1. L A IGLESIA DE JESUC RI S TO DE LOS SA N TOS DE LOS ÚLT IMOS DÍA S • JUNIO DE 2011
El sacerdocio:
El poder de
la divinidad,
págs. 14, 16, 19.
La formación
académica:
Mi camino para salir
de la pobreza, pág. 42.
Enseñar a los niños
sobre la seguridad al
usar internet, pág. 64.
75 años de servicio
y autosuficiencia,
pág. 81.
2. PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN.
El sagrado Susquehanna, por Glen S. Hopkinson
El 15 de mayo de 1829, cerca de Harmony, Pensilvania, Juan Susquehanna; después de ello, tenían que ordenarse el uno
el Bautista se les apareció a José Smith y a Oliver Cowdery. Bajo al otro al Sacerdocio Aarónico. (Véase José Smith—Historia
la dirección de los antiguos apóstoles: Pedro, Santiago y Juan, 1:68–72; D. y C. 13:1.)
puso sus manos sobre la cabeza de José y de Oliver y les confirió Unas semanas después, Pedro, Santiago y Juan se aparecieron
el Sacerdocio Aarónico. ante José y Oliver cerca de Harmony, les confirieron el santo
Entonces, Juan el Bautista instruyó a José que bauti- Sacerdocio de Melquisedec y los ordenaron para ser apóstoles
zara a Oliver y que luego Oliver lo bautizara a él en el río (véase D. y C. 27:12; 128:20).
3. 14
Liahona, junio de 2011
MENSAJES 28 El verdadero camino 14 Lo que creemos: El sacer-
4 Mensaje de la Primera a la felicidad
Por el élder Quentin L. Cook
docio es la autoridad para
actuar en el nombre de Dios
Presidencia: Las bendiciones
del diezmo
Por el presidente Henry B. Eyring
Cinco claves para lograr la
felicidad. 19 Nuestro hogar, nuestra
familia: El poder de un
7 Mensaje de las maestras 34 Navegar a casa a salvo buen ejemplo
Por Jerry Stringam
visitantes: Una sociedad Por Richard M. Romney
de mujeres santas Los jóvenes de Visakhapatnam,
India, encuentran un puerto
20 Clásicos del Evangelio:
El concepto Santo de los
ARTÍCULOS DE INTERÉS seguro en su hogar. Últimos Días del matrimonio
16 Las bendiciones del 81 El Plan de bienestar Por el presidente Hugh B. Brown
sacerdocio: Aprender de la Iglesia 38 Voces de los Santos de
a confiar en el Señor Celebrando 75 años de los Últimos Días
Por Mark L. Grover
Me sentía incómodo al dar ben-
autosuficiencia y de servicio.
74 Noticias de la Iglesia
diciones, pero cuando mi esposa SECCIONES 79 Ideas para la noche de hogar
tuvo cáncer, sabía que yo era el
conducto por el cual ella podía 8 Cosas pequeñas y sencillas 80 Hasta la próxima: Edificar
recibir la ayuda celestial. sobre un fundamento seguro
11 El prestar servicio en la Por Joshua J. Perkey
24 Quería desesperadamente Iglesia: Bendecidos por
los consejos
dejar de hacerlo EN LA CUBIERTA
Nombre omitido Por el élder M. Russell Ballard Frente: Restauración del Sacerdocio
de Melquisedec, por Walter Rane.
Cómo vencí mi batalla de
12 Hablamos de Cristo:
Atrás: ilustración fotográfica Matthew Reier.
décadas con la pornografía. Él sufrió mis dolores
Por Jane Bleak
Junio de 2011 1
4. JÓVENES ADULTOS JÓVENES NIÑOS
46 Preguntas y respuestas 68
“¿Cómo sé si las pruebas que
tengo tienen como fin ayudarme
a ser mejor o si son la manera
en que mi Padre Celestial me
advierte que voy por el camino
equivocado?”
48 Tu ejemplo importa
Por el élder Joseph W. Sitati
Los jóvenes de Kenia, África,
aprenden que vivir el Evangelio
42 los fortalece a ellos y a los demás.
42 El poder de la 51 Línea por línea: Doctrina 60 Confía en el Señor
formación académica y Convenios 58:42–43 Por Elaine S. Dalton
Por Suzy Taggy Coelho
Caldas Nelsen 52 Póster: La Arboleda Sagrada ¿Por qué tuvo que morir mi
padre? Un pasaje del Antiguo
Mi madre dijo que era el medio
que me sacaría de la pobreza. 53 Del campo misional: Testamento me dio la respuesta.
Señas del Espíritu
Por Pedro Ovalles
61 Testigo especial: ¿Qué bendi-
ciones recibimos por medio
54 Enseña a un hombre a pescar de la Iglesia restaurada?
Por el élder L. Tom Perry
Por Adam C. Olson
Cuando su padre murió, 62 De la Primaria a casa:
el Padre Celestial de Ezra Los primeros principios y
estaba allí para ayudarlo. ordenanzas del Evangelio
hacen posible que yo pueda
Busca la 58 Lo que me enseñó la natación vivir con Dios otra vez
Liahona que Por Marissa Thompson Por Ana María Coburn y
está escondida No toda la presión de grupo Cristina Franco
en este ejemplar.
Pista: pregúntale
es negativa.
64 Apaga y cuéntalo
Por Danielle Kennington
a Nicole.
Connor aprende lo que debe
hacer si ve un sitio web malo.
67 Nuestra página
68 Mi gran decisión
Por Rebecca Shaw
Nicole ora para saber si debe
bautizarse.
54
70 Para los más pequeños
2 Liahona
6. MENSAJE DE LA PRIMERA PRESIDENCIA
Por el presidente
Henry B. Eyring
Primer Consejero de
la Primera Presidencia
diezmo
LAS
BENDICIONES
DEL
L
a razón por la que Dios nos da
mandamientos es para bende-
cirnos. Él quiere concedernos la
vida eterna, el mayor de todos Sus do-
nes (véase D. y C. 14:7). A fin de recibir
el don de vivir con Él para siempre
como familias en el reino celestial, tene-
mos que ser capaces de vivir las leyes
de ese reino (véase D. y C. 88:22).
Él nos ha dado mandamientos en
esta vida para ayudarnos a desarrollar
esa habilidad. La ley del diezmo es
uno de esos mandamientos preparato-
rios. La ley requiere que demos al Se-
ñor la décima parte de todos nuestros
ingresos, y es tan sencilla que hasta
un niño la puede entender. He visto
a niños entregar al obispo el sobre de
los diezmos con la décima parte de
las monedas que habían ganado.
Una de las bendiciones que se
reciben al pagar un diezmo íntegro es
la fe para vivir una ley aún más ele-
vada. Para vivir en el reino celestial,
debemos vivir la ley de consagración.
