Resumen de la tesis... para la defensa de la tesis

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UNIVERSIDAD PONTIFICIA SALESIANA
Departamento de Pastoral Juvenil
Facultad de ciencias de la Educación
EL AMOR REDENTOR COMO EXPERIENCIA
TRANSFORMATIVA PARA LOS JÓVENES
COLOMBIANOS
Integraciónde la pedagogíaliberadora de Paulo Freire en
la Pastoral Juvenil Vocacional Redentorista
Estudiante: PUERTO PATIÑO Héctor Eymard (19110E)
Relator: PANDOLFI Luca
Roma, 2016

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1. Título: El amor redentor como experiencia transformativa para
los jóvenes colombianos. Integración de la pedagogía liberadora de
Paulo Freire en la Pastoral Juvenil Vocacional Redentorista.
2. Motivación: La tesis se anima en el deseo de integrar el carisma
de la Congregación del Santísimo Redentor, con la propuesta educativa
liberadora del CELAM en su documento de “Civilización del Amor.
Proyecto y misión”, desde las potencialidades de la juventud
colombiana.
3. Problema afrontado: La Redención, es entendida como «el amor
sin medida de Dios», que en la pascua de Cristo y con la efusión del
Espíritu Santo, pone en marcha una dinámica de libertad que apunta
hacia una nueva creación1. En ésta dinámica la pedagogía crítica-
liberadora de Paulo Freire se encuentra en el camino de la Redención
porque ella ayuda a desarrollar las propias fuerzas político/educativas
del joven, del pastoralista/educador y de la institución que lo acoge en
pro de la realidad y el misterio de la vida. Si la teología (como
espiritualidad) y la pedagogía (como arte de liberación) tienen en
común el crecimiento de la persona, la Redención amorosa de Dios, en
la primera, y el sentido de la crítica, en la segunda, despiertan, afloran y
abren el sentido político, dialógico y ético en el joven de una manera
integral.
4. Objetivo: Estudiar y analizar a nivel teológico/pastoral la posible
integración e interacción fecunda entre el carisma de la Congregación
del Santísimo Redentor y la propuesta educativa liberadora de Freire, en
el contexto de la juventud colombiana.
5. Método: El método teológico, empírico-crítico y proyectual fue el
camino asumido para interpretar los elementos constitutivos de la
práctica en su devenir concreto, articulados en un entramado rico y
1 Cf., Citas 22, 23; pp 77, 78.

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coherente. La opción vocacional de fe, al estilo de Jesús, ilumina el
desarrollo teológico de todo el trabajo en tres momentos:
Primero, el momento descriptivo pidió iniciar en la experiencia o
práctica vigente para re-proyectarla y acompañarla en su renovación;
fue una descripción histórica y empírica donde se comparó el horizonte,
la historia y la pedagogía de los documentos del CELAM2:
“Civilización del Amor” de 1993 y 20123. Dentro de este cuadro
latinoamericano se observó, por medio de entrevistas a los
protagonistas4, la integración cualificada en la historia de la PJVR-C5 a
este llamado vocacional a construir la civilización del amor redentor en
la gran Patria Grande; un proceso al que los mismos responsables
llaman “del entusiasmo a la fascinación”.
El segundo, el momento criteriológico, como labor crítico-
hermenéutica, que interpreta y valoriza la situación dada desde criterios
interdisciplinariamente logrados, propuso una matriz interpretativa de la
realidad por medio de la teología bíblica de la Redención y de la
pedagogía de Freire. El Go’el marcará la pauta de liberación en la
historia nacional y personal de los judíos y en la experiencia de
cumplimiento mesiánico de los cristianos. Es en esta liberación del
amor desbordante de Dios, en la humanidad de Jesús, donde se encarna
el carisma, la teología moral y la pastoral popular de la Congregación
del Santísimo Redentor. La decisión de liberar y salvar por Amor se
encuentra con el reto antropológico actual de auténticos vínculos
humanos en las relaciones sociales, ella ilumina la naturaleza dialógica
de la persona y dicho sentido de liberación abarca las decisiones
vocacionales/políticas de fraternidad (Freire). La redención escatológica
2 Consejo Episcopal Latinoamericano
3 Civilización del amor. Tarea y esperanza: CATyE. Civilización del amor. Proyecto y misión:
CAPyM
4 Entrevistas a quienes en la historia de esta área responsables Silvio Botero, Rafael Prada,
Ismael Rolón, Henry Alzate, Fernando Castaño, Samuel Torres y Guillermo Giraldo.
5 Pastoral Juvenil Vocacional Redentorista de Colombia.

