El resumen del documento en 3 oraciones o menos es:
El documento narra la historia de dos detectives, Alex y Adam, que investigan el extraño
comportamiento de su compañero John y descubren que ha estado recolectando información
sobre un grupo criminal llamado "la medicina". Mientras intentan averiguar más, Alex es
capturado por el líder de este grupo y sometido a diversas pruebas y amenazas.
3. Capítulo 1:
El descubrimiento
*TOC TOC TOC*
—Parece que no está— Le decía a mi compañero Adam cuando llegamos a un punto crítico en la
investigación que hacíamos sobre uno de nuestros compañeros llamado John.
A John lo habían puesto a cargo de un caso sobre lo que parece ser un asesino en serie, pero
ciertos hechos nos han hecho pensar que en realidad él es el asesino, y claro, todos somos
detectives, si en serio él es el asesino, explicaría por qué nadie tiene una idea de cómo atraparlo,
sabe que hacer para no ser capturado.
—Tendremos que derribar la puerta, ya no tenemos tiempo— Me había dicho Adam, entrar sin
permiso ya no importaba, de todas formas estábamos seguros que nuestro próximo ex-
compañero era el asesino.
—Una, dos, tres—
Pateamos la puerta y entramos a la casa, era un desastre a simple vista, y de inmediato nos dimos
cuenta que John no podía ser el asesino, su extraño comportamiento se debía a la obsesión que
tenía por este extraño asesino, que tal vez podría ser un asesino a sueldo, o simplemente un loco
con dinero. Entre todas las hojas y fotos que habían pegadas por todo su departamento podíamos
ver que había recopilado información que no había dicho en el trabajo, y no lo culpo, si no hubiera
visto todas las pruebas que habían ese departamento nunca le habría creído cosas como que el
asesino planeaba algo grande y que podría ser alguien que vivía en estructuras bajo la ciudad
conectadas por las alcantarillas, suena loco, pero tiene mucho material para sustentar eso y en las
oficinas jamás se hubieran puesto a leer todo eso, es claro que trabajamos para gente corrupta,
por eso esta investigación que hacíamos Adam y yo no era con permiso de nuestro jefe.
—Alex, ya te diste cuenta que no hay ninguna computadora por aquí, solo cintas de grabadoras y
hojas— Me decía mi compañero cuando vió que el reproductor de DVD de la tele estaba
trabajando pero la tele estaba apagada.
La prendió.
— ¡Hooo por Dios! — Dijimos los dos.
En la tele se podía ver a un hombre torturando a alguien, lo hacía sangrar, lo estaba mutilando
pero los dos se reían como si nunca hubieran sido más felices. Llegados a este punto ya no
entendimos bien las cosas, el video fue grabado de frente a los dos sujetos que aparecían en él,
ellos sabían que eran grabados, así que debía ser actuado, pero no sabíamos para que John
tendría algo como eso. Nos quedamos viendo el video para saber en que terminaba, pero cada
que la persona torturada iba perdiendo la conciencia por la falta de sangre, el video se repetía.
Había tanta información que estudiar que podríamos haber convertido ese lugar en nuestro
cuartel.
4. Capítulo 2:
La incitación
Nos quedamos leyendo algunas hojas y tratando de entender que hacía el video en ese
lugar, además de que en algunas grabaciones se oían una voz algo distorsionada diciendo
cosas que hay en una casa, cuando todas las demás eran datos y conclusiones de las
investigaciones de John, narradas por él mismo.
— ¡Son pistas, babosos! — Dijo alguien.
—Qué rayos fue eso—Dijo Adam, estábamos en un sexto piso por lo que nos confundió mucho oír
eso, que parecía venir de la ventana, pero fuimos a ver.
—Somos unos babosos— Le dije a mi compañero. —¿Cómo es que nunca nos dimos cuenta de
que la ventana estaba abierta? —
—Eres, la ventana acaba de ser abierta, estaba cerrada cuando llegamos— Me respondió.
—Como sea, parece que quien nos gritó no bajó, seguiría bajando por las escaleras de incendios,
así que subiremos— Y eso hicimos, pero en la azotea que nos quedaba sólo a 2 pisos no había
nadie, aunque nos dimos cuenta que los edificios alrededor de en el que nos encontrábamos
estaban lo bastante cerca para saltar hacia ellos.
— ¿Lo ves? — Pregunté.
