2. 1. Definición de Palabra
• La forma básica de una palabra, la que
aparece como entrada en un diccionario, se
denomina lema.
• La palabra no es la unidad mínima de
significado, es decir, no representa la menor
de las unidades en las que forma fónica y
significado se asocian de manera estable.
3. Para definir lo que es una palabra, es
necesario la combinación de varios criterios:
• Aislabilidad. Esta condición se basa en la idea de que las palabras tienen
límites fijos, y se verifica por la posibilidad de introducir pausas delante y
detrás.
• Cohesión interna.
• Esta condición recoge dos ideas básicas:
– que no es posible ni permutar los componentes internos de una palabra,
– ni introducir en su interior ningún otro elemento.
– Por ejemplo, es imposible cambiar el orden de los elementos que integran la
palabra “cierrabares”: no es posible decir “barescierra”, ni tampoco interpolar
otro material lingüístico en su interior, como “cierralosbares”.
• Movilidad posicional. Las palabras pueden ocupar posiciones distintas en
la cadena hablada, sin estar obligadas por su propia naturaleza a
permanecer en posiciones fijas.
•
4. 2. La Morfología y sus objetivos
• La Morfología es
– el estudio de las palabras,
– su estructura interna y
– los principios que rigen la configuración de dicha
estructura.
• Es decir, la Morfología permite descubrir no sólo
que en la mayoría de las palabras pueden
identificarse constituyentes menores dotados de
significado, sino que la organización interna de
estas palabras no es aleatoria, sino que está
sujeta a una lógica determinada.
5. Los objetivos centrales de la
Morfología son los siguientes:
• Identificar y caracterizar las unidades mínimas
que son relevantes para comprender la
estructura de las palabras.
• Establecer y explicar los principios que rigen la
combinación de las unidades mínimas.
– En las palabras integradas por más de un componente
mínimo hay relaciones jerárquicas entre los
constituyentes que responden a principios más
generales de organización del significado y de la
información gramatical.
6. Estos principios generales, a su vez,
tienen que ver con tres aspectos
diferentes:
– La jerarquía interna entre los diversos
componentes de las palabras.
– Las pautas productivas de formación de palabras.
– Los procesos regulares de combinación que dan
lugar a las diferentes formas de una misma
palabra (comer, comiendo, comió…).
7. Varias ventajas :
• Aporta un fundamento más para la economía del sistema
lingüístico, ya que contribuye a mantener el inventario
léxico y la creación de nuevos términos dentro de unos
límites razonables.
– Por ejemplo, si cada forma verbal de cada verbo hubiera de ser
diferente no sólo de todas las demás de ese verbo, sino de
todas las demás del resto de verbos, el léxico aumentaría de un
modo inabarcable para la mente humana.
• Proporciona una organización del léxico en clases y
paradigmas que contribuye a facilitar el almacenamiento y
la gestión por parte de los hablantes.
• Proporciona la flexibilidad necesaria para la expansión
controlada del léxico.
8. 3.Las unidades morfológicas
3.1 Palabras y morfemas
• El morfema es la mínima unidad lingüística que tiene significado.
– Existen elementos menores (los fonemas), pero éstos ya no poseen significado y no son,
por lo tanto, signos lingüísticos.
• Algunas palabras están formadas por un único morfema, como casa, mujer, desde…
– En este caso, palabra y morfema coinciden y se habla, entonces, de morfemas libres.
• Una palabra formada por más de un morfema es una palabra compleja o polimorfemática.
– Por ejemplo, desglobalización,
– pero también casas, mujeres…, ya que en ellas es posible identificar el morfema que
indica plural.
– El morfema de plural no puede utilizarse de manera independiente, por lo que se dice
que es un morfema ligado.
• En español, el plural se indica por medio de dos formas (-s y –es).
– Se trata de dos formas diferentes que expresan un mismo contenido, la pluralidad, de
modo que son variantes del mismo morfema y reciben el nombre de alomorfos.
• Cuando el contenido del morfema es de tipo conceptual se denomina morfema léxico, como
en la palabra “globalización”,
– el morfema “glob-“.
– Cuando es de tipo más abstracto, se habla de morfemas gramaticales, como –s, des-, -
izar, -ción.
