La bomba atómica es un dispositivo que obtiene una enorme energía de las reacciones nucleares en cadena no controladas. Estados Unidos creó la bomba atómica durante la Segunda Guerra Mundial y la usó contra las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki en 1945, matando a cientos de miles de personas e hiriendo a muchas más con radiación. El documento luego describe los efectos devastadores específicos de las bombas lanzadas sobre Hiroshima y Nagasaki.