Criterios cognitivos

Criterios Universales para Desarrollar y fortalecer la Estructura Cognitiva, ***Ramón Ruiz***, USA, 2004.

Criterios Universales para Desarrollar
las Facultades Cognitivas
Introducción

Nunca olvidemos, que los animales también aprenden, pero
olvidemos,
reconocer,
es importante reconocer, que solamente los seres humanos
somos los únicos en especie en este planeta tierra capaces
de compartir nuestras experiencias de Éxito o Fracaso, y
además de poder dirigir y conducir conciente y
volitivamente nuestra actividad de aprendizaje, para lograr
llegar a las Metas u objetivos que nos hemos planteado y
propuesto.

Según Aristóteles (384-322 a. de C.), todos los seres vivos
también tienen la capacidad de sentir (perciben y tienen
emociones) el mundo de su entorno y de moverse en la naturaleza.
Pero más sin embargo, los seres humanos tienen además de la
capacidad de pensar o razonar, o, en otras palabras, de ordenar
sus sensaciones en varios grupos y clases. El ser humano tiene
sentimientos, emociones, y la capacidad de moverse como los
animales, pero además una capacidad, que solamente la tiene el
ser humano, y es la de pensar racionalmente y emocionalmente; de
1

estar o adquirir un nivel o estado de conciencia. Lo cual le permite y
ayuda a entender de manera consciente todos los procesos a lo
cuales se ve sometido durante su interacción en la sociedad y en el
mundo.1

¿Qué es el conocimiento?

Es un proceso en que están vinculados estrechamente las
operaciones y procedimientos mentales, subjetivos, con las
operaciones y formas de actividades objetivas, prácticas, aplicadas
a los objetos. El conocimiento que surge como producto de este
proceso, lleva la impronta (huella) de los aspectos
interrelacionados.2

Es la apropiación de objetos presentes a nuestra conciencia.
Esta apropiación peculiarìsima nos permite actuar sobre el mundo,
dirigir nuestra conducta y dar un sentido a nuestra vida. La posesión
del conocimiento logrado constituye nuestro saber, el cual
constantemente nuestro esfuerzo para adquirir nuevos
conocimientos y sirve de trama en que se van tejiendo las nuevas
adquisiciones.

1
Pág. 139. Gaarder, Jostein. El mundo de Sofía, Editorial Grupo Patria Cultural, S.A. de C.V., México 2004.
2 Pág. 42. Raúl Rojas Soriano. el Proceso de la Investigación Científica. Editorial Trillas, México 2004.
2


3


Para comprender los Criterios Cognitivos debemos empezar con uno
mismo, y para ello debemos comenzar por el estudio de las cuatro funciones
del ser humano: Intelectual, emocional, instintiva o fisiológica y motriz.

4

Lo que se entiende por “función intelectual” o “función del
pensamiento” es, supongo, claro para vosotros. Todos los procesos
mentales están comprendidos en ella: percepción de impresiones,
formación de representaciones y conceptos, raciocinio,
comparación, afirmación, negación, formación de palabras
(lenguaje), imaginación, y así sucesivamente.

Los mecanismos del pensamiento

A diferencia de los demás seres vivos, el hombre es capaz de
reflexionar acerca de su propia conducta, de establecer propósitos
para ella y de realizar, por consiguiente, actos voluntarios. El soporte
para todo ello se encuentra en el pensamiento, es decir, en la
capacidad del ser humano de manejar las ideas.

Y es por ello, que gracias a las sensaciones somos capaces de
captar la realidad del mundo que nos rodea, la percepción nos
facilita su interpretación y la memoria su conservación y
reconocimiento. Sin embargo, hasta este punto los procesos
mencionados emplean como material de trabajo las sensaciones y
las imágenes; misma que cuando son sometidas al proceso de
abstracción, permiten la generación de ideas. Ellas son el material
básico del pensamiento.

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Además de las sensaciones, la atención (fenómeno de la
atención) nos ayuda a discriminar entre los pensamientos que
pasan por nuestra mente.

