1. Un Llamado a la Lealtad
Escena I
Narrador: ¿Hasta donde llegó la firmeza y la determinación de jóvenes que arriesgaron sus
vidas por causa determinadas? La historia habla de jóvenes, a quienes no les
importó arriesgar sus vidas, fueron maltratados, abusados, juzgados, calumniados
y muertos; y frente de toda esta situación, no desfallecieron, mostraron un valor
incomprensible. Alguien, algo más fuerte que ellos, les impulsaban sus
convicciones afianzadas por Dios, inarrancables.
{entra Patricio – lo traen amarrado}
Narrador: Patricio, joven romano fue apresado y traído delante del Rey, bajó de su caballo,
allí fue apresado y entonces descubrió que no había herido al Rey, sino a un
doble. Al llegar frente al Rey, se puso frente de un bracero, y metió su mano en
el fuego hasta que se le carbonizó, levantándola delante del Rey, dijo: “Yo he
fallado esta empresa, pero Roma tiene 3000 jóvenes dispuestos, a completar la
misión que yo fallé.”
Narrador: Al escuchar esto el Rey, se sorprendió, temió y declaró la paz a Roma.
Escena II
Narrador: Pero la historia tiene relatos más nobles y dignos que éste. Tal es el caso de una
joven de 22 años llamada Blandina. Quien fue traída delante del César, porque no
quería ofrecer incienso al César. Al llegar delante del César se le hizo la
pregunta.
Jueces: ¡Blandina! ¿Quién es Señor, Cristo es Señor o César es Señor?
Narrador: A lo que Blandina contestó
Blandina: ¡Cristo es Señor!
Narrador: Blandina fue llevada al calabozo, para que lo pensara allí en el calabozo y la
necesidad, pudo haberse retractado, entonces fue llevada a la presencia del César.
Jueces: ¡Blandina! ¿Quién es Señor, César es Señor o Cristo es Señor?
Blandina: ¡Cristo es Señor!
2. Narrador: Fue colocada otra vez en el calabozo, esto era su última oportunidad. Tenía que
pensarlo. Al ser traída de nuevo ante César se le preguntó.
Jueces: ¡Blandina! ¿Quién es Señor, César es Señor o Cristo es Señor?
Blandina: ¡Cristo es Señor!
Narrador: Blandina, entregó la criatura de meses, en manos de la nana y le dijo: “Por favor,
criadlo en el temor de Señor porque quiero que sea cristiano y quiero verlo en el
cielo.” Blandina fue atada a toros salvajes, que la arrastraron por todo el lugar.
Cuando el César pensaba que ya estaba muerta, fue a ver, y para sorpresa suya,
estaba viva y le hizo la misma pregunta. ¡Blandina! ¿Quién es Señor, César es
Señor o Cristo es Señor? A lo que ella contestó. ¡Cristo es Señor! (muere)
Escena III
{Marciano entra, con los guardias que lo traen}
Marciano, mal cerradas las heridas de los golpes que le influyeron es traído ante el César.
Marciano: César, miente quien dice que fui yo, quien a Roma prendió fuego, pero si me
acusan de ser cristiano es verdad creo en Jesucristo, practicó su doctrina y la
mayor evidencia es que en vez de odiarte, te perdono.
Narrador: Fue llevado al coliseo y al verlo la bestia salvaje, tan mansa, no supo atacarlo,
Marciano permanecía tranquilo. El león confuso no sabía que hacer pero al final,
la fiereza venció y lanzó un rugido, sacudió la melena y saltó sobre su presa, hubo
un aplauso, se empapó de sangre la arena y mientras entre risotadas y aplausos,
Marciano al suelo caía, se escuchó su voz, con fuerte clamor “Yo no te odio, te
perdono Nerón.
Narrador: “Lo mismo que fue, es lo mismo que será” con la circunstancia, agravante, que la
prueba venidera será peor.” (CS Pág. 10)
“Los hijos de Dios serán, calumniados, denigrados, su reputación destruida,
entregados a muerte, no necesitamos sorprendernos de nada que ocurra en nuestro
derredor.” (HAP y MS II última gran lucha)
Ahora es cuando debemos sacar valor de la cobardía de otros, calor de su frialdad
y lealtad de su traición.” (1Tpág.)
Llamado a la entrega a aquel que da la valentía “ejemplo os he dado Para que como yo hice
vosotros también hagáis.”