2. Los orígenes
En el sexto año del reinado de Isabel I de Inglaterra, el 26 de abril
de 1564, fue bautizado William Shakespeare en Stratford-upon-
Avon, un pueblecito del condado de Warwick que no sobrepasaba
los dos mil habitantes, orgullosos todos ellos de su iglesia, su
escuela y su puente sobre el río. Uno de éstos era John
Shakespeare, comerciante en lana, carnicero y arrendatario que
llegó a ser concejal, tesorero y alcalde. De su unión con Mary
Arden, señorita de distinguida familia, nacieron cinco hijos, el
tercero de los cuales recibió el nombre de William. No se tiene
constancia del día de su nacimiento, pero tradicionalmente su
cumpleaños se festeja el 23 de abril, tal vez para encontrar algún
designio o fatalidad en la fecha, ya que la muerte le llegó,
cincuenta y dos años más tarde, en ese mismo día.
Así, pues, no fue su cuna tan humilde como asegura la crítica
adversa, ni sus estudios tan escasos como se supone. A pesar de
que Ben Johnson, comediógrafo y amigo del dramaturgo, afirmase
exageradamente que "sabía poco latín y menos griego", lo cierto
es que Shakespeare aprendió la lengua de Virgilio en la escuela
de Stratford, aunque fuera como alumno poco entusiasta,
extremos ambos que sus obras confirman. La madre provenía de
una vieja y acomodada familia católica, y es muy posible que el
poeta, junto con sus dos hermanos y una hermana, fuese
educado en la fe de su madre.
4. Sin embargo, no debió de permanecer mucho
tiempo en las aulas, pues cuando contaba trece
años la fortuna de su padre se esfumó y el joven
hubo de ser colocado como dependiente de
carnicería. A los quince años, según se afirma, era
ya un diestro matarife que degollaba las terneras con
pompa, esto es, pronunciando fúnebres y floreados
discursos.
A los dieciocho años hubo de casarse con Anne
Hathaway, una aldeana nueve años mayor que él
cuyo embarazo estaba muy adelantado. Cinco
meses después de la boda tuvo de ella una hija,
Susan, y luego los gemelos Judith y Hamnet. Pero
Shakespeare no iba a resultar un marido ideal ni ella
estaba tan sobrada de prendas como para retenerlo
a su lado por mucho tiempo. Los intereses del poeta
lo conducían por otros derroteros antes que camino
del hogar.
5. Según la leyenda, en 1586 fue
sorprendido infraganti cazando furtivamente.
Nicholas Rowe, su primer biógrafo, escribe:
"Por desgracia demasiado frecuente en los
jóvenes, Shakespeare se dio a malas
compañías, y algunos que robaban ciervos lo
indujeron más de una vez a robarlos en un
parque perteneciente a sir Thomas Lucy, de
Charlecote, cerca de Stratford. En
consecuencia, este caballero procesó a
Shakespeare, quien, para vengarse, escribió
una sátira contra él. Este acaso primer ensayo
de su musa resultó tan agresivo que el
caballero redobló su persecución, en tales
términos que obligó a Shakespeare a dejar sus
6.
7. De las obras de Shakespeare, creadas en una
época de transición en el teatro isabelino, habría que
destacar casi todos sus títulos. Sus obras han sido
interpretadas y adaptadas en innumerables
ocasiones y son todavía hoy representadas y
consideradas como fuente de inspiración. Quizá, si
hubiera que elegir, habría que señalar Romeo y
Julieta, El rey Lear, Hamlet, Macbeth o Julio
César, entre las tragedias, y El sueño de una
noche de verano, El mercader de Venecia, La
tempestad o La fierecilla domada, entre las
comedias. También habría que dedicar especial
atención a sus recreaciones históricas,
como Enrique VIII oRicardo III, entre otras.
En el campo de la poesía, Shakespeare celebra el
amor con sus versos. Versos, destacando
especialmente su serie de Sonetos o en Venus y
Adonis. La mayor parte de sus poemas han sido
antologados con criterios en ocasiones arbitrarios.
10. Muerte de William
Shakespeare.
Shakespeare falleció el 23 de abril de 1616. Estuvo casado con
Anne hasta su muerte, y le sobrevivieron dos hijas, Susannah y
Judith. La primera se casó con el doctor John Hall. Sin embargo, ni
los hijos de Susannah ni los de Judith tuvieron descendencia, por lo
que no existe en la actualidad ningún descendiente vivo del escritor.
Se rumoreó, sin embargo, que
Shakespeare era el verdadero padre de su ahijado, William
Davenant.
Siempre se ha tendido a asociar la muerte de Shakespeare con la
bebida, —murió, según los comentarios más difundidos, como
resultado de una fuerte fiebre, producto de su estado de
embriaguez—. Al parecer, el dramaturgo se habría reunido con Ben
Jonson y Michael Drayton para festejar con sus colegas algunas
nuevas ideas literarias. Investigaciones recientes llevadas a cabo por
científicos alemanes6 afirman que es muy probable que el escritor
inglés padeciera de cáncer.
Los restos de Shakespeare fueron sepultados en el presbiterio de la
iglesia de la Santísima Trinidad (Holy Trinity Church) de Stratford. El
honor de ser enterrado en el presbiterio, cerca del altar mayor de la
iglesia, no se debió a su prestigio como dramaturgo, sino a la
compra de un diezmo de la iglesia por 440 libras (una suma
considerable en la época). El monumento funerario de