— ¡Si, ahí va corriendo! —
— Ve por él —
—¡Cara de que me vez! Sólo un loco haría eso— Me dijo Adam.
—Me carga, le voy a dar un tiro, a ver si le atino— Entonces saqué mi pistola y apunté.
— ¡No seas tonto, nunca le atinaras con eso, ya está muy lejos! Y que rápido va, ni siquiera tiene
miedo de caerse de algún edificio, debe estar drogado— Me dijo.
—No puede ser, tan cerca y lo perdimos—
—Ni lo menciones, ese loco tiene meses causando problemas—
—Ya que, bajemos— Dije triste.
Una vez en el departamento vimos que el DVD de la persona que estaba torturando al otro sujeto
ya no estaba, en vez de eso solo había una nota pegada en el televisor.
“YA LOS VÍ, SE QUIENES SON Y ESTÁN EN EL JUEGO, PERO SOLO A UNO DE USTEDES DE DOS LE
PUEDO PROMETER DIVERSIÓN ¿QUIÉN SE SIENTE AFORTUNADO?”
Adam y yo no entendíamos nada, y mientras tratábamos nos pusimos a organizar y guardar la
información y grabaciones que nos podrían ser útiles.
Cuando ya casi terminábamos los dos recibimos una llamada.
5. Capítulo 3:
El juego
—La medicina va a ir por su jefe esta noche— Dijo el tipo que nos llamó.
Era la misma voz de las grabaciones que mencionaban las cosas que hay en una casa, que para ese
punto entendimos que en esos sitios habían notas que formaban una oración que nos pedía subir
a la azotea, lo que nos confundió más.
Y por lo de la llamada, no tenía idea de que era la medicina, pero estaba seguro de que le darían
su merecido al corrupto de nuestro jefe, aunque Adam de inmediato se dio cuenta de que lo
torturarían como lo que se veía en el video, y a nosotras también, ese video era una especia de
amenaza.
—Tenemos que ir a avisar al jefe— Me dijo Adam muy preocupado, él también sabía que el jefe es
un corrupto, pero su conciencia no lo dejaría dormir si no hacía nada, su moral le decía que no
podía dejar que alguien muriera si podía evitarlo, yo en cambio, por tratarse del jefe, prefería no
hacer nada, a largo plazo, sin un jefe corrupto a cargo de todos nosotros, podríamos terminar los
casos y resolver los más importantes.
—Está bien, vamos—
Al llegar, Adam fue corriendo a avisarle al jefe, yo me fui al baño sin que me viera, y apagué mi
teléfono, no sé si trató de buscarme o si entendió que yo no pensaba ayudar.
Al pasar media hora decidí salir del baño, Adam y algunos policías se habían llevado al jefe a algún
lugar seguro. Como el jefe se había ido, entré a su oficina para ver si tenía algo de información
importante sobre esto que sucedía y lo que creíamos que era un simple asesino, entonces vi que
en su escritorio tenía fotos de Adam y yo parados en la azotea del edificio donde vivía John, y fotos
de él mismo y su familia. Sólo eso, y la poca e incompleta información que había entregado John
sobre su caso.
Cuando me iba a ir a mi casa me detuvo una compañera que me dijo que Adam me estaba
buscando, que prendiera mi teléfono, él tenía que hablar conmigo, así que tuve que encender mi
teléfono otra vez, y me dijo que se habían ido a una casa que tenía el jefe fuera de la ciudad, y que
creía que ya los habían encontrado, me dijo como llegar y fuí, sabía que no tendría caso si llegaba
y entraba, así que me quedé un poco lejos, sólo para observar desde afuera si había algo
sospechoso.
Estuve un rato, yo me quería ir así que encendí el coche y en ese momento se reventaron todas las
llantas, el estruendo fue tan fuerte que me ensordeció y en cuanto traté de huir me caí, sólo
recuerdo que comenzaron a oírse disparos antes de perder la conciencia.
6. Capítulo 4:
Diversión
Cuando desperté estaba en una especie de calabozo, apestaba a caño, y vi muchas personas locas
enjauladas, gritaban, se mordían, reían, lloraban, sentía que de solo estar ahí me iba a volver loco.
Yo no estaba enjaulado, así que comencé a caminar, de la impresión olvidé por completo que
podía hablar por teléfono, o tomar fotos o video, y así estuve caminando un rato hasta que vi
muchos cables y computadoras, y algunos utensilios que utiliza un médico, entre ellos vi un
teléfono y se me ocurrió usar el mío, de inmediato me di cuenta de que mi teléfono estaba entre
esos utensilios.
