Este documento trata sobre dos casos de hijos problemáticos descritos por sus madres. En el primer caso, una hija siempre se queja, culpa a los demás por sus problemas y no es feliz a pesar de tener una buena situación. En el segundo caso, un hijo siempre exige más de su madre, la culpa por todo y no reconoce el esfuerzo de sus padres. La autora pide consejo a sus lectores sobre cómo responder a estas madres.

1. Casa Templaria 26 marzo 2012
¡Gracias nos de Dios!
¡Felicidades Costa Rica por haber empezado con gran éxito la Casa de la
Suegra! Sólo cuesta el primer paso, continuar y recoger muchísimas,
muchísimas ganancias para el viaje a Marruecos.
¡Felicidades a todas las semillas que ya han empezado a sembrar y a
plantar en los envases de los yogures y otras a venderlos!
¡Felicidades Maribel! porque la fotografía que mande es de tu jardín
secreto y ya estás empezando a venderlas y he recibido muchísima
correspondencia con todos los proyectos y los yogures.
¡Bravo, bravísimo! otras semillas venden ropa usada, zapatos viejos,
pulseras, collares que ya no se ponen, me alegra, limpiar es remover energías y
os sentiréis felices. Este curso vale la pena, como todos, pero este es especial.
He recibido una carta pero esta es de una
madre, me expone su problema. Su hija no es
feliz y cada día hace “el elefante”, cada día.
Llora por nada, patalea, nunca está contenta
dice que no la comprende nadie, que está
injustamente tratada que siempre trabaja pero
que no tiene tiempo "¡cuantas cobranzas, me
fastidia que me digan de las cobranzas!". Nunca
llega a terminar lo que se propone o lo que le
mandan. Es guapa, bien hecha, tiene una salud de hierro y es joven. Tiene
todo para ella pero le echa siempre la culpa a los otros, la culpa siempre la
tienen los otros. Una vez porque tiene vergüenza de su madre y no quiere
recibirla en una fiesta, otra vez de sus amigas, otra vez de sus compañeros,

2. otra vez porque le dan títulos de pija que ella sabe que los tiene, pero no le
gusta oírlos ¿Que le puedo contestar a esa madre? Ayudarme!
También hay otro hijo que siempre le dice a su madre y trata a su madre
de traidora, de malvada porque su madre estima y acepta a sus amigos y a sus
amigas y él quiere ser hijo único. No lo es porque así lo eligió, tiene otro
hermano. Nunca está contento y nunca es feliz. Cada día quiere más, cada día
exige más, cada día pide lo imposible y siempre se está quejando y siempre le
echa la culpa a su madre.
No bebe ni se droga, ni fuma, solamente exige que su madre lo
contemple, lo halague, reconozca sus virtudes que hasta ahora desde hace 20
años, no quiere responsabilizarse, de tanto en tanto, cumple algunos trabajos
pero no quiere hacerlos. No quiere responsabilidad, no quiere trabajar. Por fin
esa madre ha conseguido que saque unos estudios y con esos estudios al menos
podrá trabajar. No le gusta aprender idiomas, no le gusta nada, sólo que lo
adoren y que le digan que es el mejor. No reconoce el amor de su padre que ha
trabajado toda la vida para él y ha hecho dos jornadas. No reconoce la
herencia que le dejaron, la ética de su abuelos. Sólo vive en sus miedos, en sus
ilusiones y en sus sueños. Lo quiere todo hecho y siempre responde que su
orgullo no le permite pedir ni perdón ni excusas y aunque ha tenido varias
lecciones de la vida o simplemente del Universo dice que es superior a Dios.
Mis queridas semillas ¿qué puedo responder a esa madres? Las madres
son sencillas, simples y buenas personas. Si les dicen que no sean tan egoístas
se enfadan y cuando ofenden a su padre, a sus amigos, nunca piden excusas al
contrario, esperan que se pongan a sus pies.
Conocen el amor pero siempre se sienten
abandonados, que no son queridos y como
estos hijos hay muchísimos y de todo el
planeta.
Ayudarme mis semillas amadas, darme
una respuesta por Facebook. De vuestros
consejos saldrán lecciones y esas madres os
lo agradecerán. No son jóvenes pues la mayoría tiene 40 años pasados pero
aun viven casi con los padres.
Tienen mucho mérito porque son seres de Luz y tienen muchísimas
cualidades, son muy brillantes todos pero no sé porque esa madre traidora
siempre tiene la culpa.

3. ¿Os ha pasado ya a vosotros, a vosotras? Os podría decir que es la
enfermedad del siglo, por eso os pido una respuesta o un consejo.
Es una razón por la que siempre repito lo mismo, si tenéis miedo
plantarle cara, no huyáis, plantarle cara, decir lo que pensáis. Defender
vuestra causa y veréis que el
miedo se irá.
En el rincón donde estoy
ahora han florecido tres narcisos
y los pensamientos están llenos
de color y de luz. Este es un
rincón mágico donde siempre
comparto con vosotros la paz, la
serenidad que se respira y deseo
de todo corazón que podáis
disfrutarlo un día.
Con todo mi amor,
La Jardinera.