El documento describe la pobreza rural en Perú, sus causas y los esfuerzos del gobierno peruano y el FIDA para combatirla. La pobreza rural afecta desproporcionadamente a las regiones andinas y a las mujeres. El gobierno peruano y el FIDA trabajan para fortalecer a los pequeños productores, mejorar el acceso a servicios y mercados, y promover la participación comunitaria para reducir la pobreza rural.
2. Y, aunque la pobreza urbana y la rural afectan al Perú, la inseguridad alimentaria es
crónica en las regiones rurales en donde muchos pequeños productores cultivan los
productos básicos a nivel de subsistencia. Por ello y por otras razones, aquellos nacidos
en Lima esperan vivir casi 20 años más que quienes nacen en el sur de la sierra.
La pobreza rural en Perú tiene sus raíces en:
• altas tasas de analfabetismo, especialmente entre las mujeres;
• falta de servicios esenciales como la educación y energía eléctrica;
• falta de certeza en los derechos a poseer tierra, bosques y agua;
• investigación agrícola, capacitación y servicios financieros;
• servicios zoofitosanitarios ineficaces;
• mala infraestructura para el transporte y los sistemas de mercados, y
• ausencia de organización y planificación territorial bien definida.
Los más pobres entre los pobres en Perú son los habitantes de la sierra andina, en
donde una gran mayoría de las comunidades indígenas quechua y aymara viven debajo
de la línea de la pobreza.
Las mujeres son las más afectadas, pues la mayoría de mujeres rurales son pobres o
extremadamente pobres, aunque desempeñan un papel crucial en la economía de
subsistencia. Las mujeres trabajan la tierra, cuidan del ganado y participan en
actividades para generar ingresos, lo que representa casi 80 por ciento de la fuerza
laboral familiar. Todas estas actividades productivas de las mujeres, además de las
tareas tradicionales en el hogar y la crianza de los hijos, hacen posible que sus esposos
migren en busca de trabajo temporal.
Erradicación de la pobreza rural
en Perú
A pesar de los múltiples desafíos económicos y sociales que enfrentan las comunidades
pobres en Perú, entre 2001 y 2010 el número de personas que vivían por debajo del
nivel de pobreza se redujo, en términos generales, un 10 por ciento. En 2011, en medio
de la recesión mundial en curso y con el panorama histórico de violencia política,
inestabilidad social y vulnerabilidad económica como telón de fondo, el PIB
de Perú creció 6,9 por ciento. Sin embargo, las tasas de pobreza rural siguen siendo
desproporcionadamente altas.
La principal agencia del desarrollo agrícola y rural en Perú es el Ministerio de
Agricultura. Su mandato dicta la reducción de la pobreza y el mejoramiento de las
condiciones de vida en las áreas rurales al integrar a los productores a pequeña escala y
los campesinos de subsistencia en el mercado. Para ayudar a los pequeños productores a
obtener mayor rentabilidad y una ventaja competitiva, el gobierno les brinda apoyo con
la gestión de recursos naturales, control de calidad, transferencia de tecnología y una
productividad mejorada.
La estrategia para combatir la pobreza rural en Perú en los últimos años ha estado
específicamente dirigida a:
• fortalecer la competitividad de los pequeños productores e integrantes de las
comunidades indígenas andinas y amazónicas para incrementar los niveles de empleo
y de ingresos;
• incrementar la rentabilidad de los recursos disponibles;
• contribuir a la seguridad alimentaria y nutrición en los hogares, y
• generar capacidades en los pequeños productores para que aprovechen las
oportunidades de mercado.
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6. Operaciones en curso
Proyecto de Fortalecimiento de los Mercados
y Diversificación de los Ingresos y Mejoramiento
de las Condiciones de Vida en la Sierra Sur
Proyecto para el Fortalecimiento de los Activos,
Mercados y Políticas para el Desarrollo Rural
en la Sierra Norte
Lima
Proyecto para el Fortalecimiento de los Activos, Mercados
y Políticas para el Desarrollo Rural en la Sierra Norte
Este proyecto busca proteger y mejorar la herencia natural y cultural de los hogares Costo total: USD 21,7 millones
rurales pobres en la Sierra Norte de Perú. También trabaja para fortalecer a las Préstamo del FIDA: USD 14,4 millones
organizaciones comunitarias en áreas rurales y abrir mercados nuevos para Duración: 2009-2014
actividades empresariales. Beneficiarios directos: 20 040 hogares
Cofinanciamiento: ActionAid
El proyecto hace específicamente lo siguiente:
(USD 1,0 millón)
• Ayuda a los pequeños productores y empresarios a contratar asistencia técnica para
mejorar la producción, mercadeo y gestión de empresas rurales.
• Brinda servicios financieros y no financieros para ayudar a los pobres rurales,
especialmente a las mujeres y jóvenes, a desarrollar nuevas iniciativas de negocios
y contratar los servicios requeridos para implementarlos.
• Reduce los riesgos en los medios de vida al promover el ahorro y el micro-seguro.
El proyecto está implementando abordajes participativos e innovadores ya utilizados
en varios proyectos del FIDA en varias regiones de la sierra. Estos incluyen sistemas de
premios por la asignación de recursos y cartografía comunitaria participativa de la
asesoría de recursos naturales.
Proyecto de Fortalecimiento de los Mercados y Diversificación
de los Ingresos y Mejoramiento de las Condiciones de Vida
en la Sierra Sur
Costo total: USD 34,5 millones
El proyecto trabaja con familias pobres quechua y aymara en la Sierra Sur de Perú para
Préstamo del FIDA: USD 16,0 millones
mejorar la calidad de sus productos, preservar su conocimiento tradicional y mejorar la
Duración: 2005-2012
gestión de recursos naturales para diversificar sus fuentes de ingresos.
Beneficiarios directos: 15 000 hogares
Una de las características más innovadoras del proyecto es la transferencia directa de
fondos a las comunidades, lo que permite que los pequeños agricultores y
microempresarios contraten asistencia técnica para que sus productos sean competitivos
en los mercados nacional, regional e internacional. El proyecto les proporciona recursos
específicos a las mujeres agricultoras. Esta asistencia las ayuda a obtener derecho a tierra
y el reconocimiento legal para sus pequeños negocios de artesanías. Todo ello les
permite manejar sus propios ahorros.
El proyecto está por comenzar su segunda fase con USD 8,2 millones en financiamiento
del FIDA.
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