Allí tenemos que ser capaces de sen-
tir que todo lo que somos y todo lo
que tenemos pertenece a Dios.
Hay por lo menos tres maneras en
las que el pagar un diezmo íntegro
4 Liahona
7. en esta vida nos prepara para sentir para nuestro bien. Al cumplir nues-
lo que tenemos que sentir a fin de tras promesas, Él cumplirá las Suyas.
recibir el don de la vida eterna. El sentimiento de paz es una de las CÓMO ENSEÑAR CON ESTE
Primero, cuando pagamos nues- grandes bendiciones de pagar un MENSAJE
tro diezmo a la Iglesia, nuestro Padre diezmo íntegro. Quienes han cum-
Celestial derrama bendiciones sobre plido con el mandamiento del diezmo • A veces, la mejor manera de
nosotros. Todo aquel que siempre pueden testificar que la bendición de enseñar cierto principio es de-
haya pagado un diezmo íntegro sabe la paz es real y valiosa. mostrarlo (véase La enseñanza:
que eso es verdad. Las bendiciones Tercero, quienes pagan el diezmo El llamamiento más importante,
a veces son espirituales y otras veces sienten más amor hacia Dios y hacia 2000, pág. 187). Piense en pe-
temporales. Se dan en el tiempo del todos los hijos de Dios. Ese aumento dirle a un miembro de la familia
Señor y de acuerdo con lo que Él de amor proviene de comprender que demuestre lo que repre-
sabe que es mejor para nosotros. la forma en que el Padre utiliza los senta una décima parte. Para
Cuando se reciben esas bendicio- diezmos que donamos para bendecir demostrarlo, él o ella podría
nes, aumenta nuestra fe en que Dios a las personas en este mundo y por separar un objeto de un grupo
es la fuente de todo lo bueno en la eternidad. de 10 objetos. Para concluir, tal
nuestra vida, y se nos facilita apreciar Mediante Sus siervos autorizados, vez pueda pedirle a un miem-
que la consagración simplemente Él utiliza los diezmos con mucho bro de la familia que muestre
reconoce la verdad de que todas las cuidado. El que paga diezmos ayuda cómo se llena un formulario de
creaciones de Dios son de Él. Nos al Señor a construir templos en donde donaciones.
hace sentir gratitud de que Él sólo las familias pueden sellarse para • “Aquellos a quienes enseñe se
pida el 10 por ciento de lo que ya nos siempre; el que paga diezmos ayuda beneficiarán con la participa-
ha dado; y así estamos mejor prepara- al Señor a llevar el Evangelio a la ción de todos y cada uno” (La
dos para vivir la ley de consagración gente de todas partes. El que paga enseñanza: El llamamiento más
cuando se nos pida hacerlo. diezmos ayuda al Señor a aliviar el importante, pág. 69). Invite a los
Segundo, todos los que con hambre y el sufrimiento, a Su manera miembros de la familia a com-
regularidad hemos pagado un diezmo y por medio de Sus siervos. Cual- partir lo que crean que el presi-
íntegro sentimos más confianza de quiera de esos siervos puede decirles dente Eyring quiere decir con la
pedirle a Dios lo que nuestra familia la forma en que aumentó el amor frase “sentir lo que tenemos que
y nosotros necesitamos. Él ha pro- porque el diezmo se utilizó para ben- sentir para recibir el don de la
metido más bendiciones de las que decir a las personas; y también es así vida eterna”. Considere analizar
podamos recibir cuando hayamos con el que fielmente paga diezmos. las tres formas en las que el pa-
sido fieles a nuestro convenio de Faltan varios meses para el ajuste gar el diezmo nos prepara para
FOTOGRAFÍAS POR ROBERT CASEY.
pagar nuestro diezmo (véase Mala- de diezmos. Ruego que ustedes y su sentir lo que tenemos que sentir
quías 3:10). De modo que una de las familia comiencen ahora a planear y para recibir las bendiciones de
grandes bendiciones del diezmo es a prepararse para ser dignos de las Dios.
la confianza en lo que nos depara el bendiciones que Dios derrama sobre
futuro. Sean cuales fueren nuestras aquellos que declaran ante Él que
circunstancias, las cosas resultarán pagan un diezmo íntegro. ◼
Junio de 2010 5
8. MENSAJE DE LA PRIMERA PRESIDENCIA
JÓVENES NIÑOS
Puedo pagar el diezmo
Suficiente dinero
P agar el diezmo quiere decir dar el 10 por
ciento de lo que ganamos al Señor. Mira estos
tres niños que están haciendo algunos trabajos. En
Por Fabiano dos Santos da Silva el primer espacio en blanco al lado de cada dibujo,
escribe lo que pienses que cada niño podría ga-
C onocí a los misioneros cuando tenía 17 años; en esa época
mi hermano mayor y yo vivíamos juntos. Nuestra madre
había fallecido el año anterior y la vida era difícil. Cuando los
nar por el trabajo que hace. En la segunda línea,
escribe cuánto sería el diezmo.
misioneros me enseñaron, me di cuenta de que la Iglesia
era la que siempre había buscado, pero la influencia de
mis amigos me impidió asistir a la Iglesia los domingos.
En una ocasión, fui a una actividad de la Iglesia
durante la semana; el ver a todos los jóvenes jugar y reír
me dio mucha alegría. Los misioneros, junto con los jóvenes,
aprovecharon esa oportunidad para enseñarme una lección
del Evangelio, y me sentí tan bien que decidí bautizarme.
Pero, incluso después de unirme a la Iglesia, enfrenté
desafíos. Yo era el único miembro de la Iglesia en esa parte
de la ciudad y vivía muy lejos del centro de reuniones. Mis
amigos que no eran miembros de la Iglesia ya no querían
saber nada de mí. Cuando me sentía solo, oraba y sentía el
amor del Señor.
Cada mes recibía una pequeña suma de dinero de un
fondo que mi madre había dejado; era muy difícil man-
tenerme con tan poco dinero, pero decidí ser obediente.
Pagaba el diezmo y además tenía que pagar el transporte
para ir a seminario y a las reuniones del domingo. No enten-
día cómo, pero a fin de mes me daba cuenta de que había
habido suficiente dinero para hacer todo.
Sé que he sido bendecido por pagar el diezmo. El obede-
cer este mandamiento me ayudó a ganar un testimonio más
fuerte, a servir en una misión y a reconocer las bendiciones
para poder fortalecer a los miembros nuevos que enfrentan
desafíos.
Pregunta adicional: ¿Cuál de estos niños
que pagan el diezmo recibiría más bendiciones?
ILUSTRACIONES POR STEVE KROPP.
(Pista: Lee el último párrafo del mensaje del
presidente Eyring.)
