El sábado enseñaré | Lección 11 | Vivir por fe | Escuela Sabática

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El sábado enseñaré...
Textos clave: Proverbios 28:4, 5, 7 al 9; 29:13.
Enseña a tu clase a:
 Saber: Reconocer el valor del consejo práctico de Proverbios, que está basado en
el temor de Jehová.
 Sentir aprecio por el valor del consejo práctico de Dios, reconociendo su
orientación y su valor, y la bendición de la obediencia.
 Hacer: Andar en los preceptos divinos, alabando a Dios por su amor y su consejo
sobre cómo vivir en un mundo pecaminoso.
Bosquejo de la lección:
I. Saber reconocer la calidad excepcional de los Mandamientos y leyes de Dios
 A. ¿Por qué algunos cristianos creen que las leyes divinas restringen su libertad?
B. ¿Por qué es difícil pensar en las leyes de Dios como una bendición? ¿Cómo
podemos cambiar nuestro modo de pensar, para verlas como las bendiciones que
realmente son?
II. Sentir: Reconocer el error de la cultura moderna en cuanto a procurar pasar por
alto las leyes divinas
 A. ¿Cómo se puede compartir el Decálogo de modo que se lo atesore y respete?
 B. Algunas tradiciones cristianas creen que la Ley fue eliminada en la cruz. ¿Cuál
es la mejor manera de neutralizar ese malentendido?
III. Hacer: Tener una motivación nueva para vivir alegremente siguiendo la
instrucción divina
 A. “Jehová, no retengas de mí tus misericordias; tu misericordia y tu verdad me
guarden siempre” (Sal. 40:11).
 B. ¿Cómo lograr la actitud del salmista, que entendió que la misericordia y la
verdad de Dios no se contradicen?
 C. ¿Dónde puedo encontrar el valor y la fortaleza para aferrarme a mi fe, cuando
todo en la vida parece estar en contra de mí?
Resumen: Las leyes y la sabiduría de Dios están vinculadas, en Proverbios, como la guía
para la vida. La sabiduría más elevada ocurre al someternos a la voluntad de Dios.
Ciclo de aprendizaje
Texto destacado: Proverbios 28:4, 5.
Concepto clave para el crecimiento espiritual: Mucho del pensa- miento moderno sugiere
que ser “realista” significa avanzar (“progresar”) más allá de las limitaciones anticuadas
de la Palabra de Dios. El rey Salomón no estaría de acuerdo con esto. Él insiste en que el
único progreso real que puede hacer una persona en la vida es cuando acepta el consejo
de las Escrituras y, con la ayuda de Dios, vive según ella.

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{ 1: ¡Motiva!}
• Solo para los maestros: Proverbios es un libro de instrucciónes acerca de los problemas
críticos en la vida diaria, expresadas con la premisa de que el temor de Jehová es la
sabiduría más elevada, que comienza con someterse a Dios. Este libro brinda una dosis
detallada de vida real.
Actividad inicial: Analiza por qué la Palabra de Dios es necesaria para tener sabiduría,
cuando hay tantos libros de auto ayuda disponibles.
Considera: La Palabra de Dios es el código original para la salud y la felicidad; un
modelo de vida para las criaturas que creó a su imagen. De este modo, la vida funciona
mejor en armonía con ella. Repasa en Proverbios la cantidad de versículos que enaltecen
los principios de la salud.
{ 2: ¡Explora!}
• Solo para los maestros: Estudia Proverbios 28: 4, 5 y 7 al 9; y 29:13.
Comentario de la Biblia
I. Importancia de la Ley divina
(Repasa, con tu clase, Prov. 28:4.)
En contra del pensamiento moderno que ofrece sabiduría en forma independiente de Dios,
el libro de Proverbios menosprecia las limitaciones del conocimiento humano, y aun
advierte en contra de confiar en la sabiduría propia. En cambio, insiste en la necesidad de
la revelación divina.
“Los hechos claros de la vida, que expulsan de nosotros, a golpes, algo de la tontera, son
los hechos de Dios y la escuela del carácter que él designó; no son alternativas de su
gracia, sino medios para ella; pues todo es por gracia, desde el poder de conocer hasta el
poder de obedecer. ‘El oído que oye, y el ojo que ve, ambas cosas igualmente ha hecho
Jehová’ (20:12) [...].