9. 3.2 La jerarquía de los morfemas en el interior
de la palabra
• En las palabras complejas, los morfemas no se
combinan unos con otros por simple
suma, sino que lo hacen de manera
organizada:
– no están todos al mismo nivel y se establecen
entre ellos relaciones jerárquicas
• es decir, relaciones de dominio y de precedencia.
10. En“desglobalización”, podemos
observar los siguientes casos:
• “des”: es un morfema ligado que se antepone a otros
morfemas.
– Un morfema ligado que precede a un morfema léxico es un
prefijo.
• “ción”: es un morfema que se pospone a otro morfema.
– Un morfema ligado que se añade a un morfema léxico es un
sufijo.
• “izar” también es un sufijo.
– Sufijos y prefijos son dos casos particulares de una categoría
más particular, la de los afijos.
– Los afijos son morfemas ligados que se añaden a bases léxicas.
• “al” también es también un sufijo.
• Por último, la raíz de la palabra es “glob”, a la que se van
uniendo progresivamente los sufijos y los prefijos.
11. 4. Los procesos morfológicos
4.1 La formación de palabras
4.1.1 La derivación
4.1.2 La composición
12. 4.1.1 La derivación
• La derivación es el proceso morfológico por el
que se crea una nueva palabra a partir de un
morfema léxico preexistente.
• El ejemplo más frecuente de proceso
derivativo es el de derivación afijal,
– en el que la nueva palabra se crea por adición de
afijos (prefijos o sufijos) a la base léxica.
13. Las relaciones jerárquicas
• Entre los morfemas
– reflejan la manera en que se concibe y organiza el
significado, pero también son
– el resultado de ciertas restricciones formales: no todos los
morfemas se combinan con todos, ni lo hacen de la misma
manera.
• Así, el prefijo “des” puede combinarse con verbos
(desconcentrar), con sustantivos (desorden) o con adjetivos
(desleal).
• Los sufijos, en cambio, tienden a presentar una combinación más
estricta: el sufijo “ción” (que permite formar sustantivos) se une
exclusivamente con verbos (mediar – mediación), pero no con
sustantivos;
• el sufijo “izar” se combina con adjetivos para formar verbos (global
– globalizar); y
• el sufijo “al” se une a sustantivos para formar adjetivos (global).
14. los responsables del cambio de
categoría gramatical
• Los sufijos son los responsables del cambio de categoría
gramatical que se va operando en la formación de la
palabra, lo que constituye uno de los rasgos más
característicos de la derivación sufijal.
– Los prefijos, en cambio, no modifican la categoría de la palabra.
• Hay algunos sufijos que no modifican la categoría de la
base a la que se adjuntan; los más comunes con los de tipo
apreciativo.
– Se trata de diminutivos, aumentativos y valorativos.
• Las palabras derivadas que se forman añadiendo al mismo
tiempo un prefijo y un sufijo se denominan parasintéticas,
– con la particularidad de que sólo con el prefijo, o sólo con el
sufijo, la palabra resultante no existe.
15. 4.1.2 La composición
• La composición es el proceso morfológico de
formación de palabras en el que se combinan
dos bases léxicas (con independencia de que alguna de
ellas esté a su vez modificada por otros afijos).
– Por ejemplo, pintalabios, abrelatas, pelirrojo, etc.
16. destacar dos conceptos:
1. Las posibilidades de creación léxica de la composición; y,
por otro,
2. la existencia de restricciones propias de cada lengua sobre
las condiciones que rigen la combinación de lexemas para
formar nuevas palabras.
– Así, en español no son posibles estructuras como
“sitiolibrarse”, “porqueexplicar”…
– Muchas lenguas sí poseen tipos similares de composición; en
particular, existe el mecanismo compositivo conocido como
incorporación nominal, un proceso por el que se forman
predicados complejos a partir de la combinación entre una
base verbal y un objeto característico para designar una acción
más o menos general. Sería el caso de “dobladilloarreglar”, etc.
17. la reduplicación
• Consiste en la repetición total o parcial de la base.