9. M E N S A J E D E L A S M A E S T R A S V I S I TA N T E S
El fortalecimiento de la Estudie este material y, según sea apropiado, analícelo
con las hermanas a las que visite. Utilice las preguntas
familia por medio de la como ayuda para fortalecerlas y para que la Sociedad
de Socorro forme parte activa de la vida de usted.
autosuficiencia temporal Fe • Familia • Socorro
E l cultivar la autosuficiencia —la habilidad de cui
dar de nosotras mismas y de nuestra familia— es
la responsabilidad de cada hermana. Llegamos a ser
¿Qué puedo
hacer?
De nuestra historia
Las hermanas de la Sociedad de Socorro
siempre han participado en la obra de sal
autosuficientes al aprender a amar el trabajo, al bus 1. ¿Cómo puedo var almas temporal y espiritualmente. Cada
car inspiración a fin de encontrar la mejor manera ayudar a las her- semana, cuando la Sociedad de Socorro
de proveer de lo necesario para nosotras mismas, y manas que visito Femenina de Nauvoo se reunía, las hermanas
al encontrar, junto con los integrantes de la familia, y a sus familias a
daban un informe sobre las personas que
la manera de cubrir las necesidades básicas. mejorar su autosu-
tenían necesidades. Las donaciones de dinero,
Cuando somos autosuficientes, utilizamos nuestras ficiencia temporal?
bienes, talentos y tiempo se extendían para
bendiciones y nuestros medios con el fin de preparar 2. ¿Cómo puedo aliviar a los necesitados. Esta obra fundamental
nos para hacer frente a los problemas y para evitarlos. mejorar mi propia de aliviar el sufrimiento ha seguido siendo la
Sin embargo, la autosuficiencia aumenta a medida autosuficiencia labor de la Sociedad de Socorro a través de las
que oramos a fin de recibir el valor para enfrentar con temporal? generaciones.
fe las dificultades que seguramente surgirán. La auto Cuando los santos llegaron al valle del Lago
suficiencia también nos permite cumplir con nuestro Si desea más infor-
mación, visite www
Salado, el presidente Brigham Young (1801–
convenio de cuidar de los demás. .reliefsociety.lds.org. 1877) aconsejó a las hermanas que ayudaran
En la Sociedad de Socorro se nos enseñan prin a los necesitados y que aprendieran destrezas
cipios y técnicas de autosuficiencia. Las hermanas que les permitieran cuidar de sí mismas. Él
NOTAS
aprenden a elaborar un presupuesto, a salir de 1. Véase Manual 2: dijo: “Aprendan a mantenerse ustedes [mismas];
las deudas y a evitarlas, aptitudes laborales, las Administración guarden granos y harina, y ahorren para un
Escrituras y el Evangelio; a enseñar a otras personas de la Iglesia, día de escasez” 3. Bajo la dirección del sacerdo
a leer y a aprender; enseñar tecnología, salud física, 2010, 9.4.2.
2. Véase Julie cio, la Sociedad de Socorro sigue enseñando
cómo mantener un buen estado físico, la preven B. Beck, “La la autosuficiencia, protegiendo a la familia y
ción y la recuperación de las adicciones, la salud responsabilidad alentando la rectitud personal y los actos de
social y emocional, la prevención de enfermedades, de la presidenta caridad, el amor puro de Cristo.
de la Sociedad
jardinería, la producción y el almacenamiento de Socorro”,
de alimentos, la preparación para emergencias y Principios básicos
muchas otras cosas que nos ayudarán a llegar a ser sobre bienestar y
De las Escrituras
autosuficientes 1. autosuficiencia,
2009, págs. 6–7. Juan 13:34–35; Santiago 1:27; Mosíah 4:26;
Julie B. Beck, Presidenta General de la Sociedad 3. Véase Enseñanzas Doctrina y Convenios 29:34–35; 38:30; 44:6
de Socorro, explica que “el proveer para nosotros y de los Presidentes
para los demás es evidencia de que somos discípu de la Iglesia:
Brigham Young,
los del Señor Jesucristo… Cuando [mi suegra] falle 1997, pág. 244.
ció repentinamente el año pasado, dejó evidencia
de su vida autosuficiente: tenía una recomendación
vigente para el templo, y Escrituras y manuales de
estudio del Evangelio muy usados. Nos repartimos
con amor las ollas, las sartenes y los platos con los
que había preparado miles de comidas. Nos dejó
acolchados que había hecho de ropa usada, pues
creía en el viejo adagio: ‘Úsalo, gástalo, haz que
ILUSTRACIÓN FOTOGRÁFICA POR WELDEN C. ANDERSEN.
sirva o arréglatelas sin él’. Vimos el abastecimiento
de alimentos que había cultivado, preservado y
almacenado, y fueron en especial conmovedores los
libritos de contabilidad en los que fielmente registró
sus gastos durante muchos años. Debido a que vivió
en forma providente, dejó algún dinero que había
ahorrado para las emergencias y ¡no dejó ninguna
deuda! Más importante aún, es que había enseñado
e inspirado a muchas otras personas con las destre
zas que había adquirido durante su fiel vida” 2.
Junio de 2011 7
11. El Evangelio está primero
Cómo crear un perfil en Mormon.org
L os misioneros encontraron a
mi bisabuelo en Samoa y le en-
señaron el Evangelio. Al unirse a
P ara compartir el Evangelio, los miem-
bros de la Iglesia de todo el mundo
3. Cuando cree su perfil, tenga en
cuenta que está hablando a personas
pueden crear un perfil en Mormon.org. que no son miembros de la Iglesia.
la Iglesia, mi abuelo tuvo que re-
Los visitantes al sitio web utilizan estos Evite frases con las que tal vez ellos
nunciar a algunas de las creencias
perfiles para aprender acerca de la Iglesia no estén familiarizados. Por ejemplo,
y prácticas religiosas tradicionales
directamente de los miembros. Para crear podría decir: “Enseño una clase a
de su pueblo. Nuestra familia
un perfil y compartir su testimonio siga los mujeres adultas una vez al mes sobre
se siente orgullosa de nuestro
pasos que se encuentran a continuación: las palabras de los profetas vivientes”,
legado samoano pero, debido
en lugar de decir: “Sirvo como la ins-
al ejemplo de mi abuelo, hemos 1. Visite mormon.org/create. Ingrese
tructora de Enseñanzas para nuestra
aprendido que el Evangelio está con su cuenta LDS Account. Si no
época en la Sociedad de Socorro”.
primero. tiene una cuenta LDS Account, re-
Cuando yo era joven, mi papá gístrese para obtener un nombre de 4. Proporcione una foto de usted, su
me habló de los tatuajes que son usuario y una contraseña; para ello nombre de pila y una breve pre-
comunes entre los grupos tribales tendrá que proporcionar su número sentación. También puede vincular
y de algunas comidas populares de cédula de miembro y su fecha de su perfil a su blog, a su cuenta de
que no necesariamente estarían nacimiento. Encontrará su número de Facebook o la de Twitter, aunque eso
en armonía con las enseñanzas de cédula de miembro en su recomenda- no es obligatorio. Evite incluir infor-
la Iglesia. Mi papá me dijo: “No ción para el templo o puede pedírselo mación personal detallada, como su
participes en nada de eso; por al secretario de barrio o rama encar- apellido o la ciudad donde reside.
encima de ser samoano, de ser gado de las cédulas de miembros.
