gozar, comprender y conocer a tu bebé, ampliando las alegrías de la paternidad y ensanchando su potencial del aprendizaje, a través de un conjunto de medios, técnicas y actividades con base científica.
3. MECER Alrededor de la acción de mecer se organiza el primer juego corporal. Pasaje del mecimiento calmante al mecimiento lúdico, de la acción que busca calmar el malestar del niño pequeño, al acto de mecer al niño, que sólo tiene la intención de obtener placer. Prelúdico para el niño, lúdico para el adulto. Primeramente es en el cuerpo de otro donde el mecimiento tiene lugar. Un otro confiable que pueda generar cambios, transmitiendo en el mismo acto, a partir de gestos de aseguramiento, que nada malo va a ocurrir.
4. Elevación y descenso - CAER Un juego que “mantiene al bebé en alerta” que es “el de lanzarlo o sacudirlo, obligándolo a adecuarse muy rápidamente para reestablecer el equilibrio, siempre con el sostén del adulto”. el nivel de contención que genera el contacto continuo de las manos del adulto, será un punto crucial para hacer de esta acción un juego de interés para el niño. Este vuelo figurado se vivirá con la alegría de la elevación siempre y cuando no se interrumpa el lazo corpóreo. (Sara Paín)
5. SUBIR Y BAJAR Una de las formas del "sube y baja" es cuando el niño apoyado sobre los muslos del adulto que esta sentado, siente que se produce un vacío que lo desequilibra al separar el adulto las rodillas, pero sabe y siente al mismo tiempo que el sostén se mantiene en las manos o en el tronco. El "caballito" también se realiza estando el niño apoyado sobre el empeine del pie del adulto, que está sentado y con las piernas superpuestas. En esta última acción los pies y piernas del niño quedan sin contactos y pueden moverse libremente.