El documento describe los cambios bioquímicos y psicológicos que ocurren cuando las personas se enamoran, incluyendo la liberación de sustancias químicas como la feniletilamina y la dopamina que producen euforia. También explica que los genes juegan un papel al disparar estas sustancias para promover la atracción y el deseo de estar juntos con el fin último de procrear y conservar la especie humana.
2. El nacimiento del amor
Al enamorarnos ocurren una serie de cambios bioquímicos y psicológicos en nuestro organismo.
¿Qué es lo que establece el denominado "flechazo"?, porque todos sabemos que existe como un
sonar, un radar que envía y recibe algún tipo de señales que permite el intercambio entre dos
personas aún antes de hablarse.
En algunos casos, en el momento en que dos personas se conocen, se despierta un interés mutuo y
se desata de súbito un mecanismo de seducción. Hay sugestiones, lenguaje corporal, miradas y
otras conductas que pasan por cambios en la piel (sonrojo), alteración del pulso, en los olores del
cuerpo y cambios de actitudes en la forma de ser de cada uno. Conductas y procesos que son, tanto
animales, biológicos, químicos y psicológicos, como procesos humanos estratégicos, cognitivos,
donde interviene el pensamiento y la plena conciencia.
La química del amor
¿Será verdad aquello de que lo nuestro es pura química...? Pues, las investigaciones de los
psicólogos evolucionistas americanos, apuntan en esa dirección.
El amor, en sus estelares momentos iniciales, se manifiesta como una atracción que reúne una serie
de características que tienen que ver con la bioquímica del organismo. Una sustancia en nuestro
cerebro denominada feniletilamina obliga la secreción de la dopamina o la norepinefrina, que por
sus efectos se parecen a las "anfetaminas", las cuales producen un estado de euforia natural
cuando estamos con nuestra pareja.
El código genético del amor
En esta etapa inicial del amor, actúan decodificadores genéticos que marcarían las fases iniciales
descritas. El imperativo genético de la ley de conservación de las especies, obliga a los animales
machos a procurar sembrar su semilla en el mayor número de hembras que pueda. Por su parte, la
hembra tratará de tener cachorros en igual proporción. De acuerdo a los psicólogos genetistas, en
el ser humano -aunque sociabilizados- esta ley también actúa. Por esta razón, se dispararían las
sustancias químicas cerebrales que generan la atracción y el deseo de estar juntos. Significa
entonces, que el amor surge como una necesidad de conservación de la especie humana. El fin
último que se perseguiría de la atracción sexual, sería el de procrear.
3. Manu Sofi Amigas
Para La Vida
Sofia y maria AL VUELO
if I loose
my self
tonight
COMIDA
CHATARRA
FRUTAS
VERDURAS
CANE PESCADO
CEREALES Y PANES
DE SIMPRE
AMIGAS
manu
popi