Cuando su perfil esté completo, se en-
un hombre grande y fuerte de las
2. Proporcione información en los si- viará a los moderadores para que lo aprue-
islas, eres un hijo de Dios”. Eso es
guientes campos: “Acerca de mí”, “Por ben. Una vez que se apruebe el perfil, los
algo que siempre he recordado.
qué soy mormón”, “Cómo vivo mi fe”, visitantes al sitio podrán leer su testimonio
Hoy mi esposa y yo vivimos en
“Preguntas más frecuentes”, “Historias y ponerse en contacto con usted para obte-
Costa Rica; aquí existen usanzas
personales” e “Información adicional”. ner más información acerca de la Iglesia.
tradicionales y culturales, como
las hay en todas partes, que no
concuerdan con lo que la Iglesia
enseña. A veces tenemos que
tener el valor de alejarnos de esas
prácticas y volver a las enseñanzas
del evangelio de Jesucristo.
Morgan Sa Mataalii, Costa Rica
Junio de 2010 9
12. CoSAS PEquEñAS y SENCILLAS
Juego sobre los presidentes
de la Iglesia
u ne cada objeto que se menciona a conti-
nuación con el presidente de la Iglesia con
el que se relacione.
garganta para tratar un cáncer le
afectaron la voz.
9. Bastón. Este presidente utilizó un
1. Gafas de sol. Este presidente bastón en sus últimos años, el que
de la Iglesia las llevaba pues- agitaba en el aire cariñosamente
tas cuando viajaba a visitar para saludar a grupos de Santos de
los asentamientos a lo largo los Últimos Días.
A. José Smith (1805–1844)
del territorio de Utah. 10. Informe de diezmos. Este presi-
2. Sombrero de copa. Este B. Brigham Young (1801–1877) dente hizo hincapié en las en-
objeto es característico señanzas de José Smith sobre el
de la fama que tenía C. John Taylor (1808–1887) diezmo.
este profeta por su
D. Wilford Woodruff 1 1. El violinista en el tejado. A este
refinada apariencia y presidente le encanta la literatura y
(1807–1898)
conducta. ha citado esta obra clásica en más
3. Medalla al Servicio Distinguido. Este E. Lorenzo Snow (1814–1901) de una ocasión.
presidente de la Iglesia recibió esta
F. Joseph F. Smith (1838–1918)
12. Máquina de escri-
condecoración por su servicio como bir. Este presidente
Secretario (Ministro) de Agricultura en
el gabinete del presidente estadouni-
G. Heber J. Grant (1856–1945) fue uno de los escri-
tores más prolíficos
dense Dwight D. Eisenhower. H. George Albert Smith de la Iglesia.
4. Ficha de mercancías de bienestar. Este (1870–1951)
13. Espada. Este Presidente
presidente inició y dirigió el programa
de bienestar de la Iglesia durante la
I. David O. McKay de la Iglesia fue comandante de la
(1873–1970) Legión de Nauvoo.
Gran Depresión.
14. Lei floral. Este profeta viajó
5. Montura. Este profeta J. Joseph Fielding Smith
a Hawai a la edad de 15 años
IZQUIERDA: FOTOGRAFÍA DEL CENTRO BYU DE JERUSALÉN, POR D. KELLY OGDEN; FOTOGRAFÍA DEL BASTÓN,
quería mucho a su caba- (1876–1972)
como uno de los prime-
llo llamado Sonny Boy.
K.
POR JOHN LUKE; FOTOGRAFÍA DE LA CONDECORACIÓN BÚFALO DE PLATA, POR CHRISTINA SMITH.
Harold B. Lee (1899–1973) ros misioneros Santos de
6. Diario personal. Este los Últimos Días en ese
profeta estaba dedicado a L. Spencer W. Kimball lugar.
preservar la historia de la Igle- (1895–1985)
15. Reloj de bolsillo. Este profeta
sia, y sus registros se encuentran entre
las historias más valiosas de la Iglesia. M. Ezra Taft Benson llevaba puesto este objeto el
(1899–1994) día del martirio en la cárcel
7. Foto del Centro BYU de Jerusalén. de Carthage.
Este presidente de la N. Howard W. Hunter 16. Premio de escultismo
Iglesia realizó ne- (1907–1995)
Búfalo de Plata. Este
gociaciones a fin de
obtener un terreno O. Gordon B. Hinckley
presidente fue la primera
(1910–2008) persona que abogó seriamente en
en Jerusalén para favor del escultismo en la Iglesia.
edificar el centro.
P. Thomas S. Monson (1927–)
8. Micrófono miniatura. Este presidente
utilizó este aparato montado en sus
anteojos porque varias operaciones de
10 L i a h o n a
Respuestas: 1. B; 2. G; 3. M; 4. K; 5. I; 6. D; 7. N; 8. L; 9. O; 10. E; 11. P; 12. J; 13. A; 14. F; 15. C; 16. H
13. P R E S TA R S E R V I C I O E N L A I G L E S I A
consejos
BENDECIDOS POR
LOS
Por el élder M. Russell Ballard con los padres, me enteré de que estaban
Del Quórum de los Doce Apóstoles CÓMO FORTA- muy endeudados y atrasados con el pago de
H
LECER A LOS la hipoteca de la casa. De acuerdo con las
ace unos años, QUE NECESITAN pautas aprobadas de bienestar, indagué sobre
cuando prestaba ser- AYUDA la posibilidad de que sus familiares pudieran
vicio como obispo, “Los miembros del ayudar, pero recibí muy poca información. Sin
una familia de nuestro barrio consejo de barrio embargo, nuestra presidenta de la Sociedad
pasó por una crisis cuando se esfuerzan por de Socorro pudo averiguar que la madre tenía
estar informados
el padre perdió su trabajo. un hermano adinerado.
de las necesidades,
Yo estaba preocupado por su bienestar y los “No hay razón para ponerse en contacto
del bienestar y del
visité para asesorarlos y ofrecerles la ayuda de progreso espiritual con él”, dijo la madre. “Hace años que ni
la Iglesia. Curiosamente, se mostraron reacios de los miembros de siquiera hablamos”.