Por tanto, debemos de reconocer y comprender que, nuestros
órganos de los sentidos (mediadores) reciben cerca de 4,000, 000,
000, 000 millones de bits cada día, de los cuales solo somos
concientes de 2 000 mil bits, de los diferentes estímulos que existen
en el ambiente y con los cuales entramos en relación en forma
cotidiana. Un simple paseo en la calle nos pone de manifiesto gran
número de colores, formas, intensidades luminosas, frecuencias
auditivas, sensaciones táctiles, corporales, etc.

Aunados a esos estímulos están aquellos de nuestra postura,
del movimiento de nuestras extremidades mientras caminamos, la
sensación de hambre y saciedad, la sensación del contacto de la
ropa contra nuestra piel, la presión que se ejerce o libera con cada
uno de los pasos que damos, los aromas agradables o pestilentes,
en fin, si quisiéramos enloquecer a una persona bastaría con
hacerla consciente de todas las sensaciones que existen en su
cuerpo durante un solo día.

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Podríamos decir que se trata de una verdadera e
ininterrumpida avalancha de estimulaciones que causan impacto
en nuestros sentidos. Por fortuna, muchos de ellos pasan
desapercibidos por nuestra mente. Esto es gracias al fenómeno de
la atención. Créate tu propio ejemplo en este momento, piensa en
ti mismo ahora. Haz de cuenta que te quedaste congelado, sin
moverte y dedica unos instantes a identificar todos aquellos
estímulos que te están impactando. Comienza por enumerar
mentalmente todas aquellas cosas que puedes alcanzar a ver, sin
mover ni la cabeza ni los ojos.

Además de las sensaciones, la atención o el fenómeno de la
atención nos ayuda a discriminar entre los pensamientos que pasan
por nuestra mente.

Por tanto, somos incuestionablemente afortunados al contar
con la atención, ya que ella nos ayuda a discriminar lo importante.
Nuestra mente no sería capaz de atender todos aquellos impulsos
generados por los sentidos y por el pensamiento. Por ello, algunos
autores consideran que la atención es una auténtica defensa del
organismo ante el ambiente interno y externo e, incluso, vinculan su
funcionamiento con la supervivencia de las especies.

7

Saber que no se sabe, ya es saber (este es un principio muy
fundamental).
Si usted no sabe que sabe, cree que no sabe. Por otro lado, si cree que
sabe y no sabe, actúa como si supiese. Esto puede provocar graves
consecuencias.

Todos somos ignorantes, pero en temas diferentes. Al ser humano
le es imposible saberlo todo. Reconocer la igno-rancia en alguna cosa
es ya un conocimiento, porque abre la puerta del aprendizaje.
Nuestra mayor ignorancia es no saber que no sabemos. La
arrogancia es ceguera cognitiva. Es volverse ciego al conocimiento.

Todo lo que aprendemos en la vida pasa por cuatro fases, y la
ignorancia es la primera fase del aprendizaje.

En la fase de la ignorancia, no saber cuanto no sabemos. Como dijo
aquel Sabio Ateniense Sócrates “Solo se que no se Nada”. Es
importante reconocer que no sabes, y solo así nos preocuparemos por
verdaderamente comenzar a investigar para aprender. Cuando
llegamos a saber que no sabemos, es que ya estamos aprendiendo y
entramos en la segunda fase?.

La segunda fase es tener una buena información sobre alguna
cosa, es decir, cuando sabemos cuando no sabemos.
8


La tercera fase es la del conocimiento (la Episteme, muy
diferente a la doxa “opinión”). Es cuando sabemos cuánto sabemos.
¿De qué modo comienza la fase de conocimiento? Con la confusión, y
sobre todo con la Duda, recordemos la “Duda Cartesiana, de aquel
famoso Francés, Rene Descartes, cuya frase recita lo siguiente “cogito,
ergo, Sum”, primero existo, luego dudo, y así es como me doy cuenta,
o sea tengo conciencia de que Pienso, y por tanto deduzco que todo
ser humano también piensa igual como lo estoy haciendo yo. Al pasar
de la fase (estar informados, y recolectar datos empíricos, y
contrastarlos con los datos teóricos, o con los cuerpos teóricos
existentes) a la tercera (conocimiento o pensamiento científico, el cual
esta basado en argumentos validos, ya que emplea para su
confirmación y validación del método científico), hay cruzar el territorio
de la confusión y de la Duda. Cuando llegan a un punto determinado,
muchos estudiantes o sujetos abandonan el libro, y no den porque no
soportan atravesar la confusión y la duda, aunque forme parte del
proceso de aprendizaje (aprendizaje formativo y propedéutico). Si los
profesores en los colegios, y en cualquier institución pública o privada,
lo supieran y entendiesen la importancia que tiene esta etapa del
conocimiento (estilos de enseñanza y estilos de aprendizaje, de
acuerdo a las inteligencias múltiples de Gadner), el aprendizaje de
alumnos seria mucho mejor. Pero esto no es lo que sucede, Las
personas temen la confusión y la duda (Dios mío, no entienden nada.
9