• Los significados de las formas reduplicadas pueden ser variados y
dependen de las propiedades gramaticales de la base:
– cuando la reduplicación se hace sobre bases adjetivas, el significado
enfatiza o rebaja el de la forma sin reduplicar;
– si se hace sobre verbos, añade contenidos como “durante un rato”;
aunque no es frecuente, cuando se hace sobre nombres, añade el
significado de “en general”.
– La reduplicación es también un procedimiento productivo en la lengua
de signos, en la que constituye una forma de intensificación (llover
mucho se dice LLOVER LLOVER).
• En casi todas las lenguas hay, en mayor o menor medida, algunas
formaciones reduplicadas;
– en español, por ejemplo, existe “come-come”, “pica-pica”, etc.
18. 4.2 La flexión
• El conjunto de formas que componen la conjugación
verbal representa un ejemplo más de la combinatoria
de morfemas.
• Este proceso, que se conoce como flexión, es diferente
de los de formación de palabras, ya que la flexión no
da lugar a palabras diferentes, sino a formas diferentes
de una misma palabra, que expresan significados
intrínsecos o inherentes
– (pluralidad, tiempo verbal) y gramaticales o dependientes
(concordancia, función sintáctica).
– Los procesos de flexión nunca cambian la categoría de la
palabra a la que se aplican.
19. Un paradigma
• Es un conjunto de elementos lingüísticos que
comparten una propiedad verbal.
• En el caso de la flexión, se habla del
paradigma verbal o conjugación.
– Así, a partir de la base verbal y del conocimiento
de los morfemas correspondientes, se pueden
producir una serie de formas que permiten
conocer las distinciones
• personales, temporales y modales de los verbos.
20. • Una característica especial es que los constituyentes
que transmiten estas distinciones no son exclusivos
para un único verbo, sino compartidos con series más
amplias.
• Por ello, los verbos pueden organizarse a su vez en
clases paradigmáticas también en función de cuál sea
el conjunto de morfemas que utilizan para producir sus
formas.
– Por ejemplo, los verbos regulares de la primera
combinación en español forman un paradigma
precisamente porque se combinan con la misma serie de
sufijos.
21. • Las terminaciones flexivas de los verbos en
español añaden, además, una propiedad
adicional de algunos morfemas.
• Así, el sufijo –o, de primera persona de singular
del presente de indicativo, expresa a la vez varios
contenidos gramaticales distintos
(persona, número, tiempo, modo, voz).
• No hay posibilidad de segmentar la terminación
–o y de identificar en ella componentes
específicos para cada una de estas categorías. Se
habla entonces de amalgamas.
22. • Las distinciones que las lenguas encomiendan a la flexión
nominal pueden ser de tipo inherente, como el número o el
género.
• Además de expresar contenidos inherentes, las marcas
flexivas sirven también para indicar dependencias
gramaticales.
– En español, la relación entre nombres y adjetivos se manifiesta
por medio de la concordancia de género y número.
– Otro ejemplo de dependencia estructural lo ofrecen las
distinciones flexivas que se especializan como marcas de
relaciones sintácticas, como en las oraciones transitivas, en las
que el sujeto recibe caso nominativo, mientras que el
complemento directo se construye en acusativo.
23. 5. Los retos de la teoría morfológica
• El primer reto al que debe hacer frente a la teoría
morfológica es el de la irregularidad.
• Por ejemplo, en palabras como
producir, conducir, deducir, uno de los
constituyentes (“ducir”) no existe de manera
independiente en nuestra lengua.
– Estos ejemplos constituyen nuevos casos de
irregularidad morfológica.
• La solución al problema de la irregularidad pasa
por distinguir entre las formaciones ya
establecidas y los patrones productivos.
24. Productividad morfológica
• La capacidad del sistema de crear nuevas palabras de
acuerdo con ciertas reglas
• Cualquier hablante dispone de la posibilidad de crear
nuevas palabras que los demás puedan entender: basta
con que utilice para ello los patrones sistemáticos que
pone a su disposición su lengua.
• Por ejemplo, cuando a partir del verbo click se creó el
verbo cliquear,
– cualquier hablante pudo deducir inmediatamente que este
nuevo verbo significaba “hacer click”.
– Lo mismo pasa con googlear, por ejemplo. Estos ejemplos
muestran la auténtica, es decir,.