a aceptar mi oferta de ayuda provisional, por sus organizaciones. Yo comprendía su dilema, sin embargo,
lo que llevé el asunto al consejo de barrio. También se man- sentí que era importante seguir el orden de la
Con un espíritu de amorosa confidencialidad, tienen informados Iglesia. De modo que lo consulté con ella y fi-
compartí con ellos mi preocupación por esa sobre los miembros nalmente recibí su permiso para contactar a su
maravillosa familia y les pedí ideas para saber que se enfrentan a hermano que vivía en una ciudad lejana. Lo
cómo podríamos bendecirlos. problemas especiales llamé y le expliqué las circunstancias difíciles
Nuestra presidenta de la Sociedad de Soco- o a circunstancias en las que se encontraba su hermana menor.
rro se ofreció para visitar a la madre a fin de variables. Esta infor- A los tres días llegó a Salt Lake City y ayudó
mación les permite
determinar las necesidades temporales de la a su hermana a poner sus asuntos financieros
fortalecer a quienes
familia y analizar con ellos la forma de conse- en orden. Mientras tanto, el presidente del
más precisan su
guir las cosas que necesitaran —lo cual, por quórum de élderes ayudó al esposo a encon-
ayuda”.
supuesto, era la responsabilidad de ella, según trar un trabajo estable con buenos ingresos.
Manual de Instrucciones 2:
el programa de la Iglesia. En un par de días Administración de la Igle- Más importante, sin embargo, fue que se
ella había logrado lo que yo no había conse- sia, 2010, sección 4.5.1. acercaron y se unieron más como familia.
guido y la familia, con humildad y gratitud, Creo que jamás olvidaré ese emotivo mo-
aceptó que la ayudáramos con los artículos de El Manual de Instruc- mento en que la madre se reunió con su
primera necesidad. El presidente del quórum ciones 2, y las transmi- hermano después de muchos años de separa-
de élderes habló con el padre sobre la fami- siones de las reuniones ción. Aunque su hermano se había alejado de
lia —lo cual, por supuesto, era su derecho y mundiales de capaci- la Iglesia, hubo un inmediato vínculo afectivo
deber— y se mantuvo en contacto con él para tación de líderes de entre los dos espíritus y, como resultado, el
explorar maneras de conseguir un trabajo. noviember de 2010 y hermano volvió a la plena actividad en la Igle-
Nuestro presidente de Hombres Jóvenes se de febrero de 2011 se sia y reanudó su relación con la familia.
dio cuenta de que la casa necesitaba urgen- encuentran disponi- Todo esto sucedió gracias a la inspirada labor
temente una mano de pintura e hizo arreglos bles en LDS.org. Haga de un fiel consejo de barrio que funcionó de
para que los presbíteros trabajaran con el clic en “Menú” y acuerdo con el programa que Dios ha señalado
grupo de sumos sacerdotes para pintarla. luego en “Servir en la para Sus hijos por medio de Sus siervos. ◼
Durante el transcurso de mi conversación Iglesia”. De Counseling with Our Councils, 1997, págs. 15–17.
Junio de 2011 11
14. HABLAMOS DE CRISTO
Él sufrió mis dolores
“Ciertamente él ha llevado nuestros pesares y sufrido nuestros
dolores” (Mosíah 14:4).
N
Por Jane Bleak
LA ADVERSIDAD PUEDE unca olvidaré el verano y el cuidaron con amor de innumerables
CONDUCIRNOS A DIOS otoño de 2009. El 9 de junio mi maneras. Nuestra nieta de 13 años, Krys-
“Hay quienes han enfren- padre falleció después de padecer tal, nos escribió una carta después de
tado la desgracia, al punto demencia por más de diez años. El 25 de la muerte de nuestro hijo Michael. Nos
de parecer insuperable, y se junio, mi hijo de 22 años falleció inespe- recordó que no estábamos solos cuando
han vuelto personas un tanto radamente y, menos de un mes después, escribió: “Dios los sostiene”. Su carta me
amargadas; pero si se detienen también murió mi prima. El 13 de agosto, recordó el pasaje de Doctrina y Conve-
a pensar, aun la adversidad mi madre, que tenía 82 años, tuvo una nios 84:88: “Iré delante de vuestra faz. Es-
que han sufrido puede ser un operación a corazón abierto y comenzó taré a vuestra diestra y a vuestra siniestra,
medio de elevación espiritual. una prolongada recuperación. El 18 de y mi Espíritu estará en vuestro corazón, y
La adversidad misma puede octubre falleció mi hermano de 41 años mis ángeles alrededor de vosotros, para
conducirnos a Dios y a la ilu- de edad. El 31 de octubre mi esposo tuvo sosteneros”.
minación espiritual en vez de un infarto masivo y el corazón le dejó Obtuve fortaleza al leer un discurso
alejarnos de ellos”. de funcionar durante ocho minutos. Los del élder Richard G. Scott, del Quórum
Presidente David O. McKay (1873–1970),
bomberos, los paramédicos y una ben- de los Doce Apóstoles, titulado “La con-
Treasures of Life, compilado por Clare
Middlemiss, 1962, págs. 107–108. dición del sacerdocio nos lo trajeron de fianza en el Señor”. Él dijo: “En el preciso
vuelta a la vida. momento en que todo parece ir bien,
La gente con frecuencia me pregun- con frecuencia surgen múltiples dificul-
taba cómo sobrellevamos todos esos tades simultáneamente. Cuando esas
acontecimientos. Mi respuesta constante pruebas no son resultado de tu desobe-
era que acudíamos al Salvador y Él ve- diencia, son evidencia de que el Señor
laba por nosotros; no nos dejó solos en siente que estás preparado para progre-
nuestras aflicciones. Sentí que los cielos sar más. Entonces te da experiencias que
me ministraron y me sostuvieron. Verda- estimulan el adelanto, la comprensión
deramente Él “ha llevado [mis] pesares” y la compasión, y que te refinan para tu
(Mosíah 14:4). beneficio eterno. Llegar de donde estás
También recibimos consuelo de la a donde Él quiere que tú estés exige
familia, los amigos y los miembros de un gran esfuerzo que generalmente va
nuestro barrio y nuestra estaca. Nos acompañado de pesar y de dolor” (véase
12 L i a h o n a
15. ¿POR QUÉ PODEMOS
CONFIAR EN EL SEÑOR?
El élder Richard G. Scott, del
Quórum de los Doce Apóstoles,
nos ayuda a responder esta
En Getsemaní, Jesucristo dio el ejemplo perfecto de confiar cuando le pidió a Su Padre: pregunta en su discurso de con-
“…si es posible, pase de mí esta copa”; pero luego dijo: “…pero no sea como yo quiero, ferencia general “La confianza
sino como tú” (véase Mateo 26:39–44). en el Señor” (Liahona, enero de
1996, págs. 18–20).