No lo consigo. Es demasiado difícil para mi cabeza!»), porque no
quieren abandonar la zona de comodidad y de conformismo, y sobre
todo el ámbito de la Mediocridad. (Véase “El hombre Mediocre”, de
José Ingenieros).

Si usted se siente un poco confundido al leer este libro, eso es
una buena señal. Quiere decir que está dispuesto incorporar nuevos
conocimientos.

Si ante nuestros ojos apareciera algo completamente nuevo,
que nunca hubiéramos visto antes, nuestra primer percepción
parecería confusa y dudosa (qué es eso, para que sirve, quien lo creo,
etc.?). Pero nuestro cerebro (hemisferio izquierdo y derecho) tiene la
capacidad de procesar millones, y millones de información, siempre y
cuando estemos abiertos para que eso ocurra, y tarde lo que era
confuso se volverá familiar, y lo que incomprensible (abstracto) se
volverá obvio, ya que se pasa de lo abstracto a lo concreto, o
viceversa de lo Concreto o simple a lo difícil y abstracto. Como ya he
dicho arrogancia (el orgullo, la soberbia, la altanería, y sobre la fuerza
de gravedad que ejerce la “Ignorancia”) es ceguera cognitiva .Asumir
una pose de sabelotodo (sabiendo) significa cerrar los pro canales al
conocimiento (esfera intelectual o cognoscitiva), y así como al
crecimiento Emocional, motriz, espiritual y sexual. Para llegar al
conocimiento (la episteme), necesario abrirse a lo nuevo y tener
10

voluntad para aprender, para, sin miedo (¡al contrarío!), penetrar en lo
desconocido. Solamente de esta manera es posible superar
dificultades y atravesar la confusión y la Duda.

En la plenitud del conocimiento (que no significa saberlo todo,
sino saber bien lo que se sabe), se llega a la cuarta fase del
aprendizaje: la sabiduría. Nuestro cerebro ha con-seguido asimilar de
tal manera ese conocimiento que ya no necesitamos prestarle
atención, está en nosotros, forma parte de nuestra estructura mental o
cognitiva. En esta fase, la persona no sabe cuánto (o cómo) sabe.

El bebé nace sin saber caminar (desarrollo de la esfera Motriz). Al
principio, ni siquiera sabe que no sabe. Más tarde, cuando ve a otras
personas andando (por imitación, y a través de prueba y error,
adquiere una nueva conducta), desea también caminar, y entonces
se da cuenta de que no sabe. Al tomar conciencia de su ignorancia,
comienza a aprender. Después realiza las primeras tentativas y al
principio no consigne ningún resultado, pero ya se da cuenta de lo que
debe hacer. Entonces comienza a pro-bar con más ahínco, da dos o
tres pasos y se cae. Lo intenta de nuevo y se cae. Se siente confundido
y lo intenta nuevamente. Y continúa cayéndose. Pero no renuncia
(comienza a desarrollar la Persistencia, y la tenacidad), hasta que
aprende. Pasado algún tiempo, aquello que le había exigido tanto

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esfuerzo físico y psicológico para aprenderlo se convierte en algo tan
simple que ni siquiera se da cuenta de que está caminando.

Somos inconscientemente incompetentes en la primera fase,
conscientemente incompetentes en la segunda, conscientemente
competentes en la tercera, e inconscientemente competentes en la
cuarta. Así es el proceso de aprendizaje humano y animal.

Saber alguna cosa es muy diferente de saber a enseñarla, o
describir cierto aprendizaje. En las universidades es muy habitual
encontrarse a grandes sabios que son pésimos profesores (no saben
como transmitir el saber).

