La Aljafería, construida originalmente en el siglo XI como palacio musulmán en Zaragoza, fue reconquistada por los cristianos en el siglo XII y más tarde convertida en un nuevo palacio por los Reyes Católicos en el siglo XV. Abandonado durante siglos, el edificio fue redescubierto en el siglo XX por su valor histórico y artístico, y actualmente alberga las Cortes de Aragón.