Liahona, enero de 1996, pág. 18). futuro, me ha ayudado a sanar mi cora-
Dijo que preguntas tales como “¿Por zón apesadumbrado, ha intensificado mi 1. Dios sabe lo que hace.
qué tiene que pasarme esto a mí?” o percepción de la bondad que me rodea, Cuando pasamos por pruebas
“¿Por qué tengo que sufrir esto ahora?” me ha dado oportunidades de prestar para Sus propósitos, pode-
nos conducen a callejones sin salida. Más servicio, ha profundizado mi compasión mos confiar en que Él nos
bien, el élder Scott sugiere hacer pregun- hacia los demás y ha magnificado mi ayudará.
tas como “¿Qué debo aprender de esta amor por mi familia y mis amigos. 2. El plan de Dios es exaltarnos
experiencia?”, “¿A quién debo ayudar?” A través de todo ello, he obtenido para que logremos volver a
y “¿Cómo puedo recordar mis muchas un testimonio de que nuestro desafío vivir con Él 1.
bendiciones en tiempos de prueba?”. es someter nuestra voluntad a nuestro 3. El sobrellevar pruebas es
CRISTO EN GETSEMANÍ, POR HEINRICH HOFMANN, CORTESÍA DE C. HARRISON CONROY CO.
He resistido la tentación de preguntar Padre Celestial, porque sólo entonces parte de ese plan; al hacerlo,
“¿Por qué?”; más bien, he pedido la guía podemos ser perfeccionados y pulidos adquirimos fortaleza, enten-
del Padre Celestial durante mis pruebas. de la forma que Él ha estipulado especí- dimiento, fe y confianza
Él me ha bendecido con esperanza en el ficamente para cada uno de nosotros. ◼ en Dios 2.
Cómo sobrellevar el dolor Piense en compartir el
discurso del élder Scott “La con-
• No se nos deja solos en nuestro dolor, porque Jesucristo, “varón de dolores y
fianza en el Señor” con alguien
experimentado en quebranto” (Isaías 53:3), ha soportado nuestros dolores como
que esté pasando dificultades.
parte de la Expiación.
• Podemos esforzarnos por resistir la tentación de preguntar “¿Por qué?”. Más bien, NOTAS
podemos pedir la guía del Señor. 1. Véase Principios del Evangelio,
2009, págs. 10–11.
• Podemos aceptar el desafío de someter nuestra voluntad a nuestro Padre Celestial. 2. Véase Principios del Evangelio,
págs. 17–21.
Para mayor información sobre este tema, véase Proverbios 3:5–6 y Joseph B. Wirthlin,
“El domingo llegará”, Liahona, noviembre de 2006, págs. 28–30.
Junio de 2011 13
16. LO QUE CREEMOS
Los oficios y algunos de
los deberes del Sacerdo-
cio de Melquisedec:
EL SACERDOCIO
1. Los élderes confirman
“por la imposición de manos
a los que se bautizan en la
iglesia, para que reciban el
ES LA AUTORIDAD PARA ACTUAR EN EL NOMBRE DE DIOS bautismo de fuego y del Es-
píritu Santo” (D. y C. 20:41).
N
uestro Padre Celestial go- son: diácono, maestro, presbítero y
bierna los cielos y la tierra. Por obispo. Los oficios del Sacerdocio de
medio de Su poder eterno, Melquisedec son: élder, sumo sacer-
el universo se mantiene en perfecto dote, patriarca, Setenta y Apóstol. Los
orden. Para gobernar Su Iglesia en la que poseen estos oficios están orga-
tierra, Él delega una porción de Su nizados en quórumes, o grupos. Cada
poder y autoridad a miembros va- oficio tiene asignado ciertos deberes.
rones de la Iglesia que sean dignos.
Esta autoridad que se delega se llama Las llaves del sacerdocio
sacerdocio. Vemos este modelo de El término llaves se refiere a la Los oficios y algunos
delegación de autoridad en el Nuevo autoridad de presidir unidades o de los deberes del
Testamento cuando Jesucristo dio a jurisdicciones específicas de la Iglesia. Sacerdocio Aarónico:
Sus apóstoles la autoridad para actuar En las estacas y los barrios, por ejem-
en Su nombre (véase Mateo 16:19). plo, sólo el presidente de estaca,
Éste es el modelo de gobierno de el obispo y los presidentes
Dios y se lleva a la práctica sobre la de quórum poseen llaves del
tierra en la actualidad. Aquellos que sacerdocio. Las llaves se les
poseen el sacerdocio están autoriza- otorgan mediante la imposi-
dos para actuar en nombre de Dios ción de manos por un posee-
para dirigir Su Iglesia y administrar dor del sacerdocio que esté
las sagradas ordenanzas necesarias autorizado para conferirlas.
para la salvación como el bautismo, la • Los presidentes de los quórumes
confirmación, la administración de la del Sacerdocio de Melquisedec re-
Santa Cena y el matrimonio en el tem- ciben las llaves para presidir y para
plo. Todos los Santos de los Últimos administrar los asuntos espirituales
Días fieles, hombres, mujeres y niños, (véase D. y C. 107:10, 18–19).
necesitan las ordenanzas del sacerdo-
cio y son bendecidos al recibirlas. • Los presidentes de los quóru-
mes del Sacerdocio Aarónico
Oficios del sacerdocio reciben la llaves del ministe-
Existen dos divisiones del sacerdo- rio de ángeles y de efectuar
cio: el de Melquisedec y el Aarónico. ordenanzas como el bautismo
El Sacerdocio de Melquisedec tiene y la Santa Cena (véase D. y C.
mayor autoridad que el Sacerdocio 107:20).
Aarónico. • El Presidente de la Iglesia
En estas dos divisiones hay oficios posee todas las llaves del
específicos, o áreas de responsabilidad. sacerdocio para la Iglesia
Los oficios del Sacerdocio Aarónico entera (véase D. y C. 81:1–2).
14 L i a h o n a
17. 2. Los sumos sacerdotes
administran “las cosas 4. Los Setentas predican
espirituales” y tienen “el el Evangelio y son testigos 5. Los Apóstoles prestan
derecho de oficiar en” los especiales de Jesucristo bajo servicio en calidad de “tes-
oficios de élder, presbítero, 3. Los patriarcas dan bendi- la dirección del Quórum de tigos especiales del nom-
maestro y diácono (D. y C. ciones patriarcales (véase los Doce Apóstoles (véase bre de Cristo en todo el
107:12). D. y C. 107:53; 124:91–93). D. y C. 107:25, 34). mundo” (D. y C. 107:23).
