El documento propone cuatro pilares para el desarrollo de Argentina: 1) integración de la estructura económica, 2) integración de las economías regionales, 3) trabajo para la inclusión social, y 4) educación para la igualdad de oportunidades. También describe las características de un país desarrollado frente a uno subdesarrollado y propone atraer inversiones a través de incentivos, estabilidad normativa, y grandes proyectos de infraestructura para generar empleo y promover el desarrollo.