Pero no es solo en la escuela donde aprendemos y enseñamos.
Este proceso ocurre todo el tiempo y en todos los ambientes el buen
comunicador es en la práctica un profesor.

IGNORANCIA Inconscientemente incompetente
INFORMACIÓN Conscientemente incompetente
CONOCIMIENTO Conscientemente competente
SABIDURIA Inconscientemente competentes

Pero recordemos que solo el tiempo lo decide todo, y es por ello que
sólo aquel que sobresale de la uniformidad consigue despertar interés y
atención.

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La segunda técnica es la repetición, que es el origen del proceso
de aprendizaje. De la misma manera que un bebé aprende a caminar
repitiendo y repitiendo sus intentos, cualquiera de nosotros aprende
con más facilidad cuando el método se basa en repeticiones bien
dosificadas.

El conocimiento no significa acumulación de información, sino
competencia para actuar, y tener las herramientas y capacidades
suficientes y necesarias para solucionar y resolver problemas en la vida
cotidiana (pensamiento pragmático).

Se puede decir profesor, solamente aquel quien ya consigue
transmitir nuevas ideas y que no sólo sean entendidas sino también
aceptadas por el oyente, sobre todo con una aplicación practica en
la solución de problemas en la vida cotidiana.

Cuando intentamos convencer a alguien de hecho estamos
transmitiendo (enseñando) una manera de pensar distinta de la que
esa persona tenía anteriormente dentro de su estructura cognitiva.

Existen algunas técnicas (método que otros ya han utilizado y
son eficaces, y sobre todo ahorran un tiempo considerable) que
facilitan este proceso enseñanza y aprendizaje. Usted podrá usarlas en

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su vida cotidiana y ampliar de manera sorprendente su poder al influir
en los demás y su capacidad de aprender y de enseñar.

Crear un impacto es una de esas técnicas. Si usted una situación
de impacto, de sorpresa, de impresión fuerte e inesperada, logrará
atraer la atención de su oyente. No necesita dejar de ser usted mismo
para crear un impacto. Al contrario, cuanta más espontaneidad
transmita mejor. Rodeados de tanta información que circula todo el
tiempo (hoy en día, se denomina la Sociedad del conocimiento, que
mejor seria llamarla la “Sociedad de la Información”).

¿Por qué la mayor parte de los estudiantes aprenden una
asignatura, dedicándose días y días a estudiarla, y después de tanto
esfuerzo, lo olvidan todo (ya que solo intentaron obtener información,
muy contrario cuando se comprender e interpreta los principios
fundamentas de alguna disciplina? (Qué derroche de energía y de
tiempo!) Esto nos pasa o nos ha pasado a todos. ¿Podría usted aprobar
hoy un examen, como el de la selectividad, por ejemplo, o hacer
oposiciones para el cargo que ocupa actualmente? El problema es
que en la escuela, de hecho, no se aprende. Sólo nos tragamos una
serie de conocimientos, que mejor deberíamos denominar
“Información”. Necesitamos aprender a aprender.

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conocimiento
Todo mi conocimiento del mundo físico y sensible, incluso mi
conocimiento científico, se obtiene desde mi propio punto de vista
particular, o desde alguna experiencia del mundo… Todo el
universo de la Ciencia (pura y aplicada) está construido sobre el
directamente.
mundo que se ha experimentado directamente

Merleau Pony

Estas palabras de Merleau Pony nos permiten comprender por
qué una de las características que distinguen a una persona educada
“conocedora”, realmente sabia, es su capacidad para descubrir qué
conocimiento tiene más valor y cómo aplicar (pensamiento
pragmático) esos conocimientos en una experiencia concreta en la
vida cotidiana, y sobre todo en la solución y planteamiento de
problemas.