ILUSTRACIONES POR HYUN-GYU LEE, WELDEN C. ANDERSEN,
MATTHEW REIER, RUTH SIPUS, CRAIG DIMOND Y JOHN LUKE.
1. Los diáconos reparten la 2. Los maestros tienen 3. Los presbíteros han de “en- 4. Los obispos son pre-
Santa Cena como unos de sus debe- señar, …bautizar y bendecir la sidentes del quórum de
res “velar siempre por los santa cena, y visitar la casa de presbíteros y, como sumos
miembros de la iglesia, y todos los miembros” (D. y C. sacerdotes, presiden so-
estar con ellos y fortalecer- 20:46–47). bre todos los miembros
los” (D. y C. 20:53). del barrio (véase D. y C.
107:87–88). ◼
“Y sin sus ordenanzas y la autoridad del
sacerdocio, el poder de la divinidad no
se manifiesta a los hombres en la carne”
(D. y C. 84:21).
Para más información, véase Principios del Evangelio, 2009, págs. 67–80; Leales a la Fe, 2004, págs. 124–128; y D. y C. 20:38–79; 84:1–44; 107.
Junio de 2010 15
18. Por Mark L. Grover
N
“ unca le pedí a Dios nada que luego Él no me del sacerdocio. Mi esposa era consciente de mi inquietud
diera”, decía mi esposa Deborah. Esa declaración en cuanto a dar bendiciones y pocas veces pidió la ayuda
aún me asombra, aunque estuve con ella a lo largo espiritual adicional que tal vez deseara.
de su cumplimiento. Probablemente también asombre a En marzo de 1989, cuando el doctor nos informó que
todos aquellos que sepan acerca de la lucha de siete años mi esposa tenía cáncer, nuestras vidas cambiaron. Debido
que Deborah tuvo con lupus sistémico, los dos años de a la naturaleza extraña de su cáncer, los médicos no lo
lucha con cáncer de mama y su fallecimiento el 19 de habían detectado por dos años. Cuando finalmente se
septiembre de 1990. Pero aquellos que estén asombrados diagnosticó, se había extendido y las posibilidades de que
tal vez no entiendan las bendiciones del sacerdocio ni ella se recuperara habían disminuido considerablemente.
su cumplimiento. Fue con dificultad que aprendí por mí Sabiendo que estábamos en una lucha que no podíamos
mismo lo que significa poseer el sacerdocio y ejercerlo ganar solos, abrimos nuestra vida aún más a la ayuda
para bendecir a los demás. espiritual. Nuestro barrio ayunó por Deborah y aceptamos
Aunque mis dos padres eran activos en la Iglesia y con agradecimiento el cuidado que le brindó la Sociedad
fieles a sus preceptos, no recuerdo que el sacerdocio de Socorro. Su batalla se convirtió en una que muchos
fuera una influencia espiritual específica en mi niñez. No lucharon. Un amigo que se había sometido a la misma
recuerdo haber estado lo suficientemente enfermo como quimioterapia que mi esposa iba a recibir, nos dijo que
para necesitar una bendición ni que se administraran ben- durante las etapas más difíciles del tratamiento había pe-
diciones del sacerdocio a otros miembros de mi familia. dido y recibido bendiciones del sacerdocio. Nos aconsejó
Esa falta de énfasis en las bendiciones del sacerdo- que hiciéramos lo mismo; buscar la ayuda espiritual a fin
cio se transmitió a mi propia familia cuando me casé y de soportar los efectos de los tratamientos.
Las bendiciones
del sacerdocio
APRENDER A CONFIAR EN DIOS
mi esposa y yo tuvimos hijos. Yo daba bendiciones del La quimioterapia fue difícil. Mi esposa tuvo todas las
sacerdocio si alguien estaba gravemente enfermo o iba reacciones esperadas. Después de un tratamiento se sen-
a tener una operación. También le di a mi esposa bendi- tía enferma durante varios días; pasaba la mayor parte de
ciones para recibir ayuda emocional, pero esas ocasiones los días en cama y comer era un esfuerzo; pero poco a
fueron escasas. poco aprendimos a afrontar cada reto de la mejor manera
Para mí, dar una bendición siempre era una experiencia posible.
positiva, pero una falta de entendimiento y una escasez de Durante esa difícil etapa, mi esposa, como había
confianza en mí mismo limitaron el ejercicio de esa fun- aconsejado nuestro amigo, me pidió bendiciones del
ción del sacerdocio. Luchaba por saber qué palabras usar, sacerdocio. Le di una bendición para ayudarle a calmar
inseguro de si lo que me venía a la mente era realmente lo la ansiedad que tenía la primera semana de quimiotera-
que Dios quería. pia. Por medio de una bendición del sacerdocio, el temor
Esa situación no cambió mucho cuando mi esposa que acompaña a una operación, aunque no se eliminó
descubrió que sufría lupus sistémico. Esos años de batallar del todo, disminuyó. Al poner las manos sobre su cabeza
con una enfermedad que produce agotamiento e incomo- y bendecirla, los largos períodos de vómitos cesaron
didad recibieron la ayuda de alguna que otra bendición y el sueño reemplazó a las noches sin descanso. Esas
16 L i a h o n a
19. Se cumplieron
todas las ben-
diciones, aun
cuando no reci-
bimos lo que más
deseábamos.
ILUSTRACIONES POR BRIAN CALL.
20. bendiciones nos dieron promesas de ayuda y consuelo, Después de que Deborah terminó sus tratamientos,
entremezcladas con indicios del futuro. Nos llenaron de comenzamos la difícil etapa de esperar para ver si los
calidez y alegría. medicamentos habían surtido efecto. Disfrutamos de esa
Ojalá pudiera decir que dar bendiciones me resultó época libre de citas con el médico, pruebas y tratamientos.
más fácil, pero no puedo. Di las bendiciones solicitadas, Sin embargo, en el fondo existía el temor de que algún
pero mi dificultad al ejercer el sacerdocio siguió presente. resto de cáncer hubiera resistido el bombardeo de los
Nunca le mencioné mi incomodidad a mi esposa, pero venenosos medicamentos contra el cáncer y que estuviera
ella podía percibir mi renuencia. Sin embargo, éstas fueron volviendo a surgir.
pruebas difíciles y ella sabía que tenía derecho a recibir Poco a poco, pequeñas señales físicas nos convencieron
ayuda y que yo era el conducto por el cual ella podía reci- de nuestro más grande temor: los tratamientos no habían
birla; de modo que cuando necesitaba ayuda, la pedía. tenido éxito. Los médicos eran optimistas, pero nosotros
sabíamos que era cuestión de tiempo.
