2. LAVAR, PEINAR Y
SECAR
Al momento de lavarlo trátalo con
delicadeza. Masajeando suavemente
con las yemas de los dedos sobre
tu cuero cabelludo.
Enjuagarlo con agua fría es un
truco ya que proporciona brillo.
Al secarlo solo envuélvelo con una
toalla para que absorba la
humedad.
Desenrédate el cabello con cuidado
para que no se rompa trata de
3. UN BUEN CORTE DE
CABELLO
Tu cabello necesita sentirse vivo por lo
general debes visitar una peluquería
cada dos meses y cortarte las puntas
para que así crezca con fuerza.
4. CONCEJO PARA LAS
ORQUILLAS:
Para quitar la horquilla recoge tu cabello a
la altura de la coronilla y aplica aceite de
oliva un poco más arriba de las puntas, y
cúbrelo todo el cabello con un gorro. Deja
que actué el aceite por la noche y al otro
día lávatelo con shampoo. Repite el
proceso una o dos veces a la semana.
5. De igual manera, hay que tener un cuidado
especial al momento de secar el cabello.
Luego de escurrirlo suavemente, hay que
envolverlo con la toalla por un par de
minutos y peine de cerdas gruesas, frotar
con la felpa- estirarlo para pasarle un Y en
la medida de lo posible, evitemos usar la
secadora porque el calor excesivo también es
un agente dañino.
6. CABELLO GRASO
Si el cabello es muy graso es vital
tratarlo con suavidad. Usa un producto
suave de uso frecuente con otro
específico para pelo graso. En el lavado
del cabello no frotes en exceso ni uses
productos agresivos, aclara con agua
tibia. También te ayudará reducir la
cantidad de grasas en tu dieta.
La lechuga es la solución más natural y
efectiva para combatir el exceso de grasa
en tu pelo. Hierve unas hojas de lechuga
en un litro de agua y enjuaga tu cabello
con esto después de lavarlo. Realiza este