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no puede ser leída sin el “ya” amoroso, decidido y humilde, de nuestras
estrategias educativas éticas, dialógicas y políticas.
Por último el momento proyectual estuvo dirigido a lograr una
práctica renovada y reorientada que, desde la praxis vigente, propusiera
una praxis pastoral acompañada por un camino reflexivo. Este tiempo
de la decisión-operativa se realizó a través de la iniciación,
profundización y proyección de la PJVR-C. La comunidad fraterna es la
base inicial y continua de la formación permanente, donde se
profundiza la semilla de Dios que se comunica en un campo de
relaciones compartidas y se proyecta con perfiles y competencias claras.
El método pide integrar todos los momentos desde su orientación
teológica-práctica, en nuestro caso desde la teología de la redención y
la pedagogía de la liberación. Así lo hicimos durante la ejecución de
los capítulos del trabajo, de manera dinámica y unificada, buscando
evitar fijaciones dualísticas, justificados en la capacidad crítico-
constructiva de la praxis.
Esta tarea integral, coherente y consistente al interior del trabajo la
asumimos en tres capítulos donde el joven, en la fe de Jesús Redentor,
mira el horizonte de la Civilización del Amor latinoamericano CAPyM,
desde el contexto de la Pastoral Juvenil Vocacional Redentorista de
Colombia PJVR-C (I capítulo). Luego, el centro teológico redentor, se
encuentra con la pedagogía crítica de la liberación de Freire como
potenciación del proceso educativo6 en la ética ecológica, con la
capacidad de realizar diálogos por la paz y con el sentido político de
liberación en la pedagógica vocacional (II capítulo). Lo cual llevó a que
la misma comunidad juvenil fuese “ya” una propuesta de humanización,
que motivada por el Evangelio, proyecta la redención liberadora para el
joven en etapas (III capítulo). La experiencia de fe en Jesucristo busca
canales para educarse e incidir con mayor profundidad en la misma
experiencia.
6 Joven, comunidad y agentes de pastoral

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6. Conclusiones:
- Durante mis estudios precedentes y luego con los 33 cursos vistos a lo
largo de estos tres años he podido ejercitar un propio estilo de escritura. He
buscado que la composición gramatical de la palabra, compuesta de una trama
de relaciones internas y externas, permitan pronunciar mejor la propia palabra
sentida y anhelada.
- El patrimonio Redentorista es lleno de experiencias educativas
liberadoras. Por nombrar algunas nos referimos a Alfonso de Ligorio
con los jóvenes trabajadores en las “capillas del atardecer” en Nápoles;
Clemente Hofbahuer con los jóvenes universitarios en Viena; Juan
Newman que desde Filadelfia promovió la creación de más de 70
escuelas en Norteamérica. De la misma manera la Provincia redentorista
de Bogotá en la escuela, el colegio y la universidad, y en todas su obra
pastoral, tienen un “gran tesoro” para ser y convivir en la época actual
de manera profética y liberadora. Dicho baluarte educativo-redentor se
ve condensado y cualificado en el encuentro con la pastoral juvenil y la
pedagogía vocacional de la Civilización del Amor. Dicha pedagogía
tiene su fundamento en la visión freiriana. El gran reto de liberación del
carisma redentorista, de la juventud colombiana congregada en la PJVR-C,
encuentra en el pedagogo brasilero armonía para seguir profundizando.
- En medio de las dificultades y los horrores de la violencia, la
pedagogía desde la visión de Freire, ha permitido valorar tantos y
múltiples ejercicios de perdón. Las fronteras invisibles, el microtráfico
de droga, las pandillas, las luchas de poder al interno de los grupos
juveniles, etc., son síntomas de un decaimiento del espíritu donde el
hombre lucha contra el mismo hombre. Por eso hoy más que nunca la
redención, en su sentido “definitivo y final” (escatológico), nos mueve a un
proceso de liberación por amor, que se convierte en la capacidad de asumir el
direccionamiento de iniciativas humanizantes por medio de un camino que no
es solo conquista y luchas sino de dejarse habitar y acompañar.

