1. Como casa abandonada

2. Después de mucho tiempo de no saber nada de ella, tuve la grata sorpresa de reencontrarme con una amiga de la infancia, por internet.

3. Tras las primeras manifestaciones de alegría y de contarnos muchas cosas, le pregunté acerca de la casa en donde crecí y que quedó abandonada, tras dejar el país.

4. Me contó que la casa se fue deteriorando poco a poco con el tiempo y el abandono y con el terremoto del 85, terminó por quedar totalmente destruida.

5. Igualmente pasó con su casa paterna, "está clausurada" me dijo, se fue cayendo a pedazos, por el abandono y los años. .

6. Esos caserones antiguos, pero firmes, que habían soportado los frecuentes temblores de esa parte de la geografía sudamericana, ¡no habían soportado la soledad!

7. Casas de las de antes, con muchas habitaciones que se llenaban de risas durante las reuniones familiares, de alegres voces cantando villancicos en Navidad, etc. Eran casas con vida y calor humano y ahora yacen sombrías y solitarias, cayéndose a pedazos, llorando su soledad.

8. Algunas personas, al igual que las casas, sienten que se derrumban cuando se sienten solas. Se sienten como una casa abandonada, con el alma clausurada.

9. Pero no hay peor abandono que el abandono espiritual. Una persona puede estar rodeada de otras personas, pero sentirse sola, porque su soledad nace de un corazón vacío de Dios.

10. Cuando una casa está abandonada y destruida por el tiempo, hay que demolerla, limpiar el terreno y construir una casa nueva allí. Si no se limpia el terreno, no puede construirse una casa nueva ni nada más en ese lugar. Lo mismo pasa con el alma humana.

11. Si en el alma humana hay soledad, es porque está lejos de Dios. La presencia de Dios cura toda soledad. Con El, nunca nos sentiremos solos ni abandonados.

12. Buscar a Dios es el remedio para todas las heridas del alma. La soledad, el abandono, la traición, etc. Quedan atrás cuando dejamos que Dios intervenga en nuestras vidas.

13. No nos permitamos terminar como una casa abandonada, con el techo hecho pedazos. La vida es corta y quizá después sea tarde para una reparación. Busca a Dios ahora, hoy es el día de reconciliarte con El.

14. Hace más de dos mil años, Dios vino a esta tierra y se hizo hombre, porque tenía un plan, una única finalidad: salvar al mundo. Todos estamos incluidos en ese plan. El quiere renovar tu alma, quiere que vivas una vida plena.

15. ¿Cuánto tiempo más quieres quedarte como casa abandonada? Acércate a Dios y El secará cada lágrima tuya, entrégale tu vida para que El la dirija. Dale el lugar que le corresponde en tu vida.

16. Aunque mi padre y mi madre me abandonen, el Señor me recibirá en Sus brazos. Salmo 27:10 Angie