Dos meditaciones cuaresmales cercanas al corazón de la tradición vicenciana
Alegria me das
1. ALEGRÍA ME DAS
Bendeciré al Señor
por siempre
y en Él siempre confiaré.
Me ha librado de todo temor
mis pies se inundan
roca afirmó.
No me moverán
del Señor diré…
2. Mi Escudo eres,
fuerza, mi Porción
mi Libertador
mi Refugio,
Torre Fuerte
mi Ayuda en tiempo
de necesidad.
3. ¿A quién tengo
yo en los cielos
sino a ti?
A nadie deseo
más que a Ti
Alegría me das
del Señor diré:
4. Mi Escudo eres,
fuerza, mi Porción
mi Libertador
mi Refugio,
Torre Fuerte
mi Ayuda en tiempo
de necesidad.
5. Bendeciré al Señor por siempre
y en Él siempre confiaré.
Me ha librado de todo temor
mis pies en una roca afirmó
no me moverán del Señor diré.
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6. CORO
Mi escudo eres,
fuerza, mi porción,
mi libertador, mi refugio,
torre fuerte;
mi ayuda en tiempo
de necesidad. 6
7. A quién tengo yo
en los cielos sino a Ti.
A nadie deseo más que a Ti
alegría me das, del Señor diré…
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8. CORO
Mi escudo eres,
fuerza, mi porción,
mi libertador, mi refugio,
torre fuerte;
mi ayuda en tiempo
de necesidad. 8