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- Para futuros trabajos podríamos asumir la lectura pausada de las
obras más importantes de las pedagogías de Freire para relacionarlas
mejor con un proceso concreto educativo de liberación en la PJVR-C.
Es decir no solo leer a Freire a través de los ojos de otros autores, sino
desde mi propio proceso de aprehensión del autor. Podría partirse de
una lectura integral y más profunda de la “Pedagogía de la Esperanza”
en la que él mismo pedagogo intenta actualizar líneas de su obra, en
relación con la pedagogía desarrollada en Colombia y con la pedagogía
hecha en la práctica y en la reflexión cotidiana de las comunidades
juveniles redentoristas. Colombia se encuentra ante una gran oportunidad
pedagógica para promover espacios de reconciliación que puedan favorecer
relaciones sociales más humanas en armonía con el creado.
- El trabajo en equipo del presente documento es la constatación de
una educación en conjunto. Más allá del aula existen otras entidades,
grupos gestores, conductos regulares, personas delegadas, amistades,
experiencias pasadas y vividas, anhelos a futuro, la acción de Dios, etc.,
que hacen de la producción académica un resultado en común, un
campo en red. Una fraternidad humana de este tipo pide tener un lugar
de experimentación dónde reflexionar y ampliar el horizonte.
- Podemos decir7 con el Papa Francisco, cuando habla de la
dimensión social de la evangelización en Evagelii Gaudium que…
«…nuestro compromiso no consiste exclusivamente en acciones o en
programas de promoción y asistencia; lo que el Espíritu moviliza no es un
desborde activista, sino ante todo una atención puesta en el otro
“considerándolo como uno consigo” (S.T).Esa atención amante es el inicio
de una verdadera preocupación por su persona, a partir de la cual deseo
buscar efectivamente su bien. Esto implica valorar al (joven) pobre en su
bondadpropia,con suforma de ser,con su cultura,con su modo de vivir la
fe. El verdaderoamor siempre es contemplativo, nos permite servir al otro
no por necesidad o por vanidad, sino porque él es bello, más allá de su
apariencia:“Del amor porel cual a uno le es grata la otra persona depende
que le dé algo gratis”. El (joven) pobre, cuando es amado, “es estimado
7 Como en Puebla y Medellín estuvo la opción preferencial por los jóvenes y los pobres, acá
colocamos entre paréntesis esta opción juvenil.

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como de alto valor”,y esto diferencia la auténtica opción por los (jóvenes)
pobres de cualquierideología,de cualquierintento de utilizara los (jóvenes)
pobres al servicio de intereses personales o políticos. Sólo desde esta
cercanía real y cordialpodemos acompañarlosadecuadamente en su camino
de liberación.Únicamente esto hará posible que “los (jóvenes) pobres, en
cada comunidad cristiana,se sientan como en su casa. ¿No sería este estilo
la más grande y eficazpresentación de la Buena Nueva del Reino?”. Sin la
opción preferencial por los (jóvenes) más pobres, “el anuncio del
Evangelio”, aun siendo la primera caridad, corre el riesgo de ser
incomprendido o de ahogarse en elmar de palabras alque la actualsociedad
de la comunicación nos somete cada día». (No.199).
Así mismo Freire leerá su compromiso, de una manera integral y
humanizante. Recordará al hablar de su método pedagógico que…
«…no hay diálogo si no hay un profundo amor al mundo y a los
hombres. No es posible la pronunciación del mundo, que es un acto de
creación y recreación, si no existe amor que lo infunda. Siendo el amor
fundamento deldiálogo,es también diálogo.De ahíque sea,esencialmente,
tarea de sujetosy que no pueda verificarse en la relación de dominación. En
ésta, lo que hay es patología amorosa: sadismo en quien domina,
masoquismo en los dominados. Amor no. El amor es un acto de valentía,
nunca de temor; el amor es compromiso con los hombres. Dondequiera
exista un hombre oprimido,el acto de amorradica en comprometerse con su
causa.La causa de su liberación.Este compromiso,porsu carácteramoroso,
es dialógico.»8
8 P. FREIRE, Pedagogía del oprimido, México, Siglo XXI, 1983, 72. En la nota a pie de página 51
trae un pensamiento de Ernesto Guevara, obra revolucionaria, México, Era, 1967, 637-638:
«Cada vez nos convencemos más de la necesidad de que los verdaderos revolucionarios
reconozcan en la revolución un acto de amor, en tanto es un acto creador y humanizador. Para
nosotros, la revolución que no se hace sin una teoría de la revolución y por lo tanto sin
conciencia, no tiene en ésta algo irreconciliable con el amor. Por el contrario, la revolución que
es hecha por los hombres es hecha en nombre de su humanización. ¿Qué lleva a los
revolucionarios a unirse a los oprimidos sino la condición deshumanizada en que éstos se
encuentran? No es debido al deterioro que ha sufrido la palabra amor en el mundo capitalista
que la revolución dejará de ser amorosa, ni que los revolucionarios silencien su carácter biófilo.
Guevara, aunque hubiera subrayado el “riesgo de parecer ridículo”, no temió afirmarlo:
“Déjeme decirle – declaró, dirigiéndose a Carlos Quijano-, a riesgo de parecer ridículo, que el
verdadero revolucionario está guiado por grandes sentimientos de amor. Es imposible pensar en
una revolucionario auténtico sin esta cualidad».