El documento describe a los testigos de la vida y resurrección de Jesús, incluyendo a sus padres, amigos, apóstoles y seguidores. Explica que los apóstoles recibieron el Espíritu Santo en Pentecostés y comenzaron a predicar el mensaje de Jesús y dar testimonio de su resurrección. También señala que los cristianos actuales dan testimonio de Jesús a través de la participación en sacramentos como la Eucaristía, la oración, el estudio de la Biblia y la expresión pública de su fe.