“Todos van a la escuela de Dios [...] porque el conocimiento que él quiere instilar es el
conocimiento de sí mismo; y esto, también, es el premio final. Solo en sumisión a su
autoridad y majestad (es decir, en el temor de Jehová) comenzamos y continuamos
nuestra educación; y por la búsqueda diligente de sabiduría como a ‘un tesoro escondido’
(2:4, NVI) hallaremos nuestro premio en una creciente intimidad con el mismo Dios [...]
Pues la meta es: ‘Entonces entenderás el temor de Jehová, y hallarás el conocimiento de
Dios’ (2:5)” (Derek Kidner, The Proverbs, p. 35).
Considera: ¿Cómo nos enseña la Ley de Dios que Dios es amor? ¿Por qué la Ley, a
menudo, puede parecer como una “camisa de fuerza”? Tal vez, si pudiéramos memorizar
el Decálogo entero, incluyendo las primeras palabras de Dios (“Yo soy Jehová tu Dios,
que te saqué de la tierra de Egipto, de casa de servidumbre” [Éxo. 20:2]), nos recordaría
¡que la salvación apareció antes de la Ley! ¡No guardamos la Ley para ser salvos! Dios
dio el Decálogo a un pueblo que había sido redimido de la esclavitud.
Dios mismo enunció la Ley desde el Monte Sinaí, y eso debería demostrarnos su
preocupación por nuestro bienestar. Moisés sugiere esto: “Y nos mandó Jehová que

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cumplamos todos estos estatutos, y que temamos a Jehová nuestro Dios, para que nos
vaya bien todos los días, y para que nos conserve la vida, como hasta hoy” (Deut. 6:24;
la cursiva fue añadida). No es extraño que el salmista cantara: “¡Oh, cuánto amo yo tu
ley! Todo el día es ella mi meditación” (Sal. 119:97).
II. Buscar al Señor
(Repasa, con tu clase, Prov. 2:1-9.)
Quienes menosprecian o rechazan la Ley de Dios pierden el compañerismo con él. Para
nosotros, la Ley es una guía para tener una relación con él y para mantener familias y
amistades sanas y felices, pues proporciona principios de largo alcance acerca del bien y
del mal. Proverbios no valida la sabiduría humana; no hay espacio para dudar de los
absolutos divinos. Dios sabe absolutamente, porque su conocimiento es completo.
El conocimiento humano se enriquece al meditar en los asuntos divinos. Dios se ha dado
a conocer en su Palabra y por medio de Jesucristo. Los autores bíblicos, con regularidad,
alaban la perfección y la confiabilidad de la revelación de Dios:
David: “Las palabras de Jehová son palabras limpias, como plata refinada en horno de
tierra, purificada siete veces. Tú, Jehová, los guardarás; de esta generación los preservarás
para siempre” (Sal. 12:6, 7). “La ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma; el
testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al sencillo. Los mandamientos de Jehová son
rectos, que alegran el corazón; el precepto de Jehová es puro, que alumbra los ojos” (Sal.
19:7, 8).
Moisés: “Porque este mandamiento que yo te ordeno hoy no es demasiado difícil para ti,
ni está lejos [...] Porque muy cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón, para
que la cumplas. Mira, yo he puesto delante de ti hoy la vida y el bien, la muerte y el mal;
porque yo te mando hoy que ames a Jehová tu Dios, que andes en sus caminos, y guardes
sus mandamientos, sus esta- tutos y sus decretos, para que vivas y seas multiplicado”
(Deut. 30:11, 14-16).
Jesús: “El que tiene mis mandamientos, y los guarda, ese es el que me ama; y el que me
ama, será amado por mi Padre, y yo le amaré, y me manifestaré a él” (Juan 14:21).
“Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad” (Juan 17:17).