Por ello debemos de reconocer que, al Aprender, conocemos y
comprendemos que al adquirir conocimientos cada uno de nosotros se
transforma (adquirimos nuevas conductas), se modifica, cambia. Sin
embargo, desde mi propia perspectiva, esa transformación que
produce en nosotros el Aprendizaje, deberá orientarse hacia los valores
específicamente humanos, que nos hacen diferentes de los animales.
Así pues, desde mi perspectiva y consideración, se puede decir que el
Conocimiento Científico es uno de los tesoros más valiosos que las

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joyas, perlas o diamantes, por ello es importante antes que nada
comprender y reconocer lo siguiente:

Para que tus oídos estén siempre atentos a la Voz de la
Sabiduría, aplica tu ánimo al estudio de la Prudencia. Que si tú
invocas la Sabiduría, y se aficiona tu Corazón (inteligencia
emocional) a la Prudencia; si la buscas con el Ardor con que se
buscan las Riquezas (dinero, oro, plata, diamantes, joyas, perlas,
etcétera), y la procuras desenterrar como se hace un tesoro.
Entonces Aprenderás el Conocimiento de Dios (quien otorga la
Sabiduría Divina que proviene de Dios, de la Fuente Suprema,
creador
ya que el es el creador de todos las cosas visibles e invisibles
“materiales y espirituales”); pues el Señor es quien da la
Ciencia”.
Sabiduría, y de su boca sale la “Discreción y la Ciencia”.
(Proverbios 2:2-6)
2:2-

Y es así que se puede decir que el Conocimiento más valioso será
aquel que:

• Nos permita comprender la Totalidad de la vida como un
camino, como una ascensión penosa que nos conduzca hacia
algo más allá de uno mismo.
• Nos capacite para ver en profundidad a las personas, los hechos,
los acontecimientos de cada día;

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• Nos permita distinguir entre un hecho y una opinión, la evidencia
y la propaganda, lo lógico y lo absurdo;
• Nos haga más aptos, responsables y concientes para dialogar y
compartir nuestras ideas con otras personas (relaciones personas
e intrapersonales), hablando y escuchando, planteando
preguntas penetrantes o resolviendo problemas profundos;
• Contribuya a dar sentido y orientación a los hechos cotidianos y
empíricos de nuestra existencia efímera y pasajera como es: a la
vida, al trabajo, al dolor, al sufrimiento, al sacrificio, a la lucha, al
amor, a la alegría, a la enfermedad y sobre todo al misterio de la
muerte (véase “la razón y el Conocimiento Silencioso”, escrito por
el autor en una edición electrónica gratuita publicada el 22 Mayo
2007, en: http://www.monografias.com/trabajos45/razon-y-
conocimiento/razon-y-conocimiento.shtml).
• Nos ayude a crear solidaridad entre los seres humanos, entre las
naciones, y permita hacer crecer los lazos afectivos;
• Nos capacite a personas y pueblos a conocer dónde está la
enfermedad social y cómo se ha adquirido: no únicamente para
aliviar el dolor y los males sociales, sino también para curarlos y
prevenirlos;

• Refuerce nuestra responsabilidad personal y social, y nos haga
aceptar las consecuencias de nuestros actos o de nuestras
omisiones en la vida cotidiana.
17


Por tanto debemos de reconocer que el conocimiento no significa
acumulación de información, sino competencia (facultad y habilidad
pragmática) para actuar.

La utilización es la tercera técnica (ciencia aplicada o la
tecnología). Sólo asimilamos aquellos conocimientos que utilizamos en
nuestra vida. En la actualidad con la inmensa cantidad de
informaciones que circulan todo el tiempo, no tiene ningún sentido
memorizar una serie de conocimientos que nunca nos Serán útiles. Si
empleáramos la misma cantidad de tiempo en aprender a aprender,
la mente sabría cómo procesar informaciones con mucha más
facilidad y así estaríamos siempre aprendiendo, a cada instante.

El conocimiento verdadero (conocimiento silencioso) es el que pasa
a formar parte de nosotros, y deja de ser una referencia externa. La
capacidad de interiorización es otro aspecto del proceso de
aprendizaje.

Se puede decir que Aprender es un proceso que no tiene fin.
Siempre tenemos algo que aprender. Voy a demostrarlo con el
método más poderoso que existe para enseñar y comunicarse: la
metáfora. En las historias, en las parábolas, en las fábulas, el poder de
la metáfora se encuentra concentrado Cuando se dice: «Érase una
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vez» o «Hace mucho tiempo», en realidad se habla del presente, de
aquí y ahora. Las historias metafóricas son eternas.

