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Conceptos económicos en un bar (parte 1)
1. Conceptos económicos en un bar (Parte 1)
Julio Jose Prado
PhD(s) Business & Economics
Una revisión económicamente correcta, usando alegorías
moralmente cuestionables… por el simple gusto!
Oferta y demanda: Un hombre conoce a una mujer en un bar. Él es un galán que tiene gran físico,
dinero y en especial mucho amor para dar. Ella, acaba de salir de una relación tormentosa que la ha
dejado muy vulnerable. Él tiene amor, ella necesita amor. El mercado de la vida los junta.
Interés Individual lleva al interés colectivo: Un hombre conoce una mujer en un bar, tienen
hijos, sus hijos van a la escuela, sus hijos tienen empresas, sus empresas son exitosas y contratan
mano de obra.
Mano invisible (Smith): Un hombre conoce a una mujer en un bar, se gustan, se aman, e
intercambian amor el resto de sus vidas. Es un cuento de hadas maravilloso que parece irreal. Pero
atrás de ese intercambio hay una lucha de poderes que no vemos: dinero, trabajo, competencia,
rendimientos decrecientes en el amor, valor del intercambio, …. Hay una mano invisible que mueve
los hilos, pero el amor se equilibra ante nuestros ojos y el resultado visible es que la pareja sigue
junta después de tantos años.
Ventajas Absolutas (Smith): Un hombre conoce a una mujer en un bar, se gustan e intercambian
amor esa noche. Pero sólo esa noche, porque hay un equilibrio no sostenible en la relación. El
hombre tiene 2 cualidades en las que aventaja a la mujer: cantidad de dinero y cantidad de amor. El
tiene una ventaja absoluta sobre ella y por lo tanto hay pocos incentivos para seguir intercambiando.
Ventajas Comparativas (Ricardo): Un hombre conoce a una mujer en un bar, se gustan e
intercambian amor esa noche. El hombre reconoce que tiene más dinero y más amor que ofrecer a
la relación, pero sabe que en esas condiciones de ventaja absoluta la relación no puede continuar.
Por lo cual decide especializarse en lo que hace mejor, trabajar y conseguir dinero, dejándole a la
mujer la tarea de especializarse en proveerle amor. La relación está en equilibrio y el intercambio se
mantiene y florece (olviden los comentarios sexistas…es solo un ejemplo).
Ventajas Competitivas (Porter): Un hombre conoce una mujer en un bar, se gustan e
intercambian amor durante varios años, basados en las ventajas comparativas de cada uno. Pero,
dinero y amor no son suficientes para mantener la estabilidad de la pareja. Entran en juego variables
del entorno como la familia, los hijos, los amigos. Estas variables determinan la capacidad para
mantener vivo el intercambio cuando la competencia aparece (el gringo joven, rubio, pelo largo y
lindo auto). Para mantener la relación el hombre y la mujer deben mantener niveles más altos de
productividad en amor y en dinero que los de su competencia más cercana. No solo deben hacerlo
bien, sino hacerlo mejor que su competencia.
Teoría de los términos de intercambio desiguales (Prebisch): Un hombre rico conoce a una
mujer pobre en un bar, se gustan e intercambiar amor. Pero ese intercambio siempre será injusto
porque el hombre al ser más rico, ha sido educado en los artes del amor, tiene mejor educación, es
más productivo y por lo tanto siempre superará a la mujer en todos los aspectos. La mujer que
quiere ponerse al nivel del hombre debería destinar demasiados recursos (que no tiene) y si no se
pone al nivel de éste, entonces la relación no tendrá futuro o será injusta. A pesar de que se gustan,
el hombre y la mujer jamás deberían intercambiar amor.
2. Sustitución de importación (Singer): Un hombre nunca conocerá a una mujer en un bar y no
intercambiarán amor. Debido a que existen términos de intercambio desiguales, la mujer debe
quedarse en su casa, pues está mucho mejor sin tener amor, que expuesta al intercambio injusto
que el hombre (rico) le ofrece. Después, cuando haya logrado aprender por sí sola a amar y haya
amasado una buena cantidad de dinero que le permita tener cualidades que ofrecer a la relación,
podrá salir de su casa a buscar al hombre que ama. Pero, él ya no estará en el bar, porque se fue con
la primera rubia que estuvo dispuesta a mantener un intercambio aunque sea en condiciones
injustas.
Costo de oportunidad (Bastiat): Un hombre conoce a una mujer en un bar, se gustan pero nunca
intercambiarán amor. Ella ha ido al bar solo para despejar su mente del examen que tiene mañana.
Si decide intercambiar amor esa noche, con mucha seguridad no podrá rendir adecuadamente en el
examen. Pero sobre todo, si se enamora debe quedarse en el país, tener hijos y no podrá cumplir su
sueño de hacer su maestría en USA. El costo de la otra alternativa que debe dejar de lado para poder
estar con el hombre, es demasiado alto. Regresa a su cuarto a seguir estudiando. Nunca más se
volverán a ver pero ella hará su maestría.
Ley de utilidad marginal decreciente (Smith/Mill): Un hombre conoce a una mujer en un bar,
se gustan e intercambian amor esa noche. Les gusta tanto el intercambio, que deciden dedicar una
hora más al día al intercambio de amor. Siguen insatisfechos así que deciden seguir sumando horas
al intercambio amoroso, sin embargo llega un momento en el que la satisfacción (en el sentido
económico, claro) que otorga la siguiente hora de intercambio ya no es igual a la anterior, e incluso
puede darse el caso que esa satisfacción llegue a ser decreciente. Y para poder seguir
intercambiando amor, la pareja deberá elevar su productividad incluyendo nuevos elementos en la
relación, pero eso implica costos y sacrificios. Por lo tanto, hay un punto de equilibrio entre la
satisfacción que otorga una hora de intercambio, con el costo adicional de poder seguir
intercambiando. Cuando esos dos se igualan se ha llegado al máximo nivel de “amor” posible.
Ley de rendimientos marginales decrecientes (Von Thunen/Mill): Un hombre conoce a una
mujer en un bar, se gustan e intercambian amor. Siguen intercambiando pero deciden que para
hacer el proceso más productivo (podríamos cambiar productivo por” entretenido”) van a incorporar
una persona más en la relación. El trío se divierte, así que deciden seguir aumentando personas al
proceso productivo. Pero la cuarta persona que se junta, ya no ofrece el mismo nivel de satisfacción
al grupo. El sistema operativo “amor”, ha llegado al punto de rendimientos marginales decrecientes
en el que la incorporación de un nuevo miembro (…coincidencia no intencional) no aumenta la
productividad del sistema sino que la disminuye.
Expectativas racionales (Lucas): Un hombre conoce a una mujer en el bar, se gustan, pero antes
de intercambiar amor, cada uno analiza todas las posibles opciones que tienen, y calculan las
expectativas económicas de cada una ellas. Si el intercambio se produce es porque tanto el hombre
como la mujer, saben que no existe ninguna otra opción que maximice su satisfacción. Y por lo
tanto se puede llegar a predecir, con cierta seguridad, que las decisiones de cada pareja en ese bar,
van a ser tomadas basadas en un proceso racional y lógico, basado en sus experiencias pasadas (“me
ha ido muy mal con novias de pelo negro”), la información presente (“está bien vestida por lo que
puedo imaginar que tiene dinero”) y en un cálculo bastante acertado de lo que puede ser el futuro
(la combinación de nuestros códigos genéticos resultara en hijos sanos, bonitos y triunfadores).
Continuará algún día…
JJP