El agua es esencial para la vida y todas las actividades humanas, por lo que debe ser valorada y conservada cuidadosamente por todos. Cada persona tiene la responsabilidad de ahorrar y usar el agua de manera responsable para evitar la contaminación, ya que esto pone en peligro la vida humana y de otros seres vivos. Además, el agua no es infinita y requiere esfuerzos de conservación y cooperación internacional.