Considera: Si no se acepta el conocimiento de Dios, ¿qué otras fuentes de conocimiento
existen? La alternativa es depender de la comprensión humana, depravada y finita. Según
Proverbios, el punto de partida de la sabiduría real es la revelación de Dios: “Porque
contigo está el manantial de la vida; en tu luz, veremos la luz” (Sal. 36:9); “El principio
de la sabiduría es el temor de Jehová” (Prov. 1:7); “No seas sabio en tu propia opinión;
teme a Jehová, y apártate del mal; porque será medicina a tu cuerpo, y refrigerio para tus
huesos” (Prov. 3:7, 8); El temor del hombre pondrá lazo; mas el que confía en Jehová
será exaltado” (Prov. 29:25).
III. Amar la verdad
(Repasa, con tu clase, Prov. 14:34; 1:2-5.)
Proverbios aplica el consejo divino en diferentes situaciones; es un libro de verdadera
educación. No se exalta el conocimiento o la cultura humanos, porque la sabiduría
verdadera proviene de Dios. Si se lo obedece y honra, las familias, los negocios y los
gobiernos estarán bien: “La justicia engrandece la nación; mas el pecado es afrenta de las
naciones” (Prov. 14:34). Proverbios da instrucción práctica sobre cómo vivir mejor una
vida disciplinada y prudente. Pero, muchos se burlan de la posibilidad de una verdad
absoluta. Salomón lo reconoció: “Para entender sabiduría y doctrina, para conocer
razones prudentes, para recibir el consejo de prudencia, justicia, juicio y equidad; para
dar sagacidad a los simples [...] oirá el sabio, y aumentará el saber, y el entendido

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adquirirá consejo” (Prov. 1:2-5). Y la sumisión a Jehová es el punto de partida: “El
principio de la sabiduría es el temor de Jehová; los insensatos desprecian la sabiduría y la
enseñanza” (vers. 7).
Considera: Así como en Proverbios, Deuteronomio da mucha orientación práctica junto
con su invitación a amar y temer a Dios. ¿Qué nos enseña esto acerca del verdadero Autor
de la Biblia?
{ 3: ¡Aplica!}
• Solo para los maestros: En las sociedades seculares, la falta de fidelidad a Dios causa
enormes problemas, ya que pueden sentir un placer malicioso en el desobedecer y en la
violencia. Analiza por qué sucede esto. ¿Hay algo que pueden hacer para neutralizar estas
tendencias prevalecientes?
Preguntas para reflexionar:
 1. ¿Cómo puede nuestra devoción a Dios y a su Palabra neutralizar estas
tendencias negativas, tan fuertes en la sociedad?
 2. ¿De qué modo los medios de comunicación, sutilmente, glorifican estilos de
vida cuestionables?
 3. ¿Por qué debemos recordar que la forma en que se tratan los miembros de la
familia es la verdadera señal de un creyente genuino?
{ 4: ¡Crea!}
• Solo para los maestros: Orar en el nombre de Jesús es más que mencionar su nombre
al principio y al final de una oración. Es orar con la mente y el espíritu de Jesús, mientras
creemos en sus promesas, dependemos de su gracia y realizamos sus obras.
Actividad: ¿Cuál es la verdadera razón por la que Jesús no regresó todavía? A menudo
se dice que es porque el evangelio no se ha predicado en todo el mundo todavía. Elena de
White da una perspectiva diferente: “Si nos humilláramos delante de Dios, si fuéramos
bondadosos, corteses, compasivos y piadosos, habría cien conversiones a la verdad donde
ahora hay una sola. Pero aunque profesamos estar convertidos, llevamos con nosotros un
atado de egoísmo que consideramos demasiado precioso para desecharlo. Es nuestro
privilegio depositar esta carga a los pies de Cristo y tomar, en su lugar, el carácter y la
semejanza de Cristo. El Salvador está esperando que lo hagamos [...].
“Aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras
almas’ (Mat. 11:29). ¿Por qué no aprendemos diariamente del Salvador? ¿Por qué no
vivimos en constante comunión con él, para que en nuestro trato unos con otros podamos
hablar y actuar bondadosa y cortésmente? ¿Por qué no honramos al Señor manifestando
ternura y amor unos por otros? Si hablamos y obramos en armonía con los principios del
Cielo, los incrédulos serán atraídos hacia Cristo mediante su asociación con nosotros” (TI
9:152, 153).
Piensa en formas prácticas en que puedes mostrar la bondad y la cortesía de Cristo más
plenamente en tus interacciones diarias con otros.