Alcancé a oír una pisada detrás de mí y me volteé sólo para recibir un garrotazo en la cara, al
menos pude meter las manos y no quedé inconsciente, y de inmediato me di cuenta de que la
persona que me atacaba era el mismo tipo que aparecía en el video de la tortura, y de la misma
forma, el tipo se estaba riendo como loco.
—Mira, te va a tocar divertirte, pero a tu amigo no—
En ese momento me preocupé por Adam, me sentí mal por no haber ayudado desde el inicio.
Y volví a recibir un garrotazo, pero ahora por la espalda. Caí inconsciente.
Desperté esposado a una tubería, y enfrente de mí había una tele, en ella se transmitía en vivo el
enfrentamiento que tenían los policías y otras personas que no entendía quienes eran.
Junto al televisor estaba mi teléfono, listo para llamar a la estación de policías, y a un lado un
mapa con mi supuesta ubicación, y lo peor es que junto a mí había una segueta.
—Sabes lo que tienes que hacer— Me dijo el tipo loco y se fue.
Lo primero que se me ocurrió fue cortarme la mano para quedar libre y llamar por teléfono,
supongo que eso fue por tanto ver películas, no creo estar tan enfermo. Al final, con la segueta
pude jalar el teléfono y el mapa, realmente no estaban tan lejos las cosas. Decidí llamar y comenté
que me encontraba atrapado junto a un buen número de personas, dudo que me hubieran creído
si decía que estaba esposado y con teléfono, o que les hubiera importado mucho si decía que
estaba solo yo y un montón de locos.
—¡Qué buscas! — Le grité al tipo loco.
—Divertirme— Me susurró, no supe de donde venía su voz.
Seguí mirando la tele, habían llegado más refuerzos de la policía, pero al parecer el otro grupo de
personas estaba mejor armado, tenían armas de uso militar como lanzacohetes.
La verdad era entretenido mirar eso, tantos policías y próximamente soldados, contra un pequeño
grupo de vándalos.
Después de un rato llegó el grupo de policías y creo que hasta bomberos que nos iban a rescatar.
7. Capítulo 5:
La verdad
Cuando llegó todo el grupo de rescate todo el lugar empezó a retumbar, de los pasillos empezó
salir mucho polvo, y algunas partes del lugar comenzaron a venirse abajo, las personas del grupo
de rescate se alteraron, los que pudieron mantener la calma se colocaron en zonas seguras, listos
para un derrumbe, y en eso el hombre que me había capturado apareció vestido de policía.
—¿Y te dijo algo? —
—Creo que me dijo “La medicina no es nombre de una sola persona” o algo así. —
—¿Y a que crees que se refiera?—
—A que la medicina es un grupo de personas lideradas por algún loco, pero quiero saber algo,
antes de que el loco me pusiera la mesa de metal de la tele encima y el lugar se viniera abajo,
alcancé a ver que la casa de mi jefe voló en pedazos, igual que varios sitios alrededor de donde
estaban acorralados los vándalos, ¿Eso pasó o me lo estoy imaginando? —
—Eso pasó, entonces eso es todo lo que recuerdas del día de hoy—
—Si—
—No te acuerdas de la cara de quien te capturó ni sabes en qué momento llegó el segundo equipo
de rescate—
—No—
—Muy bien, ¿y te divertiste? —
—¿Perdón? —
—Si todavía no te has divertido no te preocupes, que todavía no comienza lo bueno—
—¿Quién se supone que eres? —
—Extraoficialmente, el jefe de la medicina en este sitio, ¿creíste que de verdad soy un rescatista?
¿Crees que tengo potencial para hacerme pasar por alguien más?—
—Que enfermo ¡Ayuda, este no es un policía de verdad, me está amenazando!-
—Eres un cobarde, bueno, me voy, pero te prometo que te vas a divertir como nunca en unos
días, hasta luego—
8. El no se va a ir así nada más, pero siento que no tengo fuerza para nada, y el corre como si no
fuera humano, esos rescatistas no lo van a alcanzar, mejor aprovecho para dormir que pronto ya
no podré por lo que veo, ya que, va a escapar, al menos por ahora. Ahora tengo que saber quien
es en realidad, y solo.