Uno de los deportes tradicionales de Alaska es la tala de árboles.
Hay leñadores famosos con un gran dominio, habilidad y energía en el
uso del hacha. Un joven que quería convertirse también en un gran
leñador, oyó hablar del mejor de los leñadores del país y decidió ir a su
encuentro.

—Quiero ser su discípulo. Quiero aprender a cortar árboles como usted.

El joven se aplicó en aprender las lecciones del maestros
después de algún tiempo creyó haberlo superado. Se creía más fuerte,
más ágil, más joven, estaba seguro de vencer fácilmente al viejo
leñador. Así desafió a su maestro en competición de ocho horas, para
saber cuál de los dos podía cortar más árboles.

El maestro aceptó el desafío, el joven leñador comenzó a cortar
árboles con entusiasmo y vigor. Entre árbol y árbol miraba a su maestro,
pero la mayor parte de las veces lo encontraba sentado El joven volvía
entonces a sus árboles. Seguro de vencer, y sintiendo pena por su viejo
maestro.

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Al caer el día, para gran sorpresa del joven, el viejo maestro
había cortado muchos más árboles que él, por tanto su mente dijo.

—Cómo puede ser? —se sorprendió—. Casi todas las veces que lo miré,
usted estaba descansando!

—No, hijo-mío, yo no descansaba. Estaba afilando mi hacha. Esa es la
razón por la que has perdido.

El veterano empleado en afilar el hacha es valiosamente
recompensado.

El refuerzo en el proceso de aprendizaje, que dura toda la vida, es
como afilar el hacha. ¡Continúe afilando la suya!

En conclusión se puede decir que, no siempre ni en todas
partes, el Conocimiento más valioso es el mas útil o funcional
(perspectiva pragmática y utilitarista; John Stuart, Jonh Dewey),
aunque los conocimientos útiles y funcionales o prácticos, pueden
ser también valiosos.

Más aun, la Práctica no es el único camino y amigo que
tenemos para transformar la realidad física y sensible y hacer frente
a situaciones problemáticas (véase pensamiento Empírico y
20

Racionalista en la obra titulada “La Ciencia y el Método Científico”,
del mismo autor, disponible en una edición electrónica gratuita en
http://www.ilustrados.com en la sección de Educación). No
olvidemos que la Creatividad, en esta perspectiva, consiste en la
búsqueda de nuevas formas de conocimiento o de expresión, de
nuevos instrumentos y procedimientos; en suma, de nuevas
posibilidades nunca antes explotadas o experimentadas.

Por todo ello resulta más importante Aprender a Aprender, que
la simple acumulación de información (método de enseñanza
tradicional utilizado en las escuelas publicas y privadas de América
Latina), pues implica adquirir ese espíritu científico y aventurero
(según Bertrand Russel) que nos impulsa a probar, dudar y sobre
todo a explorar nuevos caminos para nuestra vida, mediante el
Aprendizaje vivencial, y existencial.

21

Bibliografía

1. Michel Guillermo. Aprende a Aprender (Guía de Auto educación).
Aprender
Decimotercera Edición, Editorial Trillas, México, 1996.
2. Ruiz L. Ramón. :(2007) Las Funciones Humanas
Humanas.
3. Ruiz L. Ramón. : (2007) Historia y Evolución del Pensamiento Científico
Científico.
4. Ruiz L. Ramón. :(2007) La Razón y el Conocimiento Silencioso
Silencioso.
5. La Sagrada Biblia. Traducción de la Vulgata Latina por el Hermano Don
Félix Torres, San Martín y Domínguez Editores, Colombia, 2003.

Ramón Ruiz Limón
fundamental:
Investigador en Ciencia Básica o fundamental:

Psicología, Educación y Filosofía de la Ciencia.

http://www.slideshare.net/Euler/slideshows/
http://www.euler.kupass.com
http://www.monografias.com/trabajos-pdf/historia-pensamiento-cientifico/historia-
pensamiento-cientifico.shtml, en línea a partir de 28 Marzo 2007, primera versión en
español e inglés.
Para citar este artículo siga el siguiente formato:
http://www.slideshare.net/Euler/criterios-cognitivos/

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