El documento habla sobre la ola de inmigración a Argentina en 1910. Miles de inmigrantes, incluyendo niños, llegaban en grupos buscando una nueva vida y trabajo en América a pesar de las dificultades. Algunas familias adineradas enviaban a sus hijos a la escuela para que aprendieran español, mientras que los niños más pobres trabajaban. Los inmigrantes contribuyeron a hacer grande el país y formar parte de su cultura.