Los animales son seres sensibles que merecen protección contra el maltrato. La protección animal busca defender los derechos de los animales al no ser torturados ni privados de sus necesidades básicas. También pretende crear conciencia sobre la adopción de hábitos que no involucren el sufrimiento de los animales, como evitar espectáculos con animales y usar pieles. La lucha por los derechos de los animales debe centrarse en defender a los más vulnerables del abuso humano.