Los últimos seis meses de vida de Deborah fueron
EN ARMONÍA CON increíblemente tranquilos. Después de que fracasó un úl-
SU VOLUNTAD timo procedimiento, decidimos suspender los tratamientos
“Al ejercer el poder indudable del sa- e irnos a casa para disfrutar del tiempo que nos quedaba.
cerdocio de Dios y conforme atesore- Algunas personas tal vez no crean que fueron meses mara-
mos Su promesa de que Él escuchará villosos, pero fue el mejor tiempo de mi vida.
y contestará la oración de fe, siempre Durante esa época, algunos amigos y parientes preo-
debemos recordar que la fe y el poder cupados sugirieron que teníamos que ser más resueltos
sanador del sacerdocio no pueden producir un con el Señor en nuestra batalla por salvar la vida de mi
resultado contrario a la voluntad de Aquel de quien esposa. Me dijeron que yo tenía el sacerdocio y que
es este sacerdocio. Este principio se enseña en la debía usarlo para curarla. Aunque comprendía sus sen-
revelación que ordena que los élderes de la Iglesia timientos, estos amigos no entendían lo que pasaba.
pongan las manos sobre los enfermos. La promesa No había nada que yo quisiera más que prometerle a
del Señor es que ‘el que tuviere fe en mí para ser Deborah que viviría, pero esas palabras nunca llegaron
sanado, y no estuviere señalado para morir, sanará’ cuando le daba una bendición. No hay nada que ella
( D. y C. 42:48; cursiva agregada)”.
deseara más que recibir una bendición de salud, pero
Élder Dallin H. Oaks, del Quórum de los Doce Apóstoles,
“Sanar a los enfermos”, Liahona, mayo de 2010, pág. 50.
nunca sintió que debía pedirla. Los dos creíamos en los
milagros, pero también reconocíamos nuestra perspec-
tiva limitada en cuanto a una experiencia que es parte de
Antes de dar una bendición, yo sabía con qué la quería un plan eterno.
bendecir: más que cualquier otra cosa quería bendecirla Lo que sí ocurrió fue un milagro más grande. En las
para que sanara; y ella quería eso también. Pero esa ben- bendiciones nunca se le prometió vivir, pero sí se le dio la
dición nunca llegó. Lo que sí llegaron fueron bendiciones indiscutible seguridad de que lo que pasaba era la volun-
de consuelo, las cuales no eliminaron las pruebas, pero tad de Dios. No se le prometió que sería fácil, pero sí se
hicieron que fueran más fáciles de soportar. le dio ayuda para sobrellevar los tiempos difíciles. No se
Poco a poco empecé a comprender mejor cómo fun- le permitió quedarse y criar a nuestros hijos, pero se le
cionan el sacerdocio y las bendiciones del sacerdocio. Dar aseguró que tendría lazos eternos. Ella falleció con poco
bendiciones no era una herramienta para obtener lo que dolor y molestias, con la familia a su lado.
yo quería, sino una manera de recibir la ayuda necesaria. Sé que Dios vive y se preocupa profundamente por
Aprendí a confiar en el Señor y en Su voluntad, en vez de nosotros. Él nos brinda consuelo y ayuda cuando necesita-
en lo que yo pensaba que se debía hacer. Obtuve con- mos fortaleza y entendimiento. Aunque la vida sea difícil,
fianza en que las palabras que me venían a la mente en el Señor ha prometido ayudarnos en nuestras pruebas, y
verdad eran las palabras que Dios quería que yo dijera; y una manera en que viene la ayuda es por medio de las
aunque dar bendiciones nunca me ha resultado fácil, he bendiciones del sacerdocio. Sabiendo esto, mi esposa
aprendido a confiar en los sentimientos que tengo cuando pudo decir: “Nunca le pedí a Dios nada que luego Él no
doy una bendición. me diera”. ◼
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21. NUES T RO HOG A R , NUES T R A FA MILIA
El poder de un buen ejemplo
Por Jerry Stringam
E
n abril de 1992 mi familia y “Entonces, ¿vas a salir con ella?”,
yo vivíamos en Provo, Utah, pregunté.
adonde nos habíamos tras- “Dijo que le gustaría ir”, contestó,
ladado desde Canadá para que yo “pero me dijo que la llamara después
estudiara ingeniería en la Universidad de que volviera de la sesión del
Brigham Young. Mi hijo Jase, que sacerdocio”. Cabizbajo y con una
tenía 17 años, se hizo amigo de una expresión de desánimo, se fue
jovencita llamada Krista. a su cuarto.
La tarde del sábado de la confe- Fue como si algo me
rencia general, Jase entró en la sala hubiera sacudido. Me
y preguntó si podía usar el auto para había criado en el sur de
llevar a Krista a tomar una leche Alberta, a unos 130 km
malteada. Le lancé las llaves y él fue del centro de estaca. Allí que acababa de ser ordenado diá-
a la cocina a llamarla por teléfono. nadie esperaba que yo, cono: “Cámbiense de ropa; tenemos
Yo escuchaba sólo un lado de la ni mis padres, que tenían cargos de 10 minutos para llegar a la sesión del
conversación, que fue algo así: liderazgo en nuestra rama, asistiéra- sacerdocio en el centro de estaca”.
mos a las sesiones de la conferencia, Me apresuré a prepararme y, cuando
“Hola, Krista;
y menos a la sesión del sacerdocio; salí de mi habitación, los dos mucha-
ahora alguien lo daba por sentado. chos estaban listos y nos dirigimos al
habla Jase. ¿Cómo debía reaccionar ante la ex-
presión de tristeza de mi hijo cuando
automóvil.
No recuerdo muy bien los dis-
Estaba pensando si te se dirigió a su cuarto? Sabía que mi cursos, pero recuerdo que sentimos
gustaría salir a tomar decisión sentaría un el Espíritu. Fue bueno estar en la
una leche malteada”. precedente para los sesión del sacerdocio con mis hi-
Silencio. años futuros. jos. Cuando regresamos a casa, Jase
“¿Quieres decir Me levanté de se sentía satisfecho de sí mismo, y
después de la reu- la silla y desde eso me hizo sentir bien a mí. Llamó
nión del sacerdocio? el pasillo llamé a Krista y salieron a tomar leches
Bueno, está bien; te a Jase y a mi malteadas.
llamaré después. segundo hijo, En las dos décadas que han pa-
Nos vemos”. sado desde ese día, los poseedores
del sacerdocio de nuestra familia no
han dejado de asistir a ninguna se-
Jase colgó el sión del sacerdocio de la conferencia
teléfono y volvió general. Gracias a que una recta jo-
ILUSTRACIONES POR ROGER MOTZKUS.
a entrar en la vencita defendió sus creencias, nues-
sala. tra familia tuvo la oportunidad de
cambiar, y aún seguimos escuchando
las palabras de los profetas de los
últimos días y sentimos el Espíritu
en la sesión del sacerdocio de